Educación

Catalunya prepara a contra reloj un curso con miles de profesores nuevos asignados in extremis en julio

Educació asignó el destino de 60.000 docentes el 26 de julio, fecha en que las direcciones conocieron sus plantillas

Las plazas docentes a medida en escuelas e institutos: ¿garantía para proyectos educativos singulares o puerta abierta a formar plantillas a dedo?

Aula vacía de una escuela catalana, este verano.

Aula vacía de una escuela catalana, este verano. / Zowy Voeten

Helena López

Helena López

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Las primeras persianas han empezado a levantarse este lunes en colegios e institutos catalanes. Aunque oficialmente las vacaciones para el conjunto del profesorado, incluidos los integrantes de los equipos directivos, no terminan hasta el 2 de septiembre, no son pocos los directores que han comenzado a ir a sus centros ya este lunes para ponerse manos a la obra en la compleja organización del inicio de curso, que se prevé movido. De hecho, las reuniones virtuales hace días que se gestan. El reto es mayúsculo: organizar las plantillas con los 65.500 docentes que participaron en el proceso de asignación de julio, que no se resolvió hasta el pasado 26 de julio, hace justo un mes. Un retraso que provocará que miles de docentes –el número concreto es imposible de determinar, porque muchos de ellos ya trabajaban en los centros a los que han sido adjudicados– pisen por primera vez sus nuevas escuelas o institutos solo una semana antes del inicio de las clases, el próximo día 9 en primaria y ESO, con todo lo que eso conlleva.

Este lunes se cierra la nueva bolsa de 'sustitutos fijos' y este martes se harán los nombramientos de las plazas vacantes tras las adjudicaciones del pasado mes de julio

Tiempo récord en el que tendrán que adaptarse no solo al centro físicamente –dónde aparcar la bicicleta, dónde está la fotocopiadora, el baño, la fuente o la máquina del café–, sino a aspectos bastante más complejos, como conocer a sus compañeros, sobre todo a los maestros paralelos, con los que tendrán que trabajar durante todo el curso. O la metodología y el proyecto de centro. O la realidad de su alumnado. O, detalle nada menor, las materias concretas que impartirán (Matemáticas en segundo de ESO, Educación Física en inglés en cuarto de primaria, o llevar el aula de acogida).

De estos 65.000 profesores, 31.153 son nuevos funcionarios salidos del macroproceso de estabilización de los dos últimos años (entre el concurso de méritos, las oposiciones 'light' del año pasado y las ordinarias de este año) y el resto son funcionarios que han solicitado cambiar de centro e interinos. Tras el proceso, el sistema educativo público catalán contará con un 5,6% de interinos estructurales (adaptándose a las directrices europeas, que obligaban a Catalunya a reducir el casi 40% de interinos del que partía).

Proceso todavía abierto

Además del tremendo 'tetris' de horarios que los centros educativos están haciendo tras las últimas asignaciones, este lunes, 26 de agosto, también termina el periodo de solicitud para formar parte de los Grupos Estables de Sustituciones, cuyas asignaciones se darán a conocer este jueves, día 29, y supondrán contratos de todo el curso, de 1 de septiembre al 31 de agosto, para un equipo fijo de docentes sustitutos (se han abierto 2.140 plazas para los distintos servicios territoriales) con el fin de agilizar la cobertura de bajas, un mal endémico en el sistema educativo.

La necesidad de unas plantillas estables fue uno de los temas que más se puso sobre la mesa tras los malos resultados en PISA

Formar parte de estos GES seguirá siendo precario para los docentes, pero, como mínimo, supondrá un sueldo todo el año y no tener que estar esperando en casa los nombramientos de cobertura de bajas. Tendrán una plaza itinerante fija y, entre sustitución y sustitución, harán funciones de apoyo en el último centro asignado.

En paralelo, este martes habrá unos nuevos nombramientos de plazas, con todas las que quedaron en los centros sin cubrir tras las adjudicaciones de finales de julio (excedencias, jubilaciones a 31 de agosto...).

"Lo que añade complejidad a esta situación son las 17.000 plazas perfiladas [las que los centros pueden elegir según sus proyectos] y que bloquean puestos a los que podrían optar docentes funcionarios; de ahí vino el problema de julio", apunta Teresa Esparabé, secretaria general de la federación de educación de CCOO. "Paradójicamente, ahora hay más funcionarios que plazas ordinarias, no perfiladas, para cubrir, lo que ha obligado a colocar a nuevos funcionarios en especialidades que no son las que pidieron en su solicitud", apunta desde UGT Jesús Martín. De hecho, el Departament bloqueó para este curso la creación de nuevas plazas perfiladas -inglés más atención a la diversidad, por ejemplo- para gestionar la asignación de puestos tras el macroproceso.

Asignatura pendiente

La necesidad de unas plantillas estables fue uno de los temas que más se puso sobre la mesa el pasado mes de diciembre tras los malos resultados del alumnado catalán en las últimas pruebas PISA. En principio, una vez los miles de nuevos funcionarios terminen su año de prácticas y obtengan una plaza fija, el resultado debería ser ese. De momento, las últimas adjudicaciones han supuesto un tsunami en centros de máxima complejidad; escuelas e institutos que, por su dureza, concentraban un gran número de docentes interinos (los funcionarios solían evitarlos) que este curso han saltado, como el caso del Baldomer Solà, el instituto-escuela público del barrio de Sant Roc de Badalona del que se han ido 18 profesionales.

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