Encuentro en la Generalitat

Sánchez y Aragonès escenifican el traspaso de nuevas competencias al Govern para allanar la investidura de Illa

Aragonès le exige a Sánchez que se mueva con la nueva financiación y la condonación de la deuda del FLA

Sánchez cierra el traspaso a Cataluña de la gestión del ingreso mínimo para acercar la investidura de Illa

Marta Rovira: "O Sánchez cumple con los acuerdos pendientes o será imposible pactar con el PSC"

La quita del FLA se interpone en la negociación de la investidura de Salvador Illa

Reunión clave entre Aragonès y Sánchez en el Palau de la Generalitat

Reunión clave entre Aragonès y Sánchez en el Palau de la Generalitat / JOSEP LAGO | AFP | VÍDEO: EL PERIÓDICO

Quim Bertomeu

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el president del Govern, Pere Aragonès, se han reunido este miércoles en el Palau de la Generalitat para escenificar el traspaso de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV) a la administración catalana. Se trata de un acuerdo que llevaba casi cuatro años pendiente de cumplirse y que se ha cerrado ahora como gesto del Gobierno para intentar que ERC se avenga en los próximos días a facilitar la investidura de Salvador Illa (PSC) en Catalunya. Es decir, con el traspaso del IMV a la Generalitat, ERC puede exhibir un logro en su gestión que le permita justificar, dentro de unos días, un eventual pacto con los socialistas. Los dos presidentes también se han comprometido a "culminar" otros acuerdos pendientes entre el PSOE y ERC, aunque no han precisado cuáles.

La cita entre presidentes ha durado algo más de una hora y, pese a que ninguno de los dos ha comparecido públicamente, sí han emitido un comunicado conjunto en el que han destacado que el encuentro se ha celebrado en un "clima cordial" y de "normalidad institucional". También han recordado que, aparte del traspaso del Ingreso Mínimo Vital, esta semana se ha cerrado una importante inyección de recursos a la Generalitat para Rodalies, becas e investigación científica. Esto también hay que interpretarlo como un movimiento del Gobierno para cumplir compromisos pendientes con ERC y, así, acercar la investidura de Illa.

Los dos presidentes también se han emplazado a "culminar" los acuerdos pendientes entre el Gobierno y la Generalitat que han ido pactando el PSOE y ERC en los últimos años. ¿Cuáles son? Principalmente, uno, la condonación por parte del Estado de 15.000 millones deuda que tiene la Generalitat por haberse acogido durante años al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Fuentes del Govern aseguran que Aragonès así se lo ha trasladado a Sánchez, además de pedirle que acelere la transferencia de recursos para la instalación en Catalunya de un centro tecnológico de producción de chips. No ha salido ninguno plazo concreto para el cumplimiento. "Sánchez tiene que moverse", aseguran desde la plaza Sant Jaume.

Fuentes de la Moncloa, en cambio, han destacado la apuesta del presidente del Gobierno en el último lustro para recuperar las relaciones con la Generalitat, que se rompieron con la declaración de independencia de 2017 y la posterior intervención de la autonomía catalana por parte del entonces Gobierno de Mariano Rajoy. "Esa ha sido la vocación del Gobierno hasta ahora, y esa será la vocación que se mantenga con el futuro Govern que se decida en Catalunya", han señalado estas fuentes.

Diálogo institucional

Tras la reunión, sí han comparecido por separado la ministra de Inclusión y Seguridad Social, Elma Saiz, y el conseller de Derechos Sociales, Carles Campuzano. Han sido ellos los elegidos porque habían sido los encargados, en los últimos meses, de pulir los flecos del traspaso del Ingreso Mínimo Vital. Los dos han querido desvincular la reunión entre presidentes de hoy de la investidura de Illa, y han destacado la recuperación del diálogo entre administraciones. Campuzano ha defendido que uno de los "legados" del president Aragonès será precisamente este, el haber recuperado la "dignidad de las instituciones" y la "vía política" para abordar el conflicto catalán.

Pere Aragonès y Pedro Sánchez este miércoles en el Palau de la Generalitat.

Pere Aragonès y Pedro Sánchez este miércoles en el Palau de la Generalitat. / Marc Asensio Clupés

Pero, aunque nadie quiera admitirlo en público, la reunión de este miércoles entre Sánchez y Aragonès ha sido un paso más en la dirección de acercar a ERC a un pacto con el PSC para la investidura de Illa. ERC está consiguiendo que el PSOE cumpla con varios de los acuerdos pendientes para así poder justificar, ante los ciudadanos y la militancia, un eventual nuevo pacto con los socialistas. Para que este pacto sea posible habrá que desencallar también, en la negociación entre el PSC y ERC, la cuestión de la nueva financiación "singular" que ERC reclama para Catalunya. Precisamente, Aragonès le ha pedido a Sánchez que "se tiene que mover en esta cuestión". Los republicanos plantean que Catalunya tenga un sistema como el concierto económico vasco, algo que los socialistas no ven asumible. En la medida que encuentren una solución para este problema, la investidura de Illa estará más cerca.

Quinta reunión en tres años

La de este miércoles ha sido la quinta reunión entre los dos presidentes desde que en mayo de 2021 Aragonès accedió a la jefatura de la Generalitat. Dos de ellas se han celebrado en la Moncloa -junio 2021 y julio de 2022- y tres en la sede del ejecutivo catalán -setiembre de 2021, diciembre de 2023 y la de hoy-. Las cuatro primeras citas tuvieron el 'procés' como elemento principal de discusión -los indultos, la reforma del Código Penal y el referéndum-, mientras que este miércoles se ha debatido sobre todo sobre las competencias de la Generalitat.

Este cambio se debe, en parte, al vuelco político de las últimas elecciones en Catalunya. El PSC se impuso con claridad y, salvo sorpresa, llegará en las próximas semanas a la presidencia de la Generalitat. Esto ha hecho que ERC, en sus últimos días al frente del Govern, se haya centrado en intentar subir el techo competencial de la Generalitat -con Rodalies, con el Ingreso Mínimo Vital o con la financiación- y haya dejado las reivindicaciones del 'procés' para tiempos mejores.