Obituario

Muere Roberto Linguanotto, conocido como ‘el padre del tiramisú’

El pastelero italiano reformuló y modernizó el célebre postre en los años sesenta del siglo pasado

El tiramisú de Eugeni de Diego.

El tiramisú de Eugeni de Diego. / Planeta Gastro

Irene Savio

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Roberto Linguanotto, conocido por los medios italianos como ‘el padre del tiramisú’, ha fallecido a los 81 años, según se ha informado este lunes. Linguanotto era un famoso cocinero y pastelero en Le Beccherie, un restaurante en Treviso, en el norte de Italia, donde junto a Alba De Pillo, esposa del dueño del local, redescubrió y popularizó el célebre postre de café, bizcocho y mascarpone.

Este descubrimiento ocurrió a principios de la carrera de Linguanotto en la década de los 60 del siglo pasado. Sin embargo, existen varias teorías sobre cómo el chef llegó a la receta actual del tiramisú.

Una de estas teorías sugiere que Linguanotto reformuló este postre basándose en un ponche de huevo que solían consumir los hombres que visitaban una casa de citas cercana. Lo que podría explicar el nombre del postre, que en dialecto véneto significa "tira de mí".

Un error

Otra versión, por otro lado, indica que Linguanotto lo creó por accidente mientras intentaba hacer helado de vainilla; al caerle mascarpone en un bol con huevos y azúcar, probó la mezcla y encontró que el resultado era delicioso. Fue entonces cuando llamó a De Pillo, y juntos perfeccionaron el plato añadiendo bizcochos de soletilla mojados en café y espolvoreando cacao en polvo. 

De igual modo, el fallecimiento de Linguanotto ha vuelto a evocar que otras versiones sobre el nacimiento del conocido postre, cuyos orígenes podrían remitir a un gran duque de Siena del siglo XVII o incluso a la dueña de un burdel, que vivía en la propia Treviso, del siglo XIX.

Pésames

Sea como fuere, la muerte de Linguanotto ha provocado conmoción en Italia, un país en el que la gastronomía mueve millones de euros y donde el tiramisú es el postre favorito de ocho de cada diez italianos. Tanto es así que la muerte del pastelero no pasó inadvertida ni en la política del país transalpino. Ejemplo de ello es el de Luca Zaia, el gobernador de la región de Véneto, quien quiso dar públicamente su pésame. 

"Me sumo al pésame por el fallecimiento de Roberto Linguanotto, quien marcó un antes y un después en la pastelería", ha dicho Zaia. "El tiramisú es hoy una excelencia culinaria reconocida en todo el mundo y el mérito de tal éxito también se debe a su maestría como pastelero y a su deseo de hacer único e inimitable nuestro manjar veneciano, haciendo que el tiramisú destaque entre los postres nacionales e internacionales", ha añadido. 

En la misma línea, Francesco Redi, organizador de la Copa Mundial del Tiramisú, aprovechó para rendir homenaje al pastelero. "Le recordaremos con cariño y con la dulzura con la que siempre le distinguió. Él y su familia siempre nos apoyaron desde nuestros inicios y le estamos agradecidos, ya que, sin su invención, no existiría este movimiento de amantes del tiramisú", ha detallado Redi.