Educación en Catalunya

Dos profesores de Manresa recogen casi 5.000 firmas para cambiar el sistema de enseñanza

Reivindican la cultura del esfuerzo y opinan que se ha demonizado memorizar o repetir curso

Los docentes de ESO pinchan en empoderamiento digital: las profesoras, las menos motivadas

Florenci Vallès y Lídia Ribas, dos profesores de Manresa.

Florenci Vallès y Lídia Ribas, dos profesores de Manresa. / Axel Casas

Jordi Morros

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Sacudir el actual sistema de enseñanza de secundaria para darle más prestigio y mayor calidad. Este es el objetivo de los profesores de secundaria de Manresa Florenci Vallès y Lídia Ribas. Han elaborado un manifiesto para la mejora de la enseñanza secundaria de Catalunya que ha recogido ya más de 4.500 firmas de adhesión. Vallès, jubilado recientemente, ha estado 35 cursos trabajando de profesor en varios institutos, y Ribas es actualmente profesora de clásicas en Gerbert de Aurillac de Sant Fruitós.

Consideran que buena parte de los adolescentes que obtienen el título de graduado de la ESO tiene dificultades de comprensión lectora, poca cultura científica y del ámbito de las humanidades, poco conocimiento de lenguas extranjeras, un vocabulario simple y un nivel de lengua catalana notablemente bajo. A esto debería añadirse, según dice el manifiesto, una excesiva tolerancia con las faltas de disciplina y de respeto por parte de los alumnos.

El detonante

Este panorama, certificado por los últimos resultados de las pruebas PISA y de los exámenes de competencias básicas, según recalcan Ribas y Vallès, hizo que se plantearan hacer el manifiesto para cambiar el modelo pedagógico. Aseguran que "la calidad de la enseñanza nos afecta a todos, y por un buen funcionamiento de la sociedad, la enseñanza es básica".

Proponen medidas como potenciar la cultura del esfuerzo. "Es básico", afirman. Ribas considera que "potenciar el esfuerzo y la memoria no es malo, pero se ha demonizado, al igual que tener que repetir curso". Precisan que no se trata de volver atrás, sino "recuperar lo que funcionaba porque lo que está claro es que el conjunto del actual sistema no lo hace".

Felicidad por delante de conocimientos

Piensan que el actual modelo prioriza la "felicidad de los alumnos" en detrimento de su formación académica, opinan que es necesario enseñar a los alumnos que el fracaso es normal y que debe aceptarse, y que hay que evitar que la lucha contra el fracaso escolar suponga aprobar quien no se merece. "Los profesores honestos que aprueban a quien lo merece lo tienen difícil, actualmente. Es prácticamente imposible", afirma Vallès.

También proponen diversas medidas para dignificar la profesión de los docentes, reducir la carga de los trabajos burocráticos o potenciar las aulas de acogida.

Vallès y Ribas aseguran que "si pides más a los alumnos, te dan más", pero que, en cambio, "vamos bajando el nivel", y que esta situación ya ha llegado a la universidad.

Por eso se han propuesto "sacudir el sistema, y conciencias", devolver el prestigio que consideran que ha perdido la enseñanza secundaria y la profesión de docente, y reivindicar "un modelo de calidad". El manifiesto está en change.org para recoger adhesiones. Va por las 5.000.

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