Illa nombra una treintena de altos cargos y pone en marcha la maquinaria del Govern

El nuevo Govern de la Generalitat quiere empezar a trabajar cuanto antes en esta legislatura y, para ello, necesita dar por zanjada la estructura organizativa interna. Apenas 48 horas después de tomar posesión del cargo, el nuevo president de la Generalitat, Salvador Illa, nombró a todos sus consellers, y este martes, dos semanas más tarde, el PSC ha hecho públicos la mayoría de nombres que formarán parte del núcleo duro del 'sottogoverno' de Illa, es decir, los altos cargos de la administración. En concreto, el Ejecutivo catalán ha designado a 14 de los 16 secretarios generales de los departamentos. Todos menos el de Política Lingüística y Universitats i Recerca.

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En el organigrama del Govern, este cargo es el que está por debajo del puesto de conseller y a la práctica es su mano derecha y su sombra. Se trata de una pieza imprescindible en el engranaje de las consellerias, que junto a los secretarios sectoriales y directores generales, forman la cúpula alta de los departamentos del Govern. Más allá de los números dos, el Ejecutivo también ha desgranado otra decena de estos altos cargos dentro de las consellerias: en total han sido 32 nombramientos.

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Gran peso municipal

Algunos de estos nombres se han hecho públicos estos últimos días, como el número dos de Alícia Romero en la conselleria de Economia i Hisenda, Juli Fernández, quien deberá ayudar a poner en marcha la primera gran prioridad del Govern: los presupuestos. Fernández, actual alcalde de Palafrugell, y Romero serán los encargados de materializar el acuerdo de la financiación singular que el PSC pactó con ERC para la investidura de Illa, una de las cuestiones más importantes de esta legislatura.

La mano derecha de la consellera de Interior será Tomás Carrión, una figura que Núria Parlon recupera de sus cargos de confianza en la alcaldía en Santa Coloma de Gramenet. Carrión ha sido hasta la fecha Director de Seguridad Ciudadana, Espacio Público y Medioambiente de este consistorio, y ahora, junto a Josep Lluís Trapero -recién nombrado director general de los Mossos- formará parte del núcleo duro de la exalcaldesa colomense en esta conselleria.

En ambos casos se trata de cargos recuperados del ámbito municipal del PSC, como también lo es el nuevo secretario general de Territori, Habitatge i Transició Ecològica, Jordi Terrades, que además de exdiputado del PSC, acumula experiencia como concejal en Canovelles y Granollers.

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Si en las consellerias Illa hizo un guiño a exconvergentes y miembros del 'sottogoverno' de Pere Aragonès, en la segunda línea de mandos la estrategia ha cambiado y la prioridad ha sido pescar diputados y cantera municipal para nutrir la nueva estructura. De hecho, de los 14 nombres, diez son personas del partido y cuatro son figuras independientes.

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Secretarías sin carné

Una de las secretarias generales que no tienen carné socialista es la jurista Eva Giménez, que asumirá el cargo en el departamento de Presidencia, encabezado por Albert Dalmau. Tampoco tienen afiliación con el partido el nuevo secretario general de Salut, Narcís Pérez de Puig, que la consellera Olga Pané ha fichado del Hospital del Mar de Barcelona, del que fue gerente hasta el pasado abril. El Govern de Illa ha seguido la misma dinámica a la hora de fichar al secretario de Salut Pública -mando sectorial-, que estará dirigido por el catedrático Esteve Fernández Muñoz, uno de los líderes con más prestigio en España contra el consumo de tabaco.

Cambios en el Parlament

También habrá cambios en el grupo parlamentario del partido a raíz de los nuevos nombramientos. Dos de los actuales diputados del Parlament, Raúl Moreno y Pol Gibert, pasan a formar parte del nuevo organigrama gubernamental como número dos de Drets Socials i Inclusió y Empresa i Treball respectivamente, por lo que en los próximos días se espera que dejen su escaño en la Cámara catalana.