Nueva legislatura

El Govern pone en marcha la elaboración de los presupuestos con ERC y Comuns de socios principales

La Generalitat evita polemizar sobre la nueva financiación y asegura que cumplirá el pacto con ERC "letra por letra"

Illa descarta nuevos presupuestos para este año y se centra en los de 2025

Así quiere gobernar Salvador Illa: de la mano de ERC y Comuns y "alineado" con la Moncloa

Las 12 carpetas del Govern de Salvador Illa

Alícia Romero y Esther Niubó entrando a la Reunión del Consell Executiu

Alícia Romero y Esther Niubó entrando a la Reunión del Consell Executiu / ZOWY VOETEN

Quim Bertomeu
Gisela Boada
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Decisión oficial. Tal y como avanzó este lunes EL PERIÓDICO, el Govern de Salvador Illa ha anunciado formalmente que renuncia a aprobar los presupuestos de 2024 -por falta de tiempo- y se pone manos a la obra para preparar directamente los de 2025. Es una decisión que se ha tomado este martes en Palau de la Generalitat durante en la reunión del Consell Executiu, la segunda desde que Illa fue investido y tomó el mando de la administración catalana.

La intención del Govern es llegar al 1 de enero de 2025 con las cuentas catalanas aprobadas, por lo que el ejecutivo ya ha marcado un calendario para que en noviembre se inicie su tramitación parlamentaria, tal y como ha explicado la portavoz Silvia Paneque, tras la reunión del gabinete. El Govern quiere empezar el año que viene con los deberes hechos, tanto para garantizar los acuerdos de investidura con ERC y Comuns, como para hacer frente "a los retos de país", ha señalado Paneque.

Pactos de investidura

Pese a que inicialmente Illa valoró la posibilidad de aprovechar los presupuestos de la pasada legislatura con Pere Aragonès -que contaron con el apoyo del PSC-, la portavoz del Govern ha asegurado que si bien pueden servir "de base", lo que vertebrará las negociaciones de las cuentas del 2025 serán los pactos de investidura con republicanos y morados. "Son acuerdos extensos, con un nivel de detalle grande", ha señalado la también consellera de Territori, Transició Ecològica i Habitatge, y ha insistido en que la "voluntad" será "dar prioridad al trámite y cumplimiento letra por letra" de lo pactado para que marque las líneas estratégicas de estos presupuestos.

Una de las cuestiones que estará en el punto de mira en la tramitación de estas primeras cuentas será si se incluyen las bases de la "financiación singular" firmada con ERC. Desde el Govern se mantienen prudentes con este tema y se limitan a dar por hecho que se cumplirá todo "aquello escrito" en los próximos cuatro años, aunque este punto, el del nuevo modelo de recaudación de impuestos, no es ahora una prioridad en la conselleria de Economia. "No es una cuestión que solucionaremos de hoy para mañana, ni el mes de septiembre", ha apuntado Paneque, quien no ha aclarado si en estos primeros presupuestos se incluirán cuestiones más específicas que avancen en ese sentido, como los primeros pasos que sirvieran para desarrollar la nueva hacienda catalana.

El president de la Generalitat, Salvador Illa, este martes.

El president de la Generalitat, Salvador Illa, este martes. / Zowy Voeten

Sobre la nueva financiación, lo único que tiene claro el nuevo Govern es que quiere evitar la polémica que se abrió la semana pasada sobre si el sistema pactado entre el PSC y ERC es un "concierto económico" como el vasco o no. "No vamos a entrar en espirales de ruido", ha expresado Paneque. Su argumento es que esta polémica solo "interesa a PP y Junts" para desgastar a la Generalitat, por lo que el Govern alega que quiere centrarse en trabajar discretamente para conseguir esta financiación. Además, ha negado que el nuevo sistema pactado entre socialistas y republicanos perjudique al resto de autonomías. La tesis de Paneque es que una Catalunya bien financiada beneficiará al resto de España como motor económico.

Alícia Romero, consellera de Economia i Hisenda, será la encargada de pilotar durante los próximos meses la negociación de las cuentas, algo que "ocupará toda su actividad" como "prioridad fundamental del Govern", ha matizado la portavoz, tratando de quitar peso a la nueva consellera de la tramitación del sistema de financiación catalán, que será su principal cometido en esta legislatura.

Termómetro para Illa

La elaboración, tramitación y negociación de los presupuestos será una de las primeras pruebas de fuego del Govern de Illa. La cuestión es que servirá para medir si el nuevo president tiene la estabilidad parlamentaria suficiente para afrontar los cuatro años de legislatura que tiene por delante o, por el contrario, se le complica el mandato a las primeras de cambio. Si logra aprobar las cuentas, exhibirá fortaleza parlamentaria. Si no lo hace, aparecerán los primeros síntomas de debilidad.

El PSC tiene 42 diputados, lejos de la mayoría absoluta de 68, por lo que deberá buscar aliados en la oposición. El Govern ya ha iniciado unos primeros contactos con Comuns y ERC, a quienes sitúa como socios potenciales, ya que sus votos ya sirvieron para hacer presidente a Illa y, por lo tanto, son de entrada los votos más asequibles a los que puede acceder el PSC. Además, los socialistas están convencidos de que difícilmente podrán llegar a ningún acuerdo de calado con Junts y el PP, al menos en el tramo inicial de la legislatura.

Plan de Govern

En su segunda reunión del mandato, el ejecutivo catalán también ha aprobado su Plan de Govern para los próximos cuatro años. Esto es la hoja de rota en los que la nueva Generalitat resume todos los compromisos que asume cada departamento. Este plan se estructura en tres grandes ejes: el desarrollo del autogobierno; la apuesta por unos servicios públicos de calidad y una nueva industrialización verde. Para abordar este plan, el Govern se reunirá este fin de semana en el Monestir de Poblet, un encuentro informal del president y de todos el consellers para fijar las prioridades de la legislatura.