Los peores cinco minutos de Matthew Perry: cuando su corazón dejó de latir

Matthew Perry está verdaderamente encantado con el recibimiento que está teniendo 'Amigos y amantes y aquello tan terrible', las memorias que ha publicado recientemente y que han llegado a España gracias a la firma Contraluz y en las que detalla algunos de los episodios más difíciles de su vida. Como ha podido recordar (cosa que no es fácil, puesto que el actor comenta a lo largo y ancho del volumen que siempre o casi siempre estaba bajo los efectos de las drogas), su vida no ha sido un camino de rosas y sus adicciones le han llevado a estar en situaciones límite.

Debido a que las cuenta con humildad y coraje, tanto seguidores del actor como fans incondicionales de 'Friends' están dedicándole palabras de ánimo al actor que le han llegado al fondo de su corazón y, por eso, ha querido contar en otra entrevista con E! News que está feliz por el recibimiento que está teniendo el libro. "A la gente le ha encantado. No rehuí nada y dije la verdad y lo más importante fue el objetivo era ayudar a la gente y sé de muchas personas que ya se han sentido ayudadas por eso", ha comentado el intérprete.

Lo cierto es que, debido a uno de los capítulos que integra este libro, el propio actor casi ni se cree que esté recibiendo todo este amor y cariño y le haya tocado la patata, puesto que en uno de los episodios más complicados de su vida, estuvo a punto de morir cuando su corazón dejó de latir durante cinco minutos. Para empezar, el actor cuenta que en aquella época tomaba a diario infusiones de ketamina, una droga callejera que se hizo muy popular en la década de los 80 y que a día de hoy se usa para aliviar el dolor y tratar la depresión.

"Meterse keta es como dejar que te peguen un palazo de felicidad en toda la cabeza, pero la resaca que provoca es muy dura y el palazo no compensa. No era para mí", reconoce en un principio, cuando cuenta cómo era su día a día cuando estaba en pleno proceso de rehabilitación. La ketamina, junto con la hidrocona y el propofol, que le administraron para someterle a una operación. La combinación de medicamentos fue tal que le paró el corazón durante cinco minutos.

"Me pusieron la inyección a las 11 de la mañana. Me desperté once horas después en otro hospital. Aparentemente, el propofol había detenido mi corazón. Durante cinco minutos. No fue un ataque al corazón, no me detuve, pero nada latía. Me dijeron que un tipo suizo fornido realmente no quería que el chico de 'Friends' muriera en su mesa y me hizo RCP durante los cinco minutos completos, golpeando y golpeando mi pecho. Si no hubiera estado en Friends, ¿Se habría detenido a los tres minutos? ¿'Friends' me salvó la vida otra vez?', cuenta el actor en este libro, que revela que la reanimación fue tan brutal que le rompieron hasta 8 costillas.

Cabe recordar que el protagonista de la 'sitcom' más divertida de los 90, en la que compartió escenario con Jennifer Aniston, Courteney Cox y Lisa Kudrow (y de las tres, por cierto, se enamoró), tuvo que omitir el que también podría haber sido el papel de su vida en 'No mires arriba', película protagonizada por Leonardo DiCaprio y Jennifer Lawrence, debido a la rotura de estos huesos. "Me era imposible sonreír sin que aquello me doliera de la hostia", asegura en sus memorias.