Olvídate de renovar el carnet de conducir: a partir de 2025, nuevas pruebas

Desde la Direcció General de Tráfico (DGT) y el Ministerio del Interior se han anunciado varios cambios importantes en las pruebas para obtener y renovar el carnet de conducir en nuestro país.

Las modificaciones, que llegarán en 2025, obedecen a la cada vez mayor necesidad de asegurar que los conductores que circulan por las carreteras de España están en buenas condiciones tanto físicas como mentales para conducir y así reduicir los accidentes en carretera.

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Conducir un coche o cualquier vehículo no es ninguna tontería: requiere de habilidades técnicas, pero también de sentido común y un buen estado de salud. Por este motivo, desde hace décadas, se han ido estblaciendo tanto pruebas teóricas como prácticas y médicas que buscan asegurar que quienes cojan un coche tengan capacidad para hacerlo de forma segura, sin ponerse en peligro a sí mismos o a los demás.

Las pruebas para obtener el carnet de conducir no solo evalúan el conocimiento de las normas, también la capacidad de cada individuo para reaccionar adecuadamente a las situaciones imprevistas que se dan en la carretera.

Con el desarrollo de las normas de tráfico y el aumento de la edad de la población así como la aparición de nuevas enfermedades, se han tenido que reajustar algunos criterios y pruebas para entregar el carnet de conducir: especialmente para quienes sufren algún tipo de incapacidad física o mental.

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Cambios en las pruebas del carnet de conducir

A partir del próximo 2025 quienes tengan que renovar el carnet de conducir tendránq ue pasar una serie de pruebas adicionales y no se hará de forma automática: la nueva normativa endurece las pruebas físicas y psíquicas haciendo obligatoria la presentación del historial clínico detallado por parte del conductor.

Este cambio no solo será obligatorio para los mayores de 65, sino para cualquier persona que tenga un estado de salud que pueda comprometer su seguridad y la de los demás al volante.

En concreto, la DGT ha identificado nueve categorías de enfermedades que podrían impedir la renovación del carnet, entre ellas afecciones vasculares, cardiacas, psiquiátricas, neurológicas, endocrinas, respiratorias, oncológicas y degenerativas.

Entre los ejemplos específicos incluyen el Alzheimer, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA), el Parkinson y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). En estos casos, dependiendo de la gravedad y el impacto de la enfermedad en la capacidad de conducir, se podrá suspender el carnet de forma temporal o permanente.