El alcalde de Sant Pere de Torelló pide que se considere zona catastrófica tras los desperfectos causados por el granizo

El fuerte granizo que ha caído este viernes en Sant Pere de Torelló (Barcelona) ha provocado daños en los cristales de algunos vehículos y varios avisos a los Bomberos por inundaciones en los bajos de algunos inmuebles, entre otras incidencias.

Fuentes de Bomberos han explicado que a partir de las 17:30 horas han recibido un alud de avisos en la zona por varios incidentes relacionados con la lluvia, principalmente destrozos en vidrios de algunos vehículos y inundaciones en bajos.

El ayuntamiento de Sant Pere de Torelló ha contado hasta mil viviendas del nucleo antiguo dañadas por los efectos de la granizada. A esto se suman los desperfectos de unos 300 coches y 30 de las 40 empresas de un polígono industrial.

Este es el balance que ha hecho esta mañana el alcalde del municipio, Jordi Fàbregas, que explica que ha pedido a la Delegación del Gobierno espanyol la declaración como zona catastrófica.

Además, algunas imágenes compartidas por usuarios de redes sociales han mostrado los destrozos de la lluvia provocados por el granizo, principalmente en vehículos, y también en mobiliario de exteriores de algunas viviendas.

Desactivada la alerta por fuertes tormentas

Protecció Civil de la Generalitat ha desactivado la alerta del plan Inuncat tras finalizar el episodio de tormentas fuertes, que ha afectado especialmente a la Catalunya Central (Osona, Bages y Berguedà) y puntos del ámbito metropolitano (Vallès Oriental, Vallès Occidental y Barcelonès). El teléfono de emergencias 112 ha recibido cerca de 760 llamadas relacionadas con el temporal, de las cuales 218 pertenecen al Vallès Occidental, 141 al Barcelonès y 87 a Osona. Bombers de la Generalitat han atendido un total de 370 incidencias, la mayoría para retirar árboles caídos, elementos inestables de fachadas e inundaciones de bajos.

Los fuertes aguaceros de la tarde del viernes dejaron registros destacables alrededor de los 100 litros en puntos de Osona y el Bages (95 litros en el pantano de Sau y 84 en Sant Salvador de Guardiola), e intensidades de lluvia torrenciales en varias poblaciones: 49,6 litros en media hora en el mismo pantano de Sau y 42,3 litros en Sant Salvador de Guardiola, 35,6 litros en 30 minutos en Castellbisbal, 30,6 litros en Terrassa, 29,4 litros en Massoteres (Segarra) y 28,5 litros en La Quar (Berguedà). Alrededor de las 20.00 horas del viernes fue cuando el teléfono 112 de emergencias recibió más llamadas, un total de 185. Barcelona (117), Sabadell (72), Sant Pere de Torelló (71) y Terrassa (52) fueron las cuatro poblaciones con más llamadas al 112.

Crecimiento del Llobregat y el Cardener

La Agència Catalana de l'Aigua (ACA) informa que el caudal del río Llobregat superó el umbral de alerta en la estación de Castellbell i el Vilar, donde llegó a los 151,6 m³/s, y también en la estación de Sant Vicenç dels Horts, donde el caudal creció hasta los 194 m³/s. Acorde a la información facilitada por la ACA, los caudales van recuperando la normalidad, pero todavía puede haber alguna crecida más en varios puntos de los ríos Llobregat y Cardener.

Afectaciones en la R3 y R4 de Rodalies

Finalmente, el frente de tormentas fuertes afectó también a la circulación de trenes de las líneas R3 y R4 de Rodalies. Poco antes de las 20.00 horas, un tren de la R4 chocó contra un árbol caído sobre la vía en Castellbell i el Vilar. Se tuvo que cortar la circulación de trenes entre Terrassa y Manresa -con servicio alternativo por carretera- y esta madrugada se ha podido restablecer la circulación de convoyes.

Sobre la misma hora, un incendio de catenaria en la R3 a la altura de Torelló obligó a evacuar a los 120 pasajeros de un tren y cortar la circulación entre Vic y Manlleu. Este corte en la R3 y el servicio por carretera entre Vic y Ripoll se ha mantenido hasta este sábado al mediodía. Según informa Renfe, la línea R3 entre Vic y Ripoll ha quedado restablecida a primera hora de la tarde.

Aparte de las incidencias ferroviarias, también hubo algunos cortes de carreteras, como la C-1414 entre Olesa de Montserrat y Esparraguera por desprendimientos de rocas, y la C-37 en el túnel de Bracons (Osona - Garrotxa), cortada unas horas en ambos sentidos por granizo.