Amigos de la mujer asesinada por su marido se ofrecen a ayudar para su repatriación desde Alicante

Amigas y amigos de Margarita V., a la que llamaban Rita, se han mostrado dispuestos a colaborar económicamente en los gastos de incineración y repatriación de la víctima del crimen machista ocurrido el pasado fin de semana en Alicante y si es necesario recaudarán fondos entre los conocidos para sufragar los costes. Asimismo, han criticado la actitud de la familia del marido y presunto asesino de Rita, que enterró el pasado martes a Tomás y se desentendió de su esposa, de 36 años y nacionalidad rusa.

Además de esta ayuda para la incineración y repatriación, dos amigas de Rita, Paula y Laura, han organizado una misa funeral para el jueves a las 19 horas en la iglesia de San Pedro en la playa de San Juan. Las amigas quieren limpiar su nombre y que tenga el respeto que merece tras ser brutalmente asesinada. "Es injusto lo que se dice de ella y es todo mentira", afirma Laura, en referencia a las declaraciones de una amiga de Tomás, la cual afirmó que le llamó el día antes de descubrirse los cadáveres y la calificó como el "demonio" mientras mantenían una disputa conyugal.

Infierno con la madre de él

Todo lo contrario, a tenor de las afirmaciones de un amigo íntimo de la pareja. Estuvo las pasadas fiestas de Hogueras en casa de Tomás y Rita en el Raval Roig y afirma que le dijo que "estaba pasando un infierno con su madre", ya que le explicó que no aceptaba la relación.

Una hermana de Rita está intentando viajar a Alicante desde Rusia, pero aún tardará varios días en llegar dadas las conexiones aéreas actuales derivadas del conflicto bélico. Su intención es estar el lunes en Alicante y celebrar un funeral por Margarita.

Margarita fue golpeada antes de ser asesinada de un tiro en la cabeza por su pareja en Alicante

Los que no se explican los amigos y amigas de la pareja es cómo pudo Tomás disparar a su mujer en la cabeza y luego quitarse la vida. No lo veían capaz de ello y a simple vista aparentaban ser una pareja normal, que ahora querían tener hijos y para ello habían acudido a un centro especializado en tratamientos de fertilidad. "El jueves de la semana pasada les vi salir de la mano de dicho centro" y estaban ilusionados, según este amigo.

Según las amigas que han organizado la misa de despedida a la víctima del crimen machista, Rita vino a España con 17 o 18 años - ahora tenía 36- y en marzo del pasado año se casó con Tomás tras una relación sentimental de diez años. La pareja se conoció en una tienda de moda de Alicante y, aunque ella dejó luego de trabajar, ahora estaba ilusionada con un curso que estaba realizando de patronaje, corte y confección de moda. "Quería montar su propio negocio con un amigo y diseñar ropa", explica Laura.

La amiga señala que Rita "era todo bondad hasta que se casó, que cambió un poco y salía menos con nuestro grupo". Según Laura, era "muy alegre, agradable y con ganas de vivir". Coincidió hace más de un mes con Rita y estaba con la alegría de ser madre, una ilusión frustrada para siempre por su marido, que la mató con una escopeta sin que nadie se explique aún el motivo.

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