El timo del instalador

Alerta en España: vuelve una estafa que ya causa problemas en Francia

 La Guardia Civil advierte de que, sobre todo, afecta a ciudadanos de la tercera edad

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“No, nunca y a nadie”: la regla de las ‘tres N’ con los datos personales para evitar estafas

Llave Cerradura Legálitas

Llave Cerradura Legálitas / Michael Dechev

David Sánchez Marín

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La Guardia Civil ha advertido de una nueva modalidad de estafa que, si no vas con cuidado, es muy fácil caer en ella. Siguiendo el Plan Mayor Seguridad, una propuesta de los cuerpos de seguridad del Estado para concienciar a personas de la tercera edad sobre posibles timos, la Benemérita ha lanzado una alerta por redes advirtiendo de un fraude potencialmente peligroso: el timo del instalador.

Este 'modus operandi' llega directo de nuestro país vecino, Francia, donde los medios de comunicación llevan tiempo advirtiendo de su peligro. Con la expansión de esta estafa a través del territorio español, las autoridades han querido poner énfasis en explicar detalladamente el procedimiento y ofrecer algunos consejos para evitar convertirnos en víctimas.

Todo se basa en la confianza

Si toca al timbre de tu puerta una pareja de personas con el mono de trabajo y una caja de herramientas, es normal pensar que les ha enviado la empresa de electricidad o algo por el estilo. Pero cabe la posibilidad de que, en vez de ser trabajadores de la luz, sean ladrones buscando una oportunidad. Esta estafa se basa en las dotes de actuación de los perpetradores y en el abuso de confianza de la víctima. Cuando se le abre la puerta de nuestro hogar a alguien externo tenemos que asegurarnos muy bien de que sus intenciones son verdaderas.

¿Cómo funciona la estafa?

Los estafadores se presentan en domicilios haciéndose pasar por trabajadores de la empresa de la luz, agua, gas u otro servicio. Van vestidos como tal y es posible que lleven algún logotipo de la teórica empresa en la que trabajan. Su prioridad es parecer lo más convincentes posible para conseguir penetrar en el domicilio de la víctima.

Tras abrir la puerta al timador pueden ocurrir dos cosas. Primero, los malhechores pueden simular estar trabajando o realizan un cambio menor innecesario en el cuadro de la luz, por ejemplo. Al finalizar, te entregan una factura que cobrarán ellos mismos. Asimismo, mientras hacen ver que trabajan, aprovecharán para hurtar todo objeto de valor que tengan a mano y puedan esconder o sacar sin problemas.

Por otra parte, también puede ocurrir que, una vez entren en tu hogar, cometan un robo con posible violencia o coacción, dejando a un lado la coartada. El objetivo es superar la barrera que supone la puerta de entrada y, una vez dentro, aprovecharse de la víctima.

Evita ser estafado

Hay que ser muy precavido a la hora de abrir la puerta de casa a cualquier persona desconocida. Los servicios de revisión de las instalaciones o las reparaciones siempre se han de comunicar previamente. Si aparece alguien asegurando que va a hacer una inspección, revisión o instalación sin previo aviso, desconfía. Aunque juren pertenecer a la empresa y que será una reparación muy rápida, la empresa siempre tiene que avisarte con antelación si debe pasar un técnico por tu casa.

Para verificar si te están diciendo la verdad, puedes solicitarles el carné de trabajador correspondiente a la empresa que representan. También puedes llamar a los números oficiales de la empresa y confirmar si es cierto que tenía que ir un técnico a tu casa.

Cómo actuar

Si al hablar con el servicio de atención al cliente les explicas que tienes dudas sobre sus técnicos y crees que te están estafando, ellos te ayudarán a confirmar tus dudas y te aconsejarán sobre cómo actuar. Las empresas de electricidad, gas y agua son las primeras que no quieren que estafadores utilicen su nombre o logotipos para robar dinero.