Abusos sexuales en la escuela

La auditoría de Roca Junyent sobre la pederastia en los Jesuitas evita hablar de "encubrimiento"

El delegado de la orden en Catalunya, Pau Vidal, sí reconoce que encubrieron los abusos en el pasado, protegiendo a los abusadores y el prestigio de la compañía

Los Jesuitas admiten que tenían 44 abusadores y hacen público los nombres de 14 denunciados por alumnos

Ocultación durante décadas: unas cartas revelan que los jesuitas catalanes sabían que Lluís Tó siguió abusando de niños en Bolivia

Víctimas de abusos intentan acceder a la presentación de un informe de los Jesuitas

Víctimas de abusos intentan acceder a la presentación de un informe de los Jesuitas / Europa Press

Guillem Sánchez

Guillem Sánchez

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Las conclusiones de la auditoría interna que el bufete de abogados Roca Junyent ha hecho a la Companyia de Jesús en Catalunya cifran en 145 los casos de abusos sexuales sufridos por alumnos de sus colegios, desde 1948. Hay más de cuarenta pederastas, y los nombres de 14 de estos religiosos han sido citados durante la rueda de prensa de este jueves por el delegado catalán de la orden, Pau Vidal, que se ha comprometido a reparar económicamente a todos afectados. Sin embargo, para sorpresa de algunas de las víctimas, a las que se les ha prohibido acceder a la sala de prensa, los juristas de Roca Junyent contratados por los jesuitas no han detectado "encubrimiento" por parte de la institución.

Cuestionado acerca de esa conclusión, Joan Roca, en representación del bufete Roca Junyent, ha explicado que lo que se desprende de los más de 40 casos que ellos han revisado es que en la institución, en la que prevalecía un funcionamiento "jerárquico", la información no circulaba adecuadamente. Que "la gestión" de cada de abuso sexual conocido por parte de uno de sus miembros docentes no fue adecuada ni transparente. Pero, según su criterio, su auditoría no cree que la organización religiosa encubriera la pederastia. 

Los juristas afirman que la gestión de cada abuso no fue adecuada pero no creen que la orden encubriera la pederastia

La investigación periodística de EL PERIÓDICO ha publicado desde 2019 diversos ejemplos de encubrimiento por parte de la institución. En realidad, el mismo Pau Vidal reconoce abiertamente que los jesuitas encubrieron los abusos sexuales en el pasado, protegiendo a los abusadores y el prestigio de la compañía y dejando a las víctimas de lado. Por eso ha chocado la conclusión de los abogados. 

Joan Roca también ha sido preguntado acerca de cuánto han pagado los jesuitas al bufete por esa auditoría interna pero no ha querido responderlo. Y cuestionado sobre si esa relación contractual ha podido condicionar su papel de auditores, Roca ha admitido que puede haber quien llegue a esa conclusión pero ha asegurado que la voluntad del bufete no ha sido otra que la de ayudar a los actuales responsables de la organización religiosa a gestionar adecuadamente los casos de abusos conocidos y dar pautas para evitar que se cometan más delitos en el futuro. 

Los abusos de Lluís Tó

El sacerdote Lluís Tó es el pederasta que más denuncias internas ha recibido, 25 en total entre 1968 y 1992. Ese año fue condenado por abusos sexuales y enviado a Bolivia. Hasta que EL PERIÓDICO, conjuntamente con TV3, publicó este mes de mayo unas cartas que prueban que los jesuitas catalanes siempre supieron que siguió abusando de menores en ese país, los responsables jesuitas habían mantenido que no constaban abusos de Tó a partir de 1992.

Pau Vidal concedió una entrevista a este diario tras la publicación de esa cartas en la que aclaró que él nunca supo de estos abusos de Tó en Bolivia y añadió que los entonces responsables de la orden no compartieron esa información con los jefes actuales porque todavía hoy, algunos de ellos, no colaboran en el esclarecimiento del pasado porque siguen sin comprender el daño que provocan estos abusos. 

Enric Puiggrós, antecesor de Vidal en el cargo y actual máximo responsable jesuita en España, ha sido preguntado por si él tampoco sabía, como Vidal, de estos abusos de Tó en Bolivia pero no ha querido responder. 

Tensión con las víctimas

Dos de las víctimas, Jordi de la Mata y Laura Calzada, ambos protagonistas del documental de ‘La Fugida’ que ha coproducido este diario, han querido entrar en la sala de prensa. Iban acompañados de sendos representantes de alumnos afectados de los colegios de Casp y Sant Ignasi, los centros con más casos de abusos. Los jesuitas, sin embargo, se han opuesto a que de la Mata y Calzada asistieran a la rueda de prensa y les han ofrecido una sala para seguir por 'streaming' la conferencia, una propuesta que De la Mata y Calzada han rechazado y que ha generado tensión entre ellos y trabajadores de la organización. 

Las víctimas y los representantes de los alumnos han sido muy críticos con el informe de Roca Junyent y con el veto que les ha impedido acceder a la sala de prensa. "¿Qué ahora estamos en el centro?", ha preguntado irónicamente de la Mata. "Estamos en el centro de la calle", se ha respondido. "Creemos que ya es tarde para esto", ha valorado Calzada sobre una auditoría a la que ellos no han tenido acceso y que, en consecuencia, llega a unas "conclusiones" que son "unilaterales".