Exalumnos de los Escolapios en Catalunya acusan de abusos sexuales a nueve sacerdotes

La organización educativa de la Escola Pia de Catalunya, los Escolapios, tienen 20 centros educativos en territorio catalán. Según la propia institución, un total de 9 sacerdotes han sido acusados de abusar sexualmente de alumnos, unos delitos que, como el resto de colegios religiosos, encubrieron. “No hemos estado a la altura. Nuestra vocación es cuidar de los niños y, por parte de algunas personas, esto no se ha hecho correctamente”, afirma en una declaración concedida a EL PERIÓDICO y a TV3 Jordi Vilà i Font, provincial de la orden en Catalunya.  

“Los abusos tenían que haberse cortado desde el primer momento, va en contra de lo que querríamos para cualquier niño. Queremos escuchar a las víctimas, para saber qué escolapios maltrataban o abusaban de los alumnos y ponerlos frente a la justicia”, asegura. El provincial Vilà pide a los exalumnos que tengan información que se pongan en contacto con la institución a través del correo Protecciodelmenor@escolapia.cat. La organización afirma que también ha reparado, en colaboración con el Síndic de Greuges, a algunas víctimas. De momento, el total de personas afectadas ascienden a una quincena. 

Cinco de los religiosos ya han fallecido; de los que siguen con vida solo se conocen los nombres de Manel Sales y Josep Blay; amparándose en la presunción de inocencia y la protección de datos, la orden no ha facilitado el resto

De los nueve sacerdotes acusados por antiguos alumnos, cinco ya han fallecido. “Ya estaban muertos cuando las víctimas se pusieron en contacto con nosotros”, aclara Vilà. En estos casos, “lo que hemos hecho ha sido ponernos a su lado y pedirles perdón a nivel institucional”. 

Manel Sales

Dos de los cuatro sacerdotes que siguen vivos son Manel Sales y Josep Blay. Amparándose en la presunción de inocencia y la protección de datos, los Escolapios no han dado el nombre de los otros dos. 

Sales estuvo en Senegal entre 1980 y 2005 y allí abusó sexualmente de una cifra desconocida de víctimas. Actualmente una comisión en ese país, según Vilà, trata de reparar a los afectados, que superan la veintena. 

Los abusos de Sales salieron a la luz cuando los Escolapios enviaron un comunicado el pasado verano en el que admitían el encubrimiento de la pederastia de este sacerdote durante dos décadas y media.

Josep Blay

Blay fue denunciado en 2016 por abusar sexualmente de tres niñas en la parroquia de Alella (Maresme) entre los años 2008 y 2010. En 2023 fue condenado por un juzgado de Mataró a una multa económica, a pesar de la gravedad de los delitos denunciados. Tras un recurso de las víctimas, ha sido finalmente sentenciado por la Audiencia de Barcelona este mes de junio a una pena de 22 meses de prisión, que no cumplirá. 

En un comunicado, la curia de los Escolapios calificó en 2010 los delitos de Blay de “desliz”. Vilà, que entonces no era provincial de la orden, afirma que este caso no se ha gestionado bien. “Ahora lo haríamos muy diferente. Lo llevaríamos nosotros a la justicia, superaríamos el derecho canónico. Estaríamos al lado de las víctimas”.

Mientras Sales ha sido exclaustrado y secularizado, Blay continúa siendo sacerdote escolapio y reside en un geriátrico de la orden. 

Oriol Tremoleda

Uno de los cinco sacerdotes escolapios acusados de pederastia ya fallecidos es Oriol Tremoleda. EL PERIÓDICO, en un trabajo conjunto con TV3 iniciado a raíz del documental de ‘La Fugida’ que ha animado a más víctimas a denunciar, ha contactado con el exalumno que informó a los Escolapios sobre la pederastia de Tremoleda. El exalumno, cuyas iniciales son G.V., sufrió sus abusos en la Escola Pia de Sant Antoni, en Barcelona, a finales de los 60. 

“Tenía 12 años y no sabía qué ocurría, se trata de una agresión que no supe clasificar”

— Denunciante

“Era una escuela gris, como el resto de la sociedad”, explica G.V. “Suspendí latín y el padre Oriol se ofreció a darme clases particulares. Tendría 12 años. Nos quedamos solos en un espacio de oficinas. Me hizo sentarme sobre sus piernas. Con el libro delante. Comenzó a ponerme las manos por dentro de los pantalones”, recuerda. 

“No sabía qué ocurría. Me sorprendió, era alguien a quien le tenía confianza. Era algo que no me gustaba pero que no entendía. Una agresión que no supe clasificar”, prosigue. “En un momento, Oriol me dio la espalda para hacer algo y aproveché para atarme el cinturón con todas mis fuerzas. Luego intentó meter la mano, pero ya no pudo”. 

"Demasiado cariñoso"

“Lo cuento porque quiero saber si abusó de más alumnos. Quiero que estos delitos se denuncien. A mí me ha puesto de muy mal humor ver que los responsables de la Iglesia española cuestionan los números del Defensor del Pueblo –que estimó, en base a la extrapolación de una estadística, que unas 400.000 personas en España han sufrido abusos sexuales por parte del clero–“. 

Oriol Tremoleda, según los Escolapios, se marchó por su propia voluntad a Estados Unidos en 1971. Quienes le conocieron aseguran que era “demasiado cariñoso con los niños”. 

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