Cuarta sesión del juicio

La exmujer de Mainat: "Yo no quise a mi marido muerto"

La fiscalía y la acusación particular reclaman 13 años de prisión para Ángela Dobrowolski por intento de asesinato

La procesada mantiene que le inyectó un fármaco para adelgazar, aunque los forenses mantienen que solo una sobredosis de insulina podría haberlo provocado el coma que sufrió

 Los forenses subrayan que "solo" la insulina pudo provocar a Mainat la bajada de azúcar que lo dejó en coma

Mainat: "Me cuesta mucho aceptar que mi exmujer pretendiera asesinarme"

Josep Maria Mainat, este jueves, en el juicio contra su exesposa, Ángela Dobrowolski, sentada con el cabello de color rosa.

Josep Maria Mainat, este jueves, en el juicio contra su exesposa, Ángela Dobrowolski, sentada con el cabello de color rosa. / EL PERIÓDICO

J. G. Albalat

J. G. Albalat

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"No, no quise a mi marido muerto, sino que lo quería conmigo". "Le di el sobre de glucosa e hice todo lo posible para salvarle la vida". "Las hipoglucemias eran frecuentes". "Solo le inyecté saxenxa" (una medicación para adelgazar). Esas cuatro frases resumen la línea de defensa que ha esgrimido este jueves Ángela Dobrowolski en el juicio que se celebra contra ella en Barcelona por el presunto intento de asesinato de su expareja, el productor audiovisual y exmiembro de La Trinca Josep Maria Mainat, inyectándole insulina. La procesada solo ha respondido a las preguntas de su abogado en un interrogatorio que ha durado alrededor de una hora y durante el cual Dobrowolski ha llorado en varias ocasiones. El juicio se prologará este viernes con los informes de las acusaciones y la defensa, y quedará visto para sentencia.

"Le di el sobre de glucosa e hice todo lo posible para salvarle la vida"

— Ángela Dobrowolski, acusada

La fiscalía y la acusación particular, ejercida por la abogada Olga Tubau, han solicitado en sus conclusiones definitivas para Dobrowolski una pena de 13 años de cárcel y han retirado la imputación por revelación de secretos tras haber confirmado Mainat en persona y ante el tribunal este mismo jueves que otorgaba el "perdón" por este delito, atribuido hasta ahora a la procesada por haber accedido al correo personal de su exmarido y haber reenviado a uno suyo documentos testamentarios y sobre el divorcio.

En la cuarta sesión del juicio también se han visionado las grabaciones de las cámaras de seguridad instaladas en el interior del domicilio familiar, en las que se puede ver a la acusada entrando y saliendo de la cocina y abriendo la nevera en varias ocasiones durante la noche del 23 de junio de 2020, cuando el músico entró en coma a causa de una hipoglucemia que los médicos forenses afirman que solo pudo causarle un pinchazo de insulina.

Una "montaña de pastillas"

¿"Usted ha querido matar a su marido?", ha preguntado el abogado defensor a Dobrowolski. "No", ha asegurado la acusada de forma rotunda. Y se ha explayado: "Si yo quisiera matarlo buscaría un lugar más apropiado que una cama en la que dormían mis dos hijos. En la montaña, por ejemplo, donde sufría frecuentes hipoglucemias. Además, ¿por qué llamé al SEM (servicio de emergencias médicas)?". "Temía por su vida", ha precisado. Esa noche, según su versión, ella había consumido droga y no podía dormir.

"Daba vueltas por la casa para buscar droga", ha explicado con la intención de contrarrestar las acusaciones de que se dirigió varias veces a la nevera para coger la insulina. Esa noche, según ella, únicamente le inyectó la medicación para adelgazar, nada más, aunque ha descrito que Mainat se tomaba "30, 40 o 60 pastillas diarias", una "montaña de fármacos", para diferentes cosas, entre ellas combatir el envejecimiento, una obsesión de productor desde la muerte de uno de sus hermanos. "Yo estudié medicina para seguir a Josep Maria en su tratamiento antiedad (....) Éramos una pareja excepcional", ha subrayado. Eso sí, ha admitido, le "reñía" porque "no se cuidaba de la diabetis".

"Mi exmarido tomaba 20, 40 o 60 pastillas diarias, una montaña de fármacos"

Ángela Dobrowolski, acusada

Dobrowolski había abandonado el domicilio familiar meses antes, en enero de 2020. Primero se instaló en un hotel y después en un apartamento."Me fui llorando porque él no me quiso dar un abrazo. Estaba cansado porque yo tenía problemas de adicción a la droga", ha recordado. Ella continuó acudiendo de vez en cuando a la vivienda, sobre todo, para ver a sus dos hijos, fruto del matrimonio con Mainat. "Él hablaba del divorcio, pero no me dijo que hubiera entregado los papeles. En abril estábamos en terapia. Yo lo amaba", ha dicho. La tarde anterior al suceso, el productor le comunicó que al día siguiente iba a presentar la demanda de divorcio y se desató una fuerte discusión.

"Los ronquidos no eran normales"

"Después nos tranquilizamos y hablamos de casarnos otra vez. Cenamos con los niños y nos fuimos los cuatro a dormir. Él con mis hijos en su habitación. Yo no podía dormir y fui de un sitio a otro buscando droga", ha relatado. Esa noche, ha reconocido, inyectó a su exmarido una medicación para adelgazar. "Cuando finalmente me tumbé en mi cama, oí unos ronquidos que no eran normales. Vi la cara de Josep Maria al lado de mi hijo. Estaba al borde de la muerte. Él estaba en coma y se quejó de que estaba mareado. Salté de la cama y cogí un sobre de glucosa. Él se estaba muriendo y lo hice lo mejor posible. No estaba segura de que respirara, le pegué, lo incorporé y le di la glucosa. Yo no le hice daño, ni le dejé sufrir, sino que quería ayudarlo (...) Le reanimé yo. ¿Quién le dio el sobre de glucosa? Yo", ha asegurado Dobrowolski, quien, este viernes, podrá intervenir de nuevo en el turno de última palabra.