Gestión del agua en Catalunya

La desalinizadora flotante de Barcelona no se podrá adjudicar a dedo y no se construirá hasta 2025

Las dificultades técnicas generan dudas sobre la viabilidad y los plazos de la desalinizadora flotante de Barcelona

Con las últimas lluvias y suavizadas las restricciones por sequía, la infraestructura no es una urgencia y no se puede tramitar por la vía de emergencia

La desaliniadora flotante de Barcelona no estará en octubre. Una turista pasea por el puerto este miércoles al mediodía.

La desaliniadora flotante de Barcelona no estará en octubre. Una turista pasea por el puerto este miércoles al mediodía. / Marc Asensio

Guillem Costa

Guillem Costa

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Aumentan las dudas y las incertidumbres sobre la desalinizadora flotante en el puerto de Barcelona anunciada a bombo y platillo por el Govern en abril. En aquel momento se aseguró que estaría lista en octubre. Sin embargo, desde entonces, han aparecido algunas dificultades operativas y técnicas y el Departament d'Acció Climàtica no ha dado ningún detallo nuevo de las supuestas obras.

Hace unas semanas, EL PERIÓDICO ya adelantó que el contrato con la empresa Cox Abengoa no estaba firmado de forma definitiva y que la puerta estaba abierta para que el nuevo Govern no siguiera adelante con los planes para construir la desalinizadora. Ahora, según ha adelantado la cadena SER y ha confirmado este diario, la conselleria ya da por hecho que esta planta no cumplirá los plazos de los que se informó durante la precampaña electoral.

¿Por qué? Básicamente porque debido a las últimas lluvias el proyecto no se podrá adjudicar por la vía de emergencia a la empresa escogida. Con las precipitaciones caídas en Catalunya durante la primavera, las reservas de agua están aseguradas para los próximos meses y el escenario de sequía ya no es de emergencia. Por lo tanto, esta desalinizadora flotante no se puede considerar una urgencia.

Ferrovial y Acciona

Esto obligará al futuvo Ejecutivo catalán a abrir una licitación para que otras empresas puedan optar a construir esta planta. Multinacionales españolas como Ferrovial, Acciona o Cobra ya se han interesado por liderar el proyecto y encargarse de esta planta de más de 100 metros de largo, que podría ser la más grande de Europa de este tipo. Fueron los servicios jurídicos de la Generalitat quienes adviertieron de los inconvenientes de una adjudicación a dedo con el aumento de las reservas de agua como telón de fondo.

A partir de ahora, se organizará un proceso de selección restringido con dos fases. En la primera, las empresas podrán presentar solicitudes de participación en la licitación. Después, ya en la segunda fase, solo podrán presentar propuestas firmes las empresas que la Administración haya seleccionado en la primera fase en función de su solvencia técnica y económica. El anuncio previo de licitación se publicará durante el mes de junio y la adjudicación, si todo sigue como está previsto, será a finales de año.

"Nuestras previsiones eran contratarla por emergencia y disponer de la desalinizadora en octubre, que era cuando se podía entrar en la fase de emergencia 2", ha explicado este miércoles el conseller David Mascort. Sin embargo, como las peores previsiones se han alejado, la desalinizadora ya no es necesaria y la contratación no se puede realizar por la vía de emergencia, asegura Mascort: "No quiero recordar qué ocurrió cuando se contrató por emergencia durante el covid-19. Luego se llamó a declarar ante el juez a algunos cargos". El conseller ha confirmado que los trámites se realizarán de forma ordinaria y anima a la empresa Cox Abengoa a presentarse al concurso junto a otras compañías.

Fuentes de ATL (el ente público de Agua Ter Llobregat) garantizan que la intención es que la desalinizadora flotante sea realidad porque puede ser una solución a futuros periodos de escasez severa. No obstante, si tiene que abrirse una licitación, parece que la decisión definitiva estará en manos del nuevo Govern que entre en el Palau de la Generalitat durante los próximos meses.

¿Es necesaria esta planta flotante, tras las últimas lluvias cuantiosas? Algunas voces dentro de la actual conselleria consultadas por este medio no lo ven del todo claro. Los planes para potabilizar el ámbito del río Besòs avanzan y ya está previsto disponer de dos desalinizadoras fijas en Blanes y Cubelles, a la vez que los embalses aseguran el agua para al menos un año entero.

El futuro de esta desalinizadora flotante dependerá del tiempo que dure la interinidad del Govern de Pere Aragonès y de las intenciones del nuevo Ejecutivo entrante, que posiblemente tendrá la capacidad de frenar o relanzar el proceso para construir esta infraestructura. Acció Climàtica ha informado de que las desalinizadoras portátiles del Alt Empordà se mantienen como estaban previstas: cuatro de ellas entrarán en funcionamiento a finales de este mes de junio o principios de julio.