Catalunya apuesta por sustituir las cubiertas de amianto por placas fotovoltaicas

Catalunya se propone sustituir varias de las cubiertas de amianto que hay en granjas y naves del sector primario por placas fotovoltaicasque sirvan para el autoconsumo. Para conseguirlo, se han invertido 50 millones de euros en ayudas destinadas a subvencionar la retirada del amianto y la instalación de las placas solares. "Erradicar este material es un reto y una prioridad absoluta de este Govern", ha asegurado este viernes el presidente Pere Aragonès.

El objetivo del proyecto es que la eliminación de este material tóxico vaya un paso más allá y sirva para "generar energía y luchar contra el cambio climático", en palabras del jefe del Ejecutivo catalán. Hasta ahora, la mayoría de convocatorias de subvenciones para la retirada del amianto iban dirigidas a particulares. En este caso, de los 50 millones, 40 van destinados a industrias, granjas o edificios donde trabajan agricultores, por lo que, en muchos casos, la podrán aprovechar pequeñas empresas del sector primario. Los otros 10 millones están pensados para particulares que también quieran eliminar cubiertas de amianto, aunque, en este caso, la sustitución por placas fotovoltaicas no irá incluida.

Pequeñas granjas

La Generalitat quiere poner el foco en el sector agroganadero, donde existe gran presencia de amianto, sobre todo en pequeñas producciones que tienen poca capacidad para hacer este tipo de inversiones. Las ayudas variarán en función de las dimensiones que tenga la cubierta que se deba retirar. Además, destacan que las placas solares, al estar en el tejado, no afectarán al entorno.

Las ayudas asumirán el 100% del gasto a la hora de eliminar el amianto: retirada, transporte y tratamiento de los residuos. Un proceso, este último, que se desarrolla en el vertedero de Castellví (Anoia) y que, como avanzó EL PERIÓDICO esta semana, en estos momentos no tiene espacio para depositar todo el amianto que hay en Catalunya.

Aragonès ha presentado el proyecto en el Mas El Terròs, una granja de Sant Vicenç de Castellet (Bages) que tiene amianto en parte de su cubierta. Con las futuras placas fotovoltaicas, el edificio será más eficiente. Lo ha acompañado la 'consellera' de Acció Climàtica, Teresa Jordà, que ha sacado pecho por la inversión. "Es la línea de ayudas más elevada de la historia para retirar amianto", ha asegurado.

Plan ambicioso

El proceso burocrático se aprobará en abril y lo gestionará la Agencia de Residuos de Catalunya. Forma parte del plan para la erradicación del amianto que se aprobó el martes de esta semana. Según han explicado Aragonès y Jordà, el plan incluirá la elaboración de un censo del material existente en Catalunya. Costará 700.000 euros y trabajará en ello el instituto cartográfico de la Generalitat, siguiendo el ejemplo de lo que se hizo con Badia del Vallès, donde se diseñó un mapa con todo el amianto que por retirar.

Además, se compromete a desplegar una nueva ley que agilice los trámites que el Govern tiene previsto aprobar este mismo año. Aseguran los responsables de la 'conselleria' que se ha realizado una consulta pública y que habrá suficientes apoyos para que pueda superar el trámite parlamentario.