Las Urgencias no hacen vacaciones: Sant Pau atiende más de 400 pacientes al día

Hace años, los veranos para hospitales como el de Sant Pau, en Barcelona, eran más tranquilos que el resto del año, ya que se producía una bajada de actividad. Eso ya no es así. "Hace una década que la actividad no baja en verano. Las visitas a Urgencias no dejan de subir porque la población está más envejecida, hay más enfermos crónicos y mucha de esta gente no se marcha de vacaciones", explica Maite Álvarez, médica del Servicio de Urgencias de Sant Pau. En concreto la población de referencia de este hospital, ubicado en el barrio del Guinardó, está especialmente envejecida, lo que tiene un impacto directo en este hospital. "Tenemos más de 400 entradas en Urgencias cada día", asegura.

Golpes de calor, traumatismos e intoxicaciones alimentarias son las situaciones más habituales

"Las patologías que vemos no divergen mucho de lo que nos encontramos el resto del año", explica Laia Casas, jefa de Enfermería del Proceso Urgente de Sant Pau, mientras da una vuelta por las diferentes áreas de Urgencias que el hospital tiene distribuidas a lo largo de su espacio. Del verano son propios los golpes de calor, si bien por ahora no han tenido más casos que otros años. Creen estas sanitarios que es debido a que julio no ha sido un mes en que haya habido muchos días de calor seguidos. También en verano se ven más traumatismos e intoxicaciones alimentarias. "También tenemos más extranjeros. Hablamos más inglés", señala Álvarez.

Además, las Urgencias también suelen recibir, cada verano y este no está siendo la excepción, más patologías crónicas descompensadas debido al calor. "Y cardiopatías agudas y accidentes cerebrales, como durante todo el año", precisa Casas. Desde el 2020, ademas, las Urgencias de Sant Pau, así como del resto de hospitales, están acostumbradas a ver covid-19. "Tenemos subidas y bajadas. Ahora mismo estamos en una meseta", señala Álvarez.

Resguardados del calor

Sant Pau es el único hospital de Barcelona que, por segundo año consecutivo, forma parte de la red de refugios climáticos de la ciudad. "Está destinado para la gente que, en su casa, no tiene aire acondicionado. Es una forma de que no sufran", precisa esta médica.

Cada día de lunes a viernes, entre las 10 y las 13 horas, se organizan actividades en el vestíbulo del centro para estas personas. El servicio de Urgencias del hospital ofrece cursos de deshidratación. "A la gente mayor le cuesta tener la sensación de sed", precisa la enfermera Laia Casas.

"El problema es cuando se mantiene el calor durante muchos días. Aunque ahora notamos que la gente está más concienciada y tiene más información sobre cómo actuar en episodios de altas temperaturas. Por ejemplo, los centros comerciales también están más adecuados con los aires acondicionados", dice Álvarez. "Aun así, estamos preparados. Sabemos que podemos tener problemas derivados del calor", añade Casas.

Para este mes de agosto auguran una elevada actividad, como la que ha habido a lo largo del mes de julio. Los meses de verano son siempre algo más complicados en todos los hospitales porque, cada año, se cierran camas debido a las vacaciones del personal. Sant Pau se ha librado, de momento, de los recortes que sí sufren otros hospitales,sobre todo de la red del Institut Català de la Salut (ICS). El servicio de Urgencias de este hospital ha estrenado recientemente, además, la 'app' Urgències Sant Pau, destinada al acompañante del enfermo, para que este lo tenga ubicado en todo momento y poder recibir información en tiempo real.

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