Podemos ve "insostenible" al Gobierno: "Si no hay Presupuestos, habrá elecciones en 2025"

Podemos pone fecha de caducidad a la legislatura. El partido de Ione Belarra, cuyos cuatro diputados son necesarios para la gobernabilidad, anticipa el final de los días del actual Gobierno y fija el horizonte de 2025 como fecha probable de elecciones generales anticipadas en caso de que no logren aprobarse los próximos Presupuestos. Una circunstancia que ya parecen asumir en las filas moradas y que supondría una "situación insostenible" para Pedro Sánchez al frente del Ejecutivo.

Desde su salida al Grupo Mixto el pasado diciembre, Podemos ha endurecido sus posiciones hacia el Gobierno, al que acusa de inmovilismo y de falta de ambición en sus políticas. El partido morado ha dejado claro que sus apoyos puntuales en el congreso son sólo un préstamo, y su voto favorable a los decretos o leyes del Ejecutivo siempre se han producido tras numerosos órdagos y arduas negociaciones, con el canal abierto entre dos antiguos compañeros de Gobierno, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, y la exministra y secretaria general de Podemos, Ione Belarra.

En esta ocasión, los morados ven poco margen de negociación para los próximos Presupuestos Generales del Estado y dan por hecho que no verán la luz en el Congreso. Hasta el momento, apuntan, el Gobierno no se ha puesto en contacto con ellos para explorar su posible apoyo, pero denuncian que todas las propuestas que han ido elevando en los últimos meses han sido "sistemáticamente rechazadas", y censuran ahora el "poco entusiasmo" mostrado por Moncloa para sacar adelante unas nuevas cuentas, según admiten fuentes bien situadas.

"Vemos que no hay muchos incentivos en la aritmética parlamentaria para aprobar los Presupuestos y tampoco hay muchas ganas por parte del Gobierno de ser ambicioso", zanjó este lunes la coportavoz de Podemos, María Teresa Pérez, en una rueda de prensa tras la ejecutiva. El partido avanzó que sólo apoyarían unas cuentas en caso de que incluyera "propuestas verdaderamente de izquierdas", y no las "promesas vacuas" que achacaron a Sánchez. Evitaron, sin embargo, adelantar sus exigencias, a la espera de que comience una negociación oficial.

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Si el escepticismo ya cundía en la formación ante la posibilidad de una negociación exitosa de los presupuestos, las palabras de Pedro Sánchez el pasado sábado, cuando dijo que seguiría gobernando "con o sin el poder legislativo", han terminado por sublevar a Podemos, que cree que Sánchez ha renunciado a las cuentas y llegando a acusarle de tener "tics autoritarios": "No se puede gobernar sin el Congreso", advirtió el coportavoz y secretario de Organización morado, Pablo Fernández.

Los morados asumen que Sánchez está allanando el terreno para una nueva prórroga presupuestaria, habiendo renunciado a cualquier pretensión de intentar aprobarlos, ante las serias dudas sobre un eventual apoyo de Junts, que ha endurecido posiciones tras el pacto entre PSOE y ERC para investir a Salvador Illa president de Cataluña y que en octubre afronta su congreso.

A esto, apuntan, se suman las serias dificultades que afrontará el Gobierno para poder dar cumplimiento a los acuerdos firmados con los independentistas, ante el rechazo de la mayoría parlamentaria -y de una parte del propio socio minoritario de la coalición-. Una circunstancia que llevará a que Sánchez no pueda "sacar nada".

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En la cúpula morada se muestran convencidos de que la imposibilidad de aprobar ni medidas ni sacar adelante el proyecto presupuestario lleva a Sánchez a una "situación insostenible" en la que se vería obligado a convocar elecciones generales anticipadas a lo largo del próximo año, ante la "parálisis" legislativa y gubernamental que tendría que afrontar. "Damos por hecho que habrá en 2025", apuntan, en el caso de que deban prorrogarse las cuentas por segunda vez.

Esta cita electoral se presenta para Podemos como la oportunidad de volver a resituarse en el tablero político y ganar terreno a Sumar tras la traumática ruptura con Yolanda Díaz de las últimas generales, donde la exministra Irene Montero fue vetada de las listas y del Consejo de Ministros tras su pulso la anterior legislatura en la crisis del sí es sí.

La formación tiene hasta junio para celebrar su próxima Asamblea Ciudadana, donde deberán renovarse los órganos y en la que Montero, ahora eurodiputada y líder de facto de la formación, podría aspirar a liderar orgánicamente la formación presentándose a la Secretaría General, que ahora recae sobre Ione Belarra, que llegó al cargo tras la renuncia de Pablo Iglesias en 2021.

Unas elecciones generales serían además su trampolín para volver a la política nacional tras su paso por el Parlamento Europeo. Sería además una manera de resarcirse y volver a representar a Podemos en unas listas electorales tras el veto que vivió en las pasadas generales.

Sumar y PSOE pactan presentar las cuentas

Si en Podemos se muestran convencidos de que no habrá cuentas para el próximo año, en Sumar también son conscientes de las dificultades de aprobar las cuentas para el próximo año y admiten que se deben en buena medida a lo "imprevisible" de Junts, que tiene cinco diputados necesarios para lograr mayoría en el Congreso.

El partido de Yolanda Díaz busca exhibir en público el convencimiento de que habrá presupuestos. "Seguimos convencidos de que puede haber Presupuestos. El Gobierno ya ha anunciado que se van a presentar en tiempo y forma y en eso vamos a trabajar", destacó este lunes el portavoz de Sumar y ministro de Cultura Ernest Urtasun, que apuntó a que "ya hay conversaciones abiertas entre PSOE y Sumar" y que tienen el objetivo de "incluir cuestiones clave" en las cuentas, como son la ampliación de permisos de maternidad y paternidad o políticas en materia de vivienda.

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Lejos de las críticas de Podemos hacia el presidente de Gobierno por sus polémicas declaraciones, en Sumar cerraron filas con el ala socialista y apuntaron a que comenzarían una suerte de mediación con el resto de socios de investidura, con los que "intensificaremos contactos", en palabras de Urtasun.

Sin embargo, en privado algunas voces rebajan las expectativas sobre su aprobación. Fuentes bien situadas de la formación defienden que el proyecto presupuestario se presentará sí o sí en el Congreso, tras haber arrancado un acuerdo al PSOE en este sentido. "No va a pasar como la última vez", advierten en la formación de Díaz. Se refieren así a lo sucedido a principios de año, cuando Sumar acusó al ala socialista de renunciar unilateralmente a presentar las cuentas de 2024 ante la imposibilidad de aprobarlas por el adelanto electoral en Cataluña.

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Así, insisten en que la propuesta presupuestaria pactada entre PSOE y Sumar se presentará próximamente -legalmente deben llevarse al Congreso a principios de octubre a más tardar-. Una oportunidad que permitirá exhibir a Yolanda Díaz los acuerdos arrancados al PSOE, aunque estos decaigan después en caso de no ratificarse las cuentas en el Congreso.

Pero, lejos del discurso público, en Sumar dejan las opciones más abiertas al referirse a su aprobación definitiva, reseñando las dificultades y admitiendo la posibilidad de que los presupuestos tengan finalmente que prorrogarse de nuevo. Una circunstancia a la que tratan de restar importancia, al considerar que se seguiría trabajando con unas cuentas "expansivas".