Nueva legislatura

Illa recluye al Govern en Poblet y pone 'deberes' personalizados a cada conseller

El president entrega una 'mission letter' a cada miembro del ejecutivo durante la estancia en el monasterio

Illa descarta nuevos presupuestos para este año y se centra en los de 2025

Tarradellas y el catalanismo: ¿por qué el Govern de Illa se enclaustrará en el Monasterio de Poblet?

‘Mission letters’: Collboni subraya en cartas a sus concejales lo que espera de cada uno

El president de la Generalitat, Salvador Illa, este martes.

El president de la Generalitat, Salvador Illa, este martes. / Zowy Voeten

Quim Bertomeu

Quim Bertomeu

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El nuevo president de la Generalitat, Salvador Illa, se ha llevado este viernes al Govern al Monasterio de Poblet para preparar el inicio del curso político. Una especie de reclusión más política que espiritual y alejada de los focos mediáticos para abordar conseller a conseller las misiones que tiene encomendadas cada departamento. La estancia durará hasta mañana sábado.

Una de las primeras cosas que ha hecho el president al llegar ha sido entregar una 'mission letter' personalizada a cada miembro del Consell Executiu detallando qué espera de ellos y qué objetivos tiene que cumplir. De origen anglosajón, esta 'mission letter' son una especia de 'deberes' que el líder del ejecutivo traslada a su equipo para llevar a cabo durante la legislatura. Lo mismo hizo Jaume Collboni cuando llegó a la Alcaldía de Barcelona.

Uno de los pioneros de estas 'cartas' fue el diplomático Jonathan Powell, jefe de personal en Downing Street de 1997 a 2007, cuando Tony Blair fue primer ministro del Reino Unido. También se ha podido ver utilizando este sistema el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen.

Al margen de estos encargos personalizados, el Govern se ha reunido por la mañana con intervenciones del propio president y de su conseller de Presidencia, Albert Dalmau. Otro de los detalles destacados que deja la jornada es que el presidente y los consellers han viajado juntos en un mismo autobús. Una forma de hacer equipo y, también, de evitar el trajín de 17 coches oficiales.

El plan de jornada matinal también ha incluido una visita al archivo Montserrat Tarradellas i Macià con explicaciones de su directora, Núria Gavarró. La elección de Poblet para recluir al Govern no es casual. Ha pesado en la decisión que el monasterio acoja el archivo del expresidente de la Generalitat. Tarradellas es uno de los faros políticos de Illa, algo que reivindica a menudo en sus discursos.

Por la tarde, Illa visitará el monasterio acompañado por el abad, Rafael Barruè, y volverá a reunir al Ejecutivo. Allí intervendrán uno por uno los consellers para explicar cómo encaran la legislatura. Precisamente, el martes el Consell Executiu anunció que iniciaba la elaboración del Plan de Govern, que es la hoja de ruta donde se recogen todos los compromisos que la Generalitat asume que llevará a cabo.

Estos compromisos se resumen en tres ejes: la apuesta por desarrollar el autogobierno de Catalunya; la defensa de unos servicios públicos de calidad y una industrialización "verde", es decir, respetuosa con el medio ambiente. El encuentro en Poblet servirá para que cada conseller exponga las prioridades que deben figurar en este plan.

Financiación y presupuestos

El primer tramo de la presidencia de Illa estará marcado, sobre todo, por el ámbito económico. Al Govern se le presentan dos retos fundamentales: el primero, negociar con el Estado la nueva financiación de Catalunya que Illa pactó con ERC a cambio de ser investido presidente. No es camino un fácil tanto por la arquitectura legal que deberá armarse para llevarlo a cabo, como porque esta "financiación singular" cuenta con el rechazo la mayoría de autonomías, tanto del PP como del PSOE.

El segundo reto de Illa será la aprobación de los presupuestos de la Generalitat para el 2025. No hay mayor síntoma de estabilidad para un Govern que poder contar con cuentas aprobadas en el año en curso. Illa ha fijado como socios prioritarios para negociar a ERC y los Comuns, que están abiertos a pactar. La cuestión es que en medida afectará a la negociación presupuestaria la situación interna de ERC. Los republicanos no tendrán una nueva dirección con plenos poderes para negociar hasta el 30 de noviembre y está por ver qué legitimidad tiene para negociar la dirección saliente actual. De todo esto, y más, habrá tiempo para hablar estos dos días en Poblet.