CATALUÑA

Sumar abandera la "política útil" tras la investidura de Illa frente a la "teatralización" de Puigdemont

Yolanda Díaz apunta a la apertura de una "nueva etapa" tras asumir el desgaste de apoyar el acuerdo con ERC

Yolanda Díza y Ada Colau en un mitin para las elecciones de mayo de 2023.

Yolanda Díza y Ada Colau en un mitin para las elecciones de mayo de 2023. / JORDI OTIX

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Sumar trata de dejar atrás sus turbulencias internas y se agarra a la investidura de Salvador Illa como una demostración de "política útil". El socio minoritario del Gobierno reivindica su papel para dar la Presidencia al líder del PSC y desdeña la "teatralización" que en las últimas horas ha desempeñado por Carles Puigdemont, que este jueves regresó a España pese a la orden de detención para volver a huir después, y el papel de Junts, que este jueves intentó impedir el Pleno en el Parlament para dilatar la votación y adquirir protagonismo en su boicot.

En las filas de Yolanda Díaz se respiró cierto alivio al ver a Illa convertido en president. El desgaste que han afrontado en las últimas semanas para hacer posible la investidura, con su defensa del acuerdo firmado con ERC y las fuertes tensiones internas que generó, queda en cierta medida compensado por ver su objetivo cumplido: un Govern dominado por la izquierda en el que los Comunes serán cruciales para la gobernabilidad, y evitar al mismo tiempo una eventual repetición electoral que sería letal para su filial catalana.

En la formación habían asumido la erosión por su apoyo al 'cupo' catalán como un mal menor, priorizado la apertura de un nuevo tiempo en Cataluña a la polémica que había generado su respaldo a la cesión fiscal. Hay convicción total en el partido Movimiento Sumar -no así en el resto de formaciones de la coalición de izquierdas- de que el acuerdo con ERC implicará un rediseño del sistema de financiación para todas las comunidades y una suerte de 'café para todos' del que todos los territorios saldrían beneficiados.

El debate se ha avivado esta semana, con las críticas por parte de amplios sectores de la coalición de izquierdas, mientras Sumar aspira a que el asunto se diluya en los próximos meses, al considerar que la valoración final dependerá de la propuesta concreta, que requerirá de una "negociación larga y compleja". "Falta mucho"; dijo el portavoz parlamentario, Iñigo Errejón, el pasado viernes en una entrevista en Hora 25.

Unos pocos minutos después de que el líder del PSC fuera proclamado 'molt honorable', Yolanda Díaz aplaudía la elección como la apertura de una "nueva etapa" en Cataluña y ponía en valor el papel que jugará el partido de Ada Colau en la legislatura. Desde Sumar apuntan a la importancia del movimiento político, al considerar que "llega el momento de la política útil" después de años de "teatralización" durante el procés, y de casi dos décadas de gobiernos independentistas.

La vicepresidenta segunda se pronunciaba después de días de mutismo total, primero sobre las críticas en sus filas que había generado el pacto fiscal con Cataluña, y después sobre el regreso de Puigdemont, uniéndose así al silencio total que se impuso en el Gobierno, que evitaron hacer referencia alguna a la vuelta del prófugo y se limitaron únicamente a hacer comentarios en redes sobre los resultados de España en los Juegos Olímpicos.

"Pasar página"

Por el momento, en Sumar ponen el acento en el cambio que se producirá en el Palau de la Generalitat y los asuntos que ocuparán la agenda pública, en los últimos años dominada por el procés. "Tendríamos que centrarnos más en los acuerdos suscritos", defendía la portavoz del partido, Elisabeth Duval, este jueves en Al Rojo Vivo, de La Sexta. "Eso es lo serio y lo demás queda en un teatro que cada vez interesa menos", continuaba la dirigente. En Sumar trataban de restar importancia a la "teatralización" por parte del independentismo.

Ponen en el centro la consecución del nuevo Gobierno no independentista, algo que implica "pasar página, que se acaben los teatros y que comencemos a hacer políticas que afectan a la vida de la gente y dejan fuera los juegos de ilusionismos", según destacó Duval en otra entrevista para Efe. Aunque la crítica es clara hacia la actuación de Puigdemont y el intento de Junts de boicotear la investidura, las palabras están muy medidas.

Y es que al mismo tiempo en que censuran la actuación del dirigente de Junts, Sumar sigue defendiendo "la aplicación íntegra de la ley de amnistía", que libraría de las consecuencias penales al expresident fugados. El partido de izquierdas insiste así en su discurso, por el que viene acusando a jueces de poner resistencias a su aplicación, más aún después de que el Tribunal Supremo declarase que la malversación que imputan a Puigdemont no es amnistiable.