Regreso de Suiza

Rovira y Junqueras se reencuentran y entierran por unos minutos su batalla por el control de ERC

El expresidente republicano la esperaba en el municipio de Cantallops, la primera parada de Rovira en Catalunya

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Abrazo entre Junqueras y Marta Rovira

Abrazo entre Junqueras y Marta Rovira / David Borrat | EFE

Quim Bertomeu

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La secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha regresado este viernes a Catalunya tras seis años y tres meses en Suiza. Para ella ha sido un día de reencuentros y uno de los más destacados lo ha tenido con el expresidente del partido Oriol Junqueras. El motivo de la singularidad es que Rovira y Junqueras, tras liderar ERC juntos durante 13 años, ahora viven enfrentados por el futuro del partido. Cada uno representa a uno de los dos sectores que lucha por el control de la formación, una lucha que se dirimirá en el congreso que ERC ha fijado para el 30 de noviembre.

Pese a las desavenencias evidentes y severas, los dos han enterrado momentáneamente el hacha de guerra. Esta mañana Junqueras se ha desplazado hasta el municipio de Cantallops, en la comarca del Alt Empordà, que es donde la comitiva de Rovira ha hecho su primera parada tras pasar la frontera francesa. El expresidente ha sido uno de los primeros en abrazar a la secretaria general. Luego los dos, entre una nube de cámaras, fotógrafos y periodistas han posado con el puño alto. También se han dedicado unas palabras al oído, pero que solo ellos han podido escuchar.

Más de un dirigente del partido que también ha acudido al encuentro respiraba aliviado. Son ya dos meses los que han pasado desde que en el partido estalló esta guerra interna en la que ninguna de las dos partes se ha dado tregua. Además, durante todo este tiempo se ha podido ver que las desavenencias venían de mucho más lejos, pero que se fueron tapando hasta que, con el mal resultado en las elecciones catalanas, todo reventó.

La duda es si el regreso de Rovira apaciguará los ánimos entre facciones o, por el contrario, los avivará. Rovira vuelve con un mensaje conciliador, como mínimo en público. El miércoles de esta semana, cuando se confirmó su regreso, tuvo palabras de reconocimiento hacia el exlíder del partido. En concreto, aseguró que no le importaría que Junqueras se postulara para ser el próximo candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat -siempre que consiga que se le aplique la amnistía, aún pendiente-.

Junqueras también ha tenido buenas palabras de bienvenida para la secretaria general. "Por fin, Marta Rovira, nos podemos reencontrar aquí, en nuestro país que tanto amamos. Tu fuerza y tu lucha son un ejemplo para todos. Hoy es un día en que se restaura la justicia", ha dicho en la red social 'X', antes Twitter. Ahora está por ver si este 'fair play' se mantiene en los próximos días.

¿Acercamiento o frágil tregua?

La relación entre ambos empezó a deteriorarse hace tiempo. Ahora, la intención de Junqueras es reconquistar el liderazgo del partido en el congreso de otoño. En cambio, Rovira ya ha anunciado que dejará la secretaría general del partido y su voluntad es dejar paso a una nueva hornada de dirigentes afines. La gran pregunta es si es posible un pacto entre las dos facciones.

Los 'roviristas' aseguran que no verían mal que Junqueras fuera candidato a la Generalitat si, a cambio, desiste en su idea de volver a liderar el partido. Los 'junqueristas', por el contrario, consideran que Junqueras es el liderazgo más carismático del partido que, tras pasar cuatro años en la cárcel, merece una oportunidad para volver a liderar ERC tanto orgánicamente -presidente del partido- como electoralmente -candidato a la Generalitat-. Este viernes en Cantallops se ha visualizado una tregua, pero está por ver si es el preludio de un acercamiento, o solo es un alto en el camino de la batalla interna.