Marta Rovira regresa este viernes a Catalunya tras el archivo del caso Tsunami Democràtic

Ya hay día y hora para el regreso de Marta Rovira a Catalunya. La secretaria general de ERC volverá este viernes por la mañana tras seis años y tres meses en Suiza. Lo podrá hacer después de que el lunes la Audiencia Nacional archivara por un defecto de forma la causa del Tsunami Democràtic. Con este caso desactivado, ya no corre el riesgo de ser detenida. Rovira volverá junto a otros cuatro dirigentes y activistas independentistas que también estaban en el país helvético para eludir la justicia espñaola: el diputado de ERC en el Parlament, Ruben Wagensberg; el vicepresidente de Òmnium Cultural, Oleguer Serra; el periodista Jesús Rodríguez y el empresario Josep Campmajó.

La comitiva entrará por la mañana y en coche por la frontera francesa. La primera parada será en el municipio de Cantallops, de la comarca del Alt Empordà y situado a pocos kilómetros de Francia. Este pueblo de 300 habitantes ha sido el elegido porque Wagensberg, pese a haber nacido en Barcelona, también ha crecido allí. Luego se desplazarán hasta la capital catalana para asistir a un acto de recibimiento organizado por Òmnium Cultural a las 13.00 horas delante de su sede en la calle de Diputació.

La previsión es que sea un evento transversal que aúne a todos los partidos independentistas y también a los Comuns, y al que previsiblemente también asistirán representantes del sindicalismo catalán. La entidad quiere recibir así a su vicepresidente, Oleguer Serra, pero también tendrán protagonismo al resto de personas que se marcharon a Suiza para sortear la investigación de la Audiencia Nacional.

Para quien el día resultará más intenso es para Rovira. Cuando termine el acto de Òmnium está previsto que vaya a la sede de su partido, en la calle de Calàbria. Allí también se prevé mucha alegría para recibirla, pero no será una tarde plácida. A las 15 horas está convocada una reunión de la ejecutiva y a las 18 horas otra del consejo nacional. En estos dos órganos se tienen que decidir las sanciones y, si hace falta las expulsiones, de los responsables de los polémicos carteles contra los hermanos Maragall.

Esta es una polémica que ha salpicado a algunos de los más estrechos colaboradores de la secretaria general, como el ya exviceconseller Sergi Sabrià, que dimitió del cargo en el Govern aunque niega cualquier vínculo con los carteles. Además, hay varios miembros del consejo nacional que ya han anunciado que acudirán a la cita para pedir responsabilidades sobre cómo el partido ha gestionado el caso. Está por ver si la previsible presencia de Rovira, que acude a la sede por primera vez desde marzo de 2018, atempera los ánimos.

Un filón para apaciguar la crisis

Pese a la crisis interna que vive ERC por los malos resultados de las elecciones catalanas, el partido quiere celebrar el regreso de su secretaria general por todo lo alto. Así, la propia Rovira explicó que el sábado quiere acudir a la asamblea de mujeres del partido, que se ha convocado en Olesa de Montserrat. Allí se podrá escuchar de nuevo a la secretaria general. Los republicanos creen que este regreso puede ser un filón para que, aunque sea por unos días, poder enterrar la guerra interna que vive la organización.

La semana que viene llegará el turno de los recibimientos institucionales. El president Pere Aragonès tiene previsto hacerlo en el Palau de la Generalitat y el presidente del Parlament, Josep Rull, en la Cámara catalana. Uno de los reencuentros más destacados será el que Rovira mantenga con Oriol Junqueras. Fueron el tándem que lideró ERC durante 13 años, pero se rompió hace un mes y ahora luchan cara a cara por el control del partido. Pese a las tiranteces, las dos partes dan por hecho que se verán pronto, este mismo fin de semana.