Crisis
Clavijo urge una reunión con Sánchez en Lanzarote para hablar de migración
Desde Moncloa no han contactado con el Gobierno Canario para concretar una cita, como sí hizo cuando Ángel Víctor Torres presidía el Ejecutivo autonómico
Isabel Durán
Periodista de migraciones y política canaria
El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, tiene "muchas cosas de las que hablar" con el jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, y una es "especialmente complicada": la gestión de la crisis migratoria que vive el Archipiélago desde el verano pasado. Clavijo ha expresado su deseo de poder mantener un encuentro con Sánchez para abordar los asuntos canarios, aprovechando su estancia en Lanzarote, donde está pasando unos días de descanso en La Mareta junto a su familia. "Creo que sería conveniente, pero lo tiene que decidir él", apuntó el presidente autonómico en declaraciones a los medios tras asistir a los actos institucionales de las fiestas de la Virgen de Candelaria. De momento, desde Moncloa no han contactado con el Gobierno de Canarias para concertar una cita, como sí hizo en las anteriores visitas estivales de Sánchez a La Mareta, cuando interrumpió sus vacaciones para reunirse con el actual ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, que entonces presidía el Ejecutivo autonómico.
Clavijo insistió en la necesidad de abordar cara a cara el fenómeno migratorio, pues "siguen llegando de manera incesante pateras y menores". Además, destacó que las previsiones de la ruta canaria para los próximos meses no son nada halagüeñas y mostró su temor porque, a partir de septiembre, "la cosa pueda ser igual o peor que el año pasado". Desde Coalición Canaria también han instado a Sánchez a sacar "dos horas de sus vacaciones" para atender la emergencia migratoria en las Islas. Si bien, el verano pasado Sánchez no quiso buscar hueco en su agenda para compartir unos minutos con el recién reelegido presidente.
Uno de los aspectos que Clavijo pondría sobre la mesa es la urgencia de una solución estatal para la atención de los más de 5.500 menores migrantes que están bajo la tutela del Gobierno de Canarias. Las negociaciones entre el Ejecutivo de Sánchez y el Partido Popular para modificar el artículo 35 de la ley de extranjería, que haría obligatorio el reparto de los niños y adolescentes entre todas las comunidades autónomas, están congeladas.
Gira africana de Sánchez
El jefe del Ejecutivo llegó el pasado lunes a Lanzarote a bordo del Falcon y se desconoce cuánto tiempo estará alojado en la residencia oficial. Sánchez retomará su agenda a final de mes para viajar a Mauritarina, solo seis meses después de su última visita, según señala El País. El objetivo prioritario del viaje es abordar la colaboración en el control migratorio, pues las costas mauritanas son el principal punto de partida de los cayucos que han llegado a Canarias de manera irregular desde octubre de 2023. El país africano sufre una crisis migratoria interna por la llegada de miles de refugiados malienses que huyen de la guerra, de los ataques yihadistas y del conflicto con los rebeldes tuareg. Así, las previsiones de las entidades sociales que trabajan en la zona, así como del Ministerio del Interior, apuntan a que tras el verano se producirá un intenso repunte de la salida de barquillas hacia el Archipiélago.
Sánchez viajó a Nuakchot en febrero junto a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen. En esa visita, los mandatarios anunciaron un paquete de ayudas de 500 millones de euros. Desde Mauritania llevan meses pidiendo ayuda a la comunidad internacional, pues sus autoridades sostienen estar desbordadas por la situación interna y se sienten incapaces de gestionarla sin apoyo económico del exterior.
El Gobierno mauritano, según fuentes locales, pretenden poner sobre la mesa la imposibilidad de cumplir las condiciones pactadas con España en materia migratoria debido a la intensa presión interna que sufre el país. Uno de los puntos del acuerdo que se quiere revisar es el que permite a España devolver a Mauritana a los migrantes de terceros países que hayan partido desde sus costas. Aunque actualmente las autoridades españolas apenas están poniendo en práctica esta medida, su eliminación supondría reducir las herramientas del Ministerio del Interior para tramitar retornos.
Después de la visita a Nuakchott, está previsto que Sánchez se desplace a Senegal y Gambia. El objetivo en Banjul es concretar las medidas en materia migratoria y seguridad planteadas por el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, durante su viaje al país africano a finales de junio. Por otra parte, el Ejecutivo español busca estrechar las relaciones "amistosas y dinámicas" que mantiene con Senegal durante su visita a Dakar. La crisis política que vivió este país el verano pasado desató la llegada de numerosos senegaleses a Canarias a bordo de cayucos. El nuevo Gobierno, liderado por Bassirou Diomaye Faye, ha abierto a la juventud del país una nueva etapa de esperanza y la salida de barquillas precarias desde sus costas se ha atenuado ligeramente.
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