Sánchez llega a Lanzarote sin agenda para abordar la crisis migratoria

Pedro Sánchez cambia La Moncloa por La Mareta, en Lanzarote, con la tarea de hacer presidente de la Generalitat de Cataluña a Salvador Illa resuelta, pero con el desconcierto por el pacto fiscal entre PSC y ERC para la financiación catalana en plena vorágine. Sin una solución para la emergencia humanitaria que vive Canarias por la acogida de más de 5.500 niños y adolescentes migrantes, el presidente del Gobierno llegó ayer a la isla conejera para pasar unos días de descanso junto a su familia. A las 13:08 horas aterrizaba el Falcon en el aeródromo militar lanzaroteño, desde donde fue trasladado hasta el municipio de Teguise en una furgoneta con los cristales tintados. Todo apuntaba que el palacio iba a recibir inquilinos, pues a primera hora de la mañana se comenzó a percibir la presencia de agentes de la Guardia Civil en los alrededores y, en las jornadas previas, se remozaron las instalaciones.

La Moncloa no ha informado sobre la duración de la estancia en Lanzarote

Desde que asumió el cargo, esta es la séptima vez que Sánchez se aloja en La Mareta y el quinto verano consecutivo que elige esta residencia para sus vacaciones estivales. A pesar de que el Archipiélago vive una crisis migratoria que comenzó a despuntar a mediados de 2020, el jefe del Ejecutivo español nunca ha aprovechado su cercanía al escenario de la emergencia humanitaria para conocer de primera mano la situación de los centros de atención a los migrantes o para agradecer en persona la labor de los profesionales que cada día atienden a quienes se juegan la vida en la ruta canaria con el único objetivo de buscar una oportunidad que les ayude a mejorar su futuro.

Fuentes gubernamentales no han confirmado la duración de la estancia del mandatario en la isla, ni si desarrollará algún acto de agenda pública o mantendrá algún encuentro institucional. Si bien, a tenor de los precedentes, Sánchez solo interrumpe sus vacaciones e incluye una reunión sobre asuntos canarios cuando el presidente autonómico es de su mismo signo político. Desde que es presidente se ha reunido tres veces con Ángel Víctor Torres en Lanzarote, mientras que ni en la Navidad de 2018, cuando se estrenó como huésped de La Mareta, ni el verano pasado, sacó unos minutos para encontrarse con Fernando Clavijo (Coalición Canaria).

El primer verano de Sánchez en La Mareta fue el de 2020. Tras un complicado curso político marcado por la crisis del coronavirus, el presidente de España se trasladó unos días a Lanzarote, durante los que mantuvo un encuentro oficial con el entonces presidente del Gobierno autonómico y actual ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres. A pesar de que la crisis migratoria que estalló en noviembre de ese mismo año empezaba a dar sus primeras señales de alarma, la política migratoria y los planes para reforzar el sistema de acogida no protagonizaron el orden del día. 

En 2021, lejos de mostrar preocupación por la continua llegada de pateras a las Islas, especialmente a Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria, Sánchez solo salió de la residencia oficial para asistir a la presentación de los actos del centenario del nacimiento del escritor José Saramago. A este acto acudió también Torres, con quien volvió a mantener una reunión en la que se abordaron asuntos como la candidatura de Canarias para acoger la sede de la Agencia Europea del Turismo, que finalmente ni se ha creado. Tampoco hubo tiempo para abordar la crisis migratoria, a pesar de que ese año ya habían llegado a las Islas más de 7.500 personas, que se sumaban a las 23.000 que arribaron a lo largo de 2020, y que hacía apenas ocho meses se había desmantelado el llamado muelle de la vergüenza, en Arguineguín, donde llegaron a hacinarse más de 2.000 migrantes.

El verano siguiente, en 2022, volvió a encontrarse con Torres, con quien habló sobre la importancia que había supuesto los ERTE y las ayudas directas a los pequeños y medianos negocios del sector turístico del Archipiélago, que permitieron amortiguar el impacto de la caída de ingresos durante los meses de pandemia. De nuevo, sin rastro de la crisis migratoria.

En agosto de 2023, cuando Clavijo apenas llevaba unas semanas en el cargo, Sánchez volvió a elegir La Mareta para veranear con su familia, pero descartó mantener un encuentro con el recién reelegido presidente. Desde Coalición Canaria, han instado al jefe del Ejecutivo central a sacar "dos horas de sus vacaciones" para atender la emergencia migratoria en las islas. De momento, se desconoce si Sánchez aceptará abordar la crisis humanitaria con Clavijo o si, incluso, planea visitar algún centro de acogida.

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