IlloJuan y Masi, expareja de 'streamers': uno menos una igual a dos

J.D. Vance le lanza a Kamala Harris el infamante 'childless', donde no tener hijos propios debería interpretarse como una liberación, pero el número dos de Trump quiere trasladar una idea de insuficiencia. Por supuesto, el exalumno de Yale, como los Bush, contrapone su matrimonio ideal a la vicepresidenta de Estados Unidos. En estas situaciones, la estadística aconseja aguardar a que el denunciante se vea envuelto en una reordenación conyugal, que le obligue a tragarse su prepotencia familiar.

Lo cual casi viene a cuento de la ruptura más importante registrada en España desde Iñaki y Cristina, el adiós de IlloJuan a Masi y viceversa. Incluso quienes solo tienen ojos para los Juegos Olímpicos han padecido el impacto de la separación anunciada con solemne naturalidad y a dúo por los poderosos influencers.

Es injusto añadir dramatismo gratuito a la vida ya de por sí exigente del español medio. Cuando algún miembro de la pareja se desliga del yugo compartido, uno menos una es igual a dos. Es decir, los seguidores de estos pensadores digitales verán doblado el número de proposiciones que aliviarán su rutinaria existencia.

Aunque desde este foro irreverente solo puede predicarse optimismo, ninguna medalla de oro en París consolará a la ingente masa de adeptos de IlloJuan y Masi, la cual además se encuentra "superdisociada", como Simone Biles cuando efectuaba un múltiple salto mortal y descubrió en pleno vuelo que había olvidado el objeto de sus desvelos.

IlloJuan y Masi han tomado la decisión que atribula a un país entero «porque nos queremos». Recurriendo de nuevo a la estadística, la continuidad del amor tras la separación de dos personas implica la existencia de irresistibles sentimientos exógenos. Una intromisión de seres extraños que agravaría el dolor de los seguidores del dúo, que todavía hoy no pueden imaginar un sentimiento más fuerte que el experimentado por él hacia ella, y correspondido por ella hacia él.

La separación de IlloJuan y Masi aporta otra confirmación sociológica. El nexo se yugula a los siete años de convivencia en pantalla. De este modo, los 'streamers' de éxito confirman que esa cifra pitagórica es tan fatídica para una pareja como los 27 años para Jimi Hendrix, Janis Joplin, Jim Morrison o Kurt Cobain.

Aunque Juan Alberto García suena menos 'influencing' que Illo, tal vez la disociación obligue a rescatar la identificación primigenia, y también costará acostumbrarse a María Isabel Rodríguez. Para atemperar la crisis de millones de españoles doloridos, los dos corajudos rupturistas se reconocen en la frase que ha utilizado el varón, "papá y mamá se han separado". Cuánto deberían aprender los políticos perifrásticos de estos enunciados elementales, que atraviesan como una sagita el corazón de los contribuyentes sensibles.

Cuesta imaginar un país sin IlloJuan&Masi, el principal cometido de esta hagiografía conjunta persigue demostrar que sus aportaciones se multiplicarán individualmente. No se ha arrancado el árbol de un amor irrepetible aunque imitado por las multitudes, se ha injertado una rama para multiplicar los frutos. Hasta J.D. Vance podría apreciar las virtudes de esta escisión pacífica, tecnológica.

En el verbo contagioso utilizado por exIlloJuan y exMasi, a nadie podría sorprenderle que siguieran compartiendo las vacaciones, incluso una cuenta corriente y una mascota. Se encuentran en la fase de los escarceos, cuando el vínculo con la pareja de siete años es más consistente que cualquier nexo que pueda establecerse con un extraño. Aquí cuadra el tanteo:

-¿Estás viendo a alguien?

En efecto, es la frase que nos ha conmovido en 'Deadpoool y Lobezno', por citar una de las relaciones amorosas más vibrantes de los últimos tiempos. Conste, pues, que IlloJuan y Masi se han separado, porque nadie lo diría. La audiencia huérfana se pregunta solidaria qué sucederá con la vivienda que la pareja alquiló en Madrid; todo conflicto se traslada en España al sector inmobiliario.

'Primos de nuevo' lleva por título el vídeo de 12 minutos donde IlloJuan y Masi describen su separación, vigente desde hace un tiempo. Si se realiza el duro ejercicio de quitarle el sonido a la grabación de esta pareja de habladores, da la impresión de que están anunciando el establecimiento de su relación. O una boda, cogidos de la mano como si recitaran el menú y la lista de invitados.

Todas las parejas son felices de la misma manera, pero solo IlloJuan y Masi han logrado ser infelices a su estilo. Sin despeinarse, sin perder los papeles, sin lágrimas innecesarias. Demuestran, por si hiciera falta, que los creadores de contenido son los seres más bravos de la contemporaneidad. Y que dure.

Suscríbete para seguir leyendo