TELECOMUNICACIONES

Masorange lanza un ERE voluntario para hasta 800 trabajadores

El nuevo gigante de las telecos españolas activa un plan de recorte de empleo que afectará a un máximo del 9,5% de toda la plantilla y que pretende que no incluya ninguna salida forzosa.

El consejero delegado de Orange-MásMóvil, Meinrad Spenger (d), posa junto al director general de operaciones, Germán López (i), y el director financiero, Ludovic Pech (c), durante la presentación de la nueva compañía que ha echado a andar tras su fusión en Pozuelo de Alarcón, Madrid, este miércoles.

El consejero delegado de Orange-MásMóvil, Meinrad Spenger (d), posa junto al director general de operaciones, Germán López (i), y el director financiero, Ludovic Pech (c), durante la presentación de la nueva compañía que ha echado a andar tras su fusión en Pozuelo de Alarcón, Madrid, este miércoles. / EFE

David Page

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Masorange, el nuevo gigante del sector español de las telecos nacido de la fusión de Orange y MásMóvil, se suma a la ola de recorte de empleos que han ejecutado sus grandes rivales en el último año. Tras los procesos de despidos colectivos de Telefónica, Vodafone y Avatel, ahora la nueva Masorange ha comunicado a su plantilla su intención de activar un expediente de regulación de empleo (ERE) de carácter voluntario para un máximo de 795 trabajadores, lo que implicará la salida de casi uno de cada diez de los 8.400 empleados que componen la plantilla (el 9,5% del total).

La dirección de Masorange ha venido insistiendo en los últimos meses que el plan de sinergias y ahorros de la fusión no incluía ningún ahorro vinculado a recortes laborales, pero ahora pone en marcha un ajuste de plantilla para evitar las duplicidades detectadas tras la unión de las dos compañías, que empezaron a funcionar como un solo grupo a finales del pasado marzo.

“Tras estos primeros meses de funcionamiento, hemos comprobado que aún existen ciertas duplicidades organizativas como consecuencia de la integración de las plantillas de ambos grupos. Por ello, hemos tomado la decisión de realizar un plan de ajuste organizativo que acabamos de comunicar a los sindicatos, cuya figura legal es el ERE”, indica la compañía en un comunicado interno remitido a la plantilla.

El proceso de reestructuración afectará a las principales sociedades integradas en el nuevo grupo (Orange Espagne, Orange España Comunicaciones Fijas, Xfera Móviles, Lorca Telecom Bidco, Euskaltel, R Cable y Telecable), y quedan fuera del ajuste la red de tiendas propias y los call center, así como algunas áreas administrativas de la compañía. La dirección de Masorange, comandada por el CEO Meinrad Spenger, se compromete a que la “voluntariedad sea el primer y preferente criterio de adhesión” al ERE por parte de los empleados y a “definir condiciones justas y satisfactorias para las personas incluidas en el plan”.

Las salidas, en octubre

Masorange y los sindicatos prevén constituir la mesa de negociación del ERE el próximo 17 de septiembre, con la intención de que las conversaciones lleven a un acuerdo a mediados de octubre y abrir entonces el proceso de adhesión al plan de salidas voluntarias. Masorange cuenta con una plantilla de alrededor de 8.400 empleados, de los que 6.600 procedían de Orange España y unos 1.800 del grupo MásMóvil. Según la compañía, se ha elegido la fórmula del ERE "por su rápida implementación" y porque "sus condiciones se negocian en el marco del ámbito social y ofrece todas las garantías legales".

La nueva compañía prevé que la fusión Orange-MásMóvil permita generar unas sinergias de 490 millones de euros anuales a partir del cuarto ejercicio tras el cierre de la operación, frente a los 450 millones que se estimaban hasta ahora. MásOrange ha venido insistiendo en que los ahorros previstos se producen sólo por las economías de escala y por evitar solapamientos a través del plan industrial, no con recortes de plantilla. El nuevo CEO ha descartado durante este tiempo por completo despidos forzosos en la compañía, pero no cerraba la posibilidad de salidas voluntarias. "Voy a ser muy claro. No tenemos previsto ningún plan de salidas forzosas. Y no hay ningún otro plan en este momento. Si hay personas que no se ven en el nuevo proyecto o a la que los cambios organizativos no les convencen, articularemos soluciones dentro del diálogo social", apunto Spenger en un encuentro con medios el pasado abril.

La fusión de Orange y MásMóvil necesitó de la aprobación del Gobierno, un visto bueno que estuvo acompañada, según describió el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, José Luis Escrivá, de un plan industrial "verdaderamente ambicioso" con inversiones de hasta 4.000 millones de euros y de unos compromisos de "mantenimiento del empleo suficientes".

El sindicato UGT ha emitido un comunicado en el que muestra ya su rechazo a la medida de recorte de plantilla lanzada por la compañía, dado que "ahonda en políticas de destrucción de empleo bien formado, bien remunerado y que aporta riqueza y valor añadido a la economía de España". "Una regulación perniciosa que no ha querido ser corregida por ningún Gobierno conduce a un círculo vicioso de despidos colectivos. En cualquier caso y en caso de no ser retirado, UGT defenderá la voluntariedad total y un paquete Indemnizatorio y prejubilaciones similares a las firmadas en 2021 en Orange España", ha añadido la organización.

Casi 5.000 despidos en el sector

El ERE en Masorange se suma a la oleada de despidos colectivos que ha tenido lugar en las principales compañías del sector de las telecomunicaciones en España en los últimos meses, como en Vodafone, Telefónica o Avatel, que se han traducido en casi 5.000 despidos. El proceso más reciente tuvo lugar en Vodafone España, donde sindicatos y empresa pactaron a mediados del pasado mes de julio la salida de 898 trabajadores, un 27,5% de la plantilla de la compañía. Este último ERE en Vodafone es el quinto que afectaba a la compañía en España desde 2013, unos procesos que han supuesto la salida de la empresa de alrededor de 4.100 empleados.

En el caso de Telefónica, el ERE se resolvió definitivamente en febrero de este mismo año y se saldó con la salida de 3.420 trabajadores de forma voluntaria de sus tres principales filiales en España (Telefónica de España, Móviles y Soluciones). El ERE de Avatel Telecom se concretó a comienzos del pasado junio con la salida de 674 trabajadores, casi el 36% de la plantilla de la empresa, y también contempló adhesiones voluntarias.