OPA

Puente evita aclarar si el Gobierno liderará una operación accionarial en Talgo

A mediados de abril se llegó a especular una posible contraoferta a la presentada por el consorcio húngaro que estaría encabezada por CiteriaCaixa como socio financiero

Óscar Puente, ministro de Transportes, durante la comparecencia en el Congreso de los Diputados.

Óscar Puente, ministro de Transportes, durante la comparecencia en el Congreso de los Diputados. / José Luis Roca

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Dos días después del veto del Gobierno a la oferta pública de adquisición (opa) presentada por Magyar Vagon sobre Talgo, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, evita entrar en materia. "Aclare a los españoles si contempla en Talgo el Gobierno algún tipo de operación liderada por parte de una empresa pública o participada alternativamente a la opa que han vetado", ha preguntado el diputado del PP, Héctor Palencia, durante la comparecencia del ministro en la Comisión de Transportes. Puente, por su parte, se ha centrado casi en exclusiva en defender la mejora de los servicios ferroviarios en España pese a la acumulación de incidencias en el mes de agosto.

No se trata de una pregunta sin sentido. A mediados de abril, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, afirmó que el Gobierno estaba en contacto permanente con empresas españolas "muy importantes y cotizadas" para poder tener una alternativa a la compra de Talgo por parte del consorcio húngaro. Y el propio ministro de Transportes confirmó las palabras de la vicepresidenta del Gobierno añadiendo que se estaban "barajando diversas alternativas para que Talgo siga respondiendo a su alto valor estratégico y tecnológico".

CriteriaCaixa, el brazo inversor de la Fundación LaCaixa, era el candidato que se especulaba como posible socio financiero, puesto que en su momento estaba inmerso en la operación para entrar en el accionariado de Naturgy junto a la empresa abudabí Taqa. En el caso de Talgo, solo puso una condición: entrar en el accionariado del fabricante de trenes junto a un socio industrial que tuviese el conocimiento necesario del negocio, algo que, hasta ahora, no llegó a materializarse.

Talgo y las incidencias ferroviarias

El Gobierno ha vuelto a apuntar las miradas hacia Talgo por las averías de los nuevos trenes Avril S106, entregados el pasado mes de mayo. En este sentido, Puente ha señalado que se están estudiando dos nuevas reclamaciones al fabricante de trenes para pedir una compensación por daños y perjuicios que han causado a Renfe. Estas compensaciones económicas, anunciadas a comienzos de agosto, se suman a la demanda valorada en 166,6 millones de euros por el retraso en la entrega de los trenes.

Durante su intervención, Puente ha remarcado que la puntualidad de los 22 trenes Avril cayó en la primera semana de agosto por debajo del 50%, especialmente aquellos de rodadura desplazable (los que pueden ir por varios anchos de vía) mientras que la puntualidad media de los servicios de Renfe se sitúa en el 76%. En estos tres meses, la mitad de la nueva flota estuvo inmovilizada por distintos problemas, aunque actualmente 21 de los 22 trenes entregados están en servicio por la reacción positiva de Talgo, tal y "como se debía esperar de una empresa tan importante", resaltó el ministro.

Asimismo, Puente ha recalcado que la estación de Madrid-Chamartín-Clara Campoamor está "muy tensionada" y no es la única, ya que las relativas a Madrid Atocha-Almudena Grandes y Barcelona Sants están "al límite". Las distintas incidencias acumuladas este verano han potenciado el hacinamiento de usuarios en la estación de Chamartín, en plenas obras para aumentar su capacidad, mientras que la estación de Sants solo tiene cinco vías de alta velocidad para albergar todos los tráficos que recibe la Ciudad Condal. Un retraso de 15 o 20 minutos en tres trenes, según ha ejemplificado Puente, acumularía hasta 2.000 personas en estaciones que ahora mismo no son capaces de acoger a tantas personas. Puente ha terminado su primera intervención reiterando sus disculpas por las incidencias de este verano y pidiendo "paciencia y comprensión". "Estamos invirtiendo más que nunca. Pronto veremos los resultados, pero para alcanzarlos vamos a tener que atravesar algunos inconvenientes", ha concluido.