Empresas

Ciril Rozman, vicepresidente de Aigües de Barcelona y directivo de Agbar, deja el grupo

Los accionistas de Aigües de Barcelona proponen a Miquel Roca como presidente

Ciril Rozman

Ciril Rozman

Agustí Sala

Agustí Sala

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El vicepresidente de Aigües de Barcelona y director de Estrategia de Agbar, Ciril Rozman, ha dejado el grupo, según ha adelantado 'El Confidencial' y ha confirmado EL PERIÓDICO en fuentes conocedoras de la decisión. Aigües tiene a Agbar, propiedad de la francesa Veolia, como principal accionista, con el 70% del capital; así como al brazo invesor de La Caixa, Criteria; y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), con el 15% cada uno.

La marcha de Rozman se produce unas semanas después de que Àngel Simón, del que era una de sus personas de máxima confianza, dediciera dimitir como presidente no ejecutivo de Aigües para volcarse en el nuevo cargo de consejero delegado de Criteria desde enero pasado.

Rozman, que es licenciando en Derecho y MBA por Esade, entró en el grupo Agbar a mediados de los 90, y colaboró también estrechamente con Simón cuando este fue presidente de Agbar y vicepresidente de Veolia, después de que la multinacional francesa se hicera con el control.

Presidente, Miquel Roca

Todo ello se produce unos días después de que los tres accionistas de Aigües propusieran a Miquel Roca i Junyent como presidente no ejecutivo. El que fuera presidente del grupo parlamentario catalán (CiU) en el Congreso de 1977 a 1995 y uno de los padres de la Constitución es una personalidad de consenso. Roca, que es presidente de honor del despacho Roca Junyent, que dirige su hijo Joan, también forma parte de los órganos de gobierno de Abertis y es secretario no consejero del Banc Sabadell, TYPSA y Werfenlife.

Agbar-Veolia, Criteria y la AMB quisieron a su vez ofrecer una imagen de unidad y subrayaron en un comunicado que el de Aigües de Barcelona ha resultado ser "un modelo de excelencia de colaboración público-privada". Y aprovecharon para reiterar el compromiso, tal como acordó el consejo de administración de la empresa el pasado 8 de mayo, de que "la sociedad siga ejecutando durante los próximos años todas las actuaciones que deben asegurar la resiliencia del servicio metropolitano del ciclo integral del agua". El plan incluye inversiones extraordinarias por más de 900 millones hasta el 2027/2028 para paliar los efectos de la sequía.