S'Agaró se reivindica como cuna de arquitectura, cultura y turismo al llegar a los 100 años

"Nos preguntamos: ¿Qué hacía el abuelo? Y respondimos: conciertos, revistas, libros, regatas, fiestas... y eso es lo que hemos planeado durante todos estos meses", responde orgullosa Virginia Ensesa, presidenta de la asociación S’Agaró 100, que organiza el centenario de la urbanización de la Costa Brava. En total son 15 nietos, descendientes de las dos hijas (Anna y Carmen) y el hijo de Josep Ensesa i Gubert (también Josep), empresario gerundense que levantó la Senya Blanca, el primer chalet de la ciudad jardín 'noucentista', inaugurado el 24 de julio de 1924.

La casa, obra del arquitecto Rafael Masó, sigue hoy, altiva, con vistas a cala Pedrosa y al bullicioso camino de ronda que la serpentea. "Fue un visionario porque decidió dibujar un recorrido de tres kilómetros accesible, en zona marítimo-terrestre y, sobre todo, unas enormes escalinatas que permitieran que todo el mundo llegara al mar", describe otro de sus nietos, Lluís Sibils i Ensesa. Pero esa construcción fue solo el embrión de una urbanización que, con el Hostal de La Gavina como imagen más icónica, ha protagonizado películas de Hollywood, congresos económicos, citas políticas de calado, recitales musicales o competiciones deportivas.

De esas casetas de baño, este S'Agaró

Una norma genuina y exclusiva

En 1916, el padre de Josep Ensesa había comprado los primeros terrenos por 11.700 pesetas en una zona casi virgen. Poco a poco fue adquiriendo nuevas fincas y, explica Lluís Sibils, uno de sus "méritos" fue lograr que una norma urbanística "genuina y exclusiva de S'Agaró y que aún se mantiene" dictara cómo debían ser las casas de la urbanización, que pertenecen al municipio de Castell-Platja d'Aro (Baix Empordà). La altura, las dimensiones de las construcciones, los jardines, hasta los materiales, estaban pautados.

Nos preguntamos: ¿Qué hacía el abuelo? Y eso es lo que hemos planeado durante todos estos meses

Virginia Ensesa

"Podría haber hecho seis calles de filas de apartamentos y hacerse rico, pero él decía que la codicia de unos pocos no podía estropear lo que era de todos", recuerda el nieto. Ensesa, inquieto y avanzado a su época, según sus sucesores, también organizó un congreso sobre turismo en la Costa Brava en 1935. Unos años antes había comprado las casetas de baño de la playa de Sant Pol. El actual Hotel S'Agaró, en este enclave, fue también refugio de niños que procedían de Andalucía durante la guerra civil o acogió una escuela, cuenta Jordi Falgàs, uno de los dos comisarios de la exposición abierta hace un par de semanas en el Palau Robert de Barcelona.

Podría haber hecho apartamentos y hacerse rico, pero decía que la codicia de unos pocos no podía estropear lo que era de todos

Lluís Sibils

Mucho peso en la historia

En la muestra se han reproducido con mimo los arcos blancos tan característicos de la urbanización, además del sonido del mar y las gaviotas. "Teníamos muchísima documentación, planos, carteles, libros, fotos, películas... S'Agaró ha tenido un peso muy relevante en la historia del país y queríamos que la efeméride del centenario nos sirviera para hablar de todos los temas", describe Falgàs, que se ha ocupado principalmente de la parte arquitectónica y vinculada a Rafael Masó, mientras que Sebastià Roig lo ha hecho del cine, la música o la moda. Ava Gardner, Orson Welles, Liz Taylor... la lista de estrellas que pasaron es larga y también la de escritores como Josep Pla o Josep Carner.

S'Agaró ha tenido un peso muy relevante en la historia del país y queríamos que el centenario nos sirviera para hablar de todos los temas

Jordi Falgàs

Todas las anécdotas, imágenes y objetos, que celosamente ha guardado la familia Ensesa y sus descendientes durante décadas, desvelan el protagonismo histórico de este enclave. A la presidenta de S'Agaró 100, satisfecha por el apoyo social e institucional recibido, le gusta especialmente la escultura a tamaño real de su abuelo, junto al fotografiado Mirador en forma de templete del camino de ronda. Se estrenó a finales de mayo y en la figura de bronce se lee su determinación a la hora de afrontar la vida, piensa Virginia Ensesa.

Recital de Josep Carreras

La exposición se trasladará a la Casa de Cultura de Girona en diciembre y los actos de celebración continuarán los próximos meses. Este verano hay varias citas en el calendario, como el recital del tenor Josep Carreras el día 20 en la iglesia de la Mare de Déu de l'Esperança, que Josep Ensesa hizo construir en 1940 a otro de los arquitectos prolíficos de la urbanización, Francesc Folguera, para cumplir una promesa cuando estaba en el exilio.

Una regata, un torneo de tenis, un libro conmemorativo, los paneles informativos del camino de ronda, una fiesta el día de los 100 años... S'Agaró se reivindica en homenaje a su creador.

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