Ciudades y gentrificación

El área de Barcelona descarta la 'fórmula Collboni' contra los pisos turísticos pero defiende una regulación restrictiva

L'Hospitalet, Badalona o Sitges no estudian eliminar la figura y defienden sus ya limitativas normativas locales

MAPA | ¿Cuántos pisos turísticos hay en tu ciudad de Catalunya?

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Un teléfono con logo de la empresa AirBnb, con el 'skyline' de L'Hospitalet de Llobregat de fondo

Un teléfono con logo de la empresa AirBnb, con el 'skyline' de L'Hospitalet de Llobregat de fondo / Manu Mitru

Manuel Arenas
Àlex Rebollo
Jordi Ribalaygue
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La propia naturaleza del área metropolitana de Barcelona de los 3,3 millones de habitantes implica que las medidas aplicadas en la capital catalana irradien a las ciudades de su entorno. El último ejemplo del fenómeno es la eliminación de los pisos turísticos que ha anunciado el alcalde Collboni en la ciudad condal a partir del 2028, basada a su vez en la regulación que la Generalitat sacó adelante a finales del 2023.

La nueva ofensiva de Barcelona ha zarandeado las casuísticas locales en torno a los pisos turísticos de su entorno, que pese a ser heterogéneas sí coinciden por el momento en descartar la aplicación de la 'fórmula Collboni' para eliminar pisos turísticos. A su vez, los ayuntamientos abogan por restringir, en algunos casos más si cabe, el crecimiento de pisos turísticos en ciudades que desde años atrás no han ocultado su temor ante un potencial 'efecto llamada' tras los vetos de la capital.

Muestra de ello son las suspensiones de licencias turísticas años atrás en importantes ciudades metropolitanas como L'Hospitalet de Llobregat o más recientemente incluso la Badalona de Albiol, que sin ser sospechosa de no priorizar la atracción del turismo hablaba explícitamente de evitar una "avalancha de solicitudes de pisos turísticos" en el contexto del veto barcelonés.

En la provincia de Barcelona, donde la capital lidera el 'ranking' de viviendas de uso turístico con 10.000 pisos, la segunda ciudad con más viviendas es Sitges (1.739), uno de los principales atractivos del litoral catalán. Su alcaldesa, Aurora Carbonell (ERC), explica a EL PERIÓDICO que descarta por completo la 'fórmula Collboni' de eliminar directamente los pisos turísticos en el municipio, la cual tilda de "brindis al sol" e "irreal", pero sí aboga por una regulación restrictiva.

"Nos parece bien una regulación restrictiva en la línea del requisito de renovar las licencias turísticas cada cinco años de la Generalitat", afirma Carbonell, quien asume que el temor a un posible 'boom' de demanda turística siempre está ahí pese a que la actual regulación local de Sitges limita las viviendas turísticas al 9% del total de la ciudad. "Cuando no había regulación sí había bastante descontrol, pero ahora no detectamos que haya tantas quejas por posibles alojamientos ilegales en la ciudad", concluye la edil.

En la demarcación barcelonesa, a Sitges la siguen en cantidad de pisos turísticos registrados Pineda de Mar (870); Cubelles (754); Calella (530) y L'Hospitalet de Llobregat (512). Los datos de pisos turísticos en cada una de las ciudades de la provincia de Barcelona, extraídos de la base de datos del Departament d'Empresa i Treball de la Generalitat, pueden visualizarse en el siguiente mapa.

La segunda ciudad catalana, L'Hospitalet de Llobregat, y otras con datos remarcables de pisos turísticos registrados como Vilanova i la Geltrú (433) o Gavà (247), tampoco abogan en el corto plazo por suprimir de cuajo la figura del piso turístico, aunque en la línea de Sitges sí reivindican sus ya limitativas normativas locales.

Municipios ya blindados

En una tónica similar a la de Sitges, los municipios vecinos de Vilanova y Gavà también confían en las limitaciones que ya aprobaron hace pocos años para contener una posible dispersión de la demanda de licencias de viviendas turísticas si, finalmente, se cumpliera la intención anunciada por Collboni de erradicar los pisos turísticos en la capital catalana.

El Ayuntamiento de Vilanova recuerda que en 2021 aprobó un Plan Especial Urbanístico para los pisos turísticos en el que ya restringía el número máximo de este tipo de licencias que se pueden otorgar en las distintas zonas de la ciudad. “Una vez se llega al límite, ya no se pueden pedir más licencias en estas áreas”, insisten fuentes municipales. De este modo, la totalidad del frente marítimo de la ciudad, la parte con más demanda, ya ha agotado el número de licencias de viviendas turísticas contemplado en la normativa.

También en Gavà, Jordi Tort (PSC), primer teniente de Alcaldía, apunta a la normativa aprobada en la ciudad en 2021, que limitó el número máximo de pisos turísticos en la zona de Gavà Mar a un máximo de un 5% por bloque. El mismo Tort indica que, por ahora, no han detectado que la demanda de licencias de pisos turísticos aumente en el resto de la ciudad, pero remarca que, si esto ocurriera, estudiarían la posibilidad de aplicar nuevas regulaciones.

Turistas con maletas junto a la parada de metro de Collblanc.

Turistas con maletas junto a la parada de metro de Collblanc, en la frontera entre Barcelona y L'Hospitalet.. / Manu Mitru

De hecho, la mayoría de municipios consultados comentan que actualmente se encuentran a la expectativa de si finalmente Barcelona eliminará las viviendas turísticas y de los efectos que esto podría acarrearles. Además, señalan que actualmente se hallan en pleno estudio del decreto de la Generalitat y que decidirán qué hacer con este modelo de negocio turístico una vez tengan claro el marco legal y las consecuencias que se pueden derivar tanto en caso de de regular como de no.

Ejemplo de ello es también L'Hospitalet de Llobregat, que aboga por ir de la mano de la Generalitat y los municipios integrados en el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) para dar respuesta al fenómeno de los pisos turísticos, sobre el que los vecinos de los barrios de Collblanc o la Torrassa, fronterizos con Barcelona y bien conectados con transporte público, alertan de que cada vez es más extenso en la segunda ciudad de Catalunya. A su vez, fuentes del consistorio hospitalense dicen que están desarrollando su primer Plan local de vivienda, de modo que ayude también a definir las políticas de esta materia en L'Hospitalet.

Las ciudades del Barcelonès, en guardia

También se pronuncian sobre el fenómeno de los pisos turísticos las ciudades vecinas de la capital catalana en la zona norte: Sant Adrià de Besòs, Badalona y Santa Coloma de Gramenet, con 284, 229 y 26 pisos turísticos respectivamente según los datos de la Generalitat.

En ninguna de las tres se perciben los pisos turísticos como una problemática grave local, si bien los gobiernos municipales se muestran en guardia ante el fenómeno. Fuentes municipales de Badalona, por ejemplo, recuerdan que la ciudad tiene activada una "regulación exigente" desde hace diez años: "No hay licencias en todo el frente litoral y, además, el pasado mes de febrero se aprobó una suspensión de licencias". Desde el 'Gobierno Albiol' aseguran que el planteamiento es incluso trabajar en ampliar la regulación actual.

En ese mismo sentido se expresan fuentes municipales de Santa Coloma de Gramenet: "La regulación de las licencias turísticas se hará mediante una modificación del Plan de Usos de la ciudad que ya estamos ultimando". En el último mandato, recuerdan desde el consistorio, ya se reguló la concesión de licencias turísticas. De hecho, la ciudad detectó en 2023 un "crecimiento más pronunciado" a partir del cual se suspendió la concesión de licencias "para analizar en profundidad la situación y tomar las medidas adecuadas para que el crecimiento de esta actividad no vaya en detrimento de las políticas de acceso a la vivienda que queremos desarrollar".

Por su parte, José Antonio Gras (PSC), concejal de Territorio y Medioambiente en Sant Adrià de Besòs, asegura que el municipio ha denegado todas las peticiones para abrir apartamentos para viajeros desde poco después de que la norma de la Generalitat entrase en vigor. "Desde el día en que se aprobó el Decreto Ley, mi prioridad ha sido que no entre ninguna vivienda turística más", sostiene.

Sant Adrià de Besòs endureció las condiciones de apertura en 2023. Gras manifiesta que la intención del gobierno local es no renovar ninguno de los pisos turísticos existentes en la localidad a partir de 2028, aunque no tiene claro si habrá "base jurídica para decir 'no' a todo". "La situación en Barcelona es bestia pero, en porcentaje, en Sant Adrià estamos peor, porque tenemos en torno a unos 300 pisos turísticos en una ciudad con 12.000 viviendas, aparte de los no regulados, contra los que vamos a ir".

Sant Adrià registró unas 90 solicitudes para crear pisos turísticos en 2023. "No tenemos miedo a un efecto llamada tras el anuncio de Barcelona. Lo único que puede pasar es que tendré más trabajo firmando denegaciones de licencias", resuelve Gras. Añade que el municipio quiere ejercer "presión" para que las administraciones supramunicipales estrechen el control sobre los apartamentos turísticos de forma "más intensa", regulando qué actividades económicas se pueden ejercer en los domicilios.