Al habla la trabajadora de Álvaro Morata y Alice Campello: una crisis en silencio

La separación de Álvaro Morata y Alice Campello ha sacudido el mundo del corazón, del fútbol, de la moda, de internet… el mundo en general. Después de ocho años juntos y cuatro hijos en común, la noticia de su ruptura ha generado un torbellino de especulaciones y rumores. Sin embargo, nuevas revelaciones han aportado claridad sobre los motivos reales detrás de este desenlace.

La versión de la trabajadora del hogar

En exclusiva para el programa de Telecinco, 'TardeAR', la empleada del hogar de la pareja ha decidido romper su silencio, con el consentimiento tanto de Morata como de Campello, para desmentir categóricamente varios rumores que han circulado. Según la trabajadora, que ha estado al servicio de la pareja durante cinco años, la crisis en su relación no es algo nuevo que digamos: “Llevan sufriendo una crisis desde hace un año y medio”, confesó, añadiendo que el desgaste en la relación cada vez iba a más a pesar de que ambos lucharon por salvar su matrimonio.

Uno de los factores más difíciles para Alice, según ha expresado la empleada, fue adaptarse a la vida en España lejos de su familia. Aunque la modelo italiana siente gran cariño por el país, la distancia con sus seres queridos y la exigente vida profesional de Morata fueron factores determinantes que afectaron su relación: “El tener que adaptarse a la vida de él le ha costado muchísimo porque echaba de menos a su familia”, explicó la trabajadora.

Una separación amistosa

En las últimas semanas, los rumores sobre posibles infidelidades por parte de Morata han circulado con intensidad, unos rumores que la empleada -siguiendo con lo que dijeron los protagonistas de la historia en sus comunicados- no dudó en desmentir rotundamente: “No ha habido terceras personas”.

A pesar de todo el terremoto mediático que ha supuesto esta noticia, más la propia tristeza que acarrea una separación, tanto Morata con Alice han decidido poner fin a su relación de la mejor manera posible, priorizando siempre el bienestar de sus hijos.

Normalidad a pesar de todo

El desenlace de la relación de Morata y Campello es un gran ejemplo de que, aunque quizá la chispa se haya apagado o el amor no sea el mismo, el respeto y la consideración entre ambos siempre ha de mantenerse intacto. Esta separación, pese a todo lo que se está hablando de ella, es una de las más civilizadas y respetuosas del panorama mediático actual, donde los protagonistas han sido los primeros en contarlo al mundo y dejar las cosas claras, además de poner a sus hijos incluso por delante de ellos mismos.