Meghan Markle y el príncipe Harry y su millonaria portada a lo 'Crepúsculo'
Homenaje a 'Crepúsculo': la pose de Meghan Markle y el príncipe Harry... Y la aparición de la estilista de Jennifer Aniston (al menos, en su portada de Time).
Bueno, pues ya son el híbrido entre realeza, influencers y famosos de Hollywood. Meghan Markle (40) y el Príncipe Harry (37) ocupan la portada de la revista Time en el número dedicado a las personas más influyentes de 2021. Como suele suceder con todo lo que les rodea, este nuevo reconocimiento está dando mucho que hablar: desde los motivos por los que merecerían o no recibirlo al posado que han protagonizado para la publicación, pasando por la posición que eligió ocupar cada uno de ellos frente a la cámara del fotógrafo Pari Dukovic y el radiante aspecto que lucen en dicha imagen.
Obviamente, nada se ha dejado al azar y Meghan, que ya sabe de esto porque antes que 'royal' fue actriz, quiso contratar a un equipo de primera para la ocasión, según afirma el periódico Daily Mail. La estilista Nina Hallworth, famosa por su trabajo con estrellas como Jennifer Aniston, fue la encargada de ayudarle a elegir el pantalón de traje en color blanco con una camisa a juego que luce en la portada.
Su hermana Clare se ocupó de vestir a Harry, cuyo atuendo oscuro y más informal contrasta con el de su esposa, que posa de pie delante suyo mientras él aparece sentado y con una mano colocada sobre su hombro. Como detalle personal, así en modo 'casual', él se puso varios brazaletes de cuentas como los que luce a menudo en su día a día, mientras que Meghan optó por su alianza, su anillo de compromiso y una pulsera de Cartier. Más 'chic'.
Eso sí, la foto, que se ha criticado muchísimo (porque hay retoque capilar de más, incluso), no deja indiferente a nadie, y si te descuidas parece sacada de la promoción de 'Eclipse', una de las películas de la saga 'Crepúsculo', solo les faltó la presencia de Taylor Lautner detrás (que como está desaparecido de Hollywood, lo mismo estaba pero no se le ve).
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La duquesa también ha recurrido de nuevo a Serge Normant, el peluquero que se encargó de crear el recogido informal que lució el día de su boda. El moño bajo con varios mechones enmarcándole la cara se convirtió en su sello de identidad como 'royal', pero en esta ocasión ha optado por una melena peinada en ondas y con mucho más volumen del habitual para transmitir una sensación de poder. Vamos, que no han dejado nadita al azar y ya se está hablando incluso cuánto se han gastado en todo este dispendio para lanzar el mensaje al mundo: ojito a quién manda en casa.