Khloé Kardashian ya habla como una madre
Pronto ha empezado.
Ya sabes (por las películas sobre todo) lo que significa el Día de Acción de Gracias en EEUU: todo un festín.
Y claro, ahora que Khloé Kardashian (33) está en Cleveland con su churri Tristan Thompson, no tiene la ayuda ni de Kris Jenner (62) ni de Kim Kardashian (37), que siempre la ayudaban "aportando algún plato".
Esta vez, la "chef KoKo" (como ella se ha autobautizado) lo ha hecho todo: tarta de manzana, alitas de pollo, panecillos de canela, galletas, torta de maíz, donas, la salsa, verduras, macarrones con queso, pastel de calabaza, un buen relleno, maíz dulce con crema, soufflé de camote y, por supuesto, el pavo.
¡Hasta el pan lo ha hecho ella misma! Y claro, evidentemente cuando ha acabado de preparar lo que perfectamente podría ser el bufé de cualquier hotel, ha acabado "agotada!" (cansada acabarías tú, ella embarazada, imagínate).
Aún así, ha reconocido en las redes que "vale la pena trabajar como una esclava en la cocina", porque luego le encanta ver que "todos están contentos con la comida".
Como cantaban Andy y Lucas: 'tan prisionera de su casa en la cocina' ha tenido que estar Khloé desde las 10 de la mañana sin parar (nos parece poco tiempo), pero mira qué pintaca tenía todo:
Y no hablemos de la monería de mesa donde comieron:
No sabemos si fueron capaces de comérselo todo, pero conociendo el plan madre que tiene Khloé, le faltó lo típico que también dice tu madre: