Blac Chyna no está embarazada, solo está hinchada

No hay churumbel que valga.

AdMedia / Splash News

Blac Chyna (30), la enemiga número uno de las Kardashian-Jenner, ha estado desaparecida en combate y de lo más calmada (algo raro en ella), después de todo los líos en los que se ha visto en vuelta: empezando por la pelea que protagonizó con un carro de juguete en un parque de atracciones de Los Ángeles y terminando por los juicios con su ex, Rob Kardashian. Tras comenzar una relación con un yogurín, YBN Almighty, los rumores han ido apareciendo. Primero con una supuesta petición de matrimonio y, después, con un posible embarazo. Pero, ¿qué es lo que ha pasado ahora? Pues lo que muchos se esperaban y es que Chyna no está esperando un churumbel, sino que está un poco más hinchada que de costumbre... Y si encima se enfunda un vestido que corta la respiración, pues como que no ayuda mucho.

El portal de noticias TMZ es el que nos ha chivado la noticia con una foto de Chyna con barriguita considerable, que por lo que parece, no es otra cosa más que gases.

Los microinfartos con esta mujer están a la orden del día. Blac que es madre de dos hijos, King Cairo (con Tyga) y Dream Kardashian (con Rob), ha asistido a la graduación del primero con un vestido rosa de los más AARG!!: un escotazo que le llega hasta el ombligo y claro, de lo apretada que va, se le ha notado una incipiente tripa. Y no porque haya un ser dentro de su cuerpo, sino porque probablemente se haya pegado un buen atracón o vete tú a saber. Vamos, lo mismito que le pasó a Miley Cyrus el Día de Acción de Gracias, que se hartó de comer tofu de pavo.

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Esto no quiere decir que dentro un tiempo decida ser madre por tercera vez, porque está en modo "in love" total con su churri (que Instagram ya nos lo ha soplado). Pero por el momento... 'Tararí que te vi'.

Es normal que la gente se haga ideas equivocadas, porque con esas curvas tan, tan llamativas, pues más de uno se ha pensado lo que no es.

Así que lo dicho, con esta mujer nunca te puedes esperar nada. Tendremos nuevo capítulo en el culebrón de su vida, fijo.