Netflix renueva ‘El refugio atómico’, la nueva serie de los creadores de ‘La casa de papel’, antes de estrenar la ficción

Netflix ha apostado fuerte por la productora Vancouver tras el final de ‘La casa de papel’. Después de estrenar su spin off, ‘Berlín’, que ha sido renovado por una segunda temporada, también se encuentra trabajando en su nuevo proyecto alejado de ese universo. Se trata de ‘El refugio atómico', una distopía que se desarrolla después del estallido de la Tercera Guerra Mundial. Pues parece que esta serie durará más de lo esperado.

Según ha podido saber YOTELE en exclusiva, Netflix ya está trabajando en la segunda y tercera temporada del proyecto, aún sin haber estrenado la primera tanda de ocho episodios. Esta pronta renovación se podría deber al elevado coste que tendría la construcción de unos decorados tan impresionantes como los que se han preparado para esta serie.

Se trataría de una estrategia para poder amortizar el plató de la ficción, tal y como ocurriera en ‘La que se avecina’ cuando se realizó el cambio de Mirador de Montepinar a Contubernio 49: la productora exigió una renovación mínima de tres temporadas para que el coste de la construcción pudiera ser dividido a lo largo de todas las nuevas entregas que se iban a preparar.

Esta nueva serie contará con un reparto de lujo encabezado por Miren Ibarguren, y al que se unen otros actores como Joaquín Furriel, Natalia Verbeke, Carlos Santos, Montse Guallar, Pau Simon, Alicia Falcó, Agustina Bisio y Álex Villazán. Todos ellos interpretan a unos multimillonarios que se esconden en un búnker cuando descubren que está a punto de estallar la Tercera Guerra Mundial.

Desde Kimera Underground Park, que es el nombre que recibe este espacio que los acogerá, verán en pantallas cómo el mundo que conocían se va desplomando sobre sus cabezas. Y mientras la situación fuera se vuelve cada vez más aterradora, ellos disfrutarán de su pequeña ciudad exclusiva con pista de básquet, restaurante, jardín zen, coctelería, diván de psicólogo, gimnasio y spa. A eso quedará reducida su mítica condición de privilegio: a ir adaptándose a vivir en un agujero de lujo, en un universo subterráneo lleno de enigmas en el que estallarán las cuentas pendientes de dos familias atravesadas por una herida del pasado.