Susi Caramelo ('Cero en historia'): "Si no hubiera pasado por todos mis trabajos, no sería como soy"

Tras al final de 'Las que faltaban' y su primer proyecto en solitario con el especial 'Lo de los Goya', <strong>Susi Caramelo</strong> inicia una nueva etapa en #0 como colaboradora de 'Cero en historia', que esta noche arranca su séptima temporada en el canal de Movistar+.

Coincidiendo con su estreno en el formato presentado por Joaquín Reyes, YOTELE ha charlado con la carismática reportera sobre su nuevo proyecto televisivo y sobre cómo afronta su boom mediático. 

¿Te asusta la responsabilidad de entrar en 'Cero en historia'?

No. Estoy cómoda y contenta. Si voy con miedo a los sitios no sería yo. Hay que ir un poco en plan descerebrada. Si con lo idiota que soy fuese con miedo, ni hablaría... Además, estoy con gente que admiro mucho de toda la vida. Estoy sentada al lado de Raúl Cimas, una de las personas que más me hacen reír de España. Con todos había coincidido en algún momento. 

¿Cómo te estás manejando con la historia?

Fatal, pero está bien porque como el programa se llama 'Cero en historia' pues no me han exigido nada (risas). No sé nada. He leído cosas pero como no me entero porque soy imbécil...

Todos sabemos que has sido y eres una tía muy trabajadora. ¿Cómo estás viviendo tu boom mediático?

Ha sido muy loco porque me he hecho 'mainstream' y, de repente, me conocen desde los niños poque me he hecho viral en el Tik Tok hasta los padres porque están hasta las narices de los que ponen sus hijos. Ha sido un baremo de edades súper amplio, pero lo llevo muy tranquila. No me ha pasado como los niños de OT, que están encerrados en una Academia y de repente salen a la calle como estrellas. Hay mucho trabajo detrás.

También me ha pillado con una edad muy buena en la que tengo las cosas muy claras. Está bien que haya llegado en un momento en el que estoy centrado porque si me llega a pillar esto con 22 años, que estaba loca de la cabeza, me hubiera echado a la cocaína, las drogas y al rock and roll.

¿Has tenido que dejar algún proyecto?

La animación de 'Loco Mundo', porque no podía más. Sigo con 'Ilustres Ignorantes' y 'Pibonexia' lo tengo parado porque no puedo abarcar todo. Es imposible. Ya me estaba afectando un poco a nivel personal.  He tenido que aprender a decir que 'no' a cosas por salud mental. No puedes cogerlo todo porque, además, si coges tantas cosas nunca haces todo bien. Ojalá pudiese porque me estaría forrando muchísimo más, pero no puedo. 

Con lo que te gustan, ¿por qué dijiste que "cubrir los Goya fue un coñazo que te mueres"?  

Fueron muchísimas horas. Llegué a las tres de la tarde y me fui de allí a las tres de la mañana. No sé si habéis visto 'Lo de los Goyas', pero en el último vídeo se me ven los ojos hinchados como un sapo. No había ni una Coca Cola. Ya no pido alcohol, que me gusta, pero eso, en cualquier momento, me escapo y me tomo una copa... Estaba ahí toda la prensa agotada y ni siquiera había agua. 

Pero sigues queriendo presentar la gala de los Premios Goya, ¿no?

Sí, pero porque eso lo voy a cobrar bien (risas). Ahí no me importa, pero para cubrirlo, no hay color. No cobras tanto y te das la paliza...

'Lo de los Goya' ha sido tu primer proyecto en solitario para Movistar +. ¿Ha sido un experimento de cara a tu nuevo formato en #0?

La verdad es que yo me lo he tomado así. Era la primera vez que debutaba como presentadora y yo lo he vivido así para ver cómo me manejaba. Yo me he encontrado súper bien. A mí me ha gustado. Además, estuve con Javier Cansado y Pepe Colubi, que fueron básicos para que me sintiese cómoda. Movistar sabe mucho. Me ponen a gente con la que estoy agusto para que no la cague.

¿Te ves en un futuro haciendo programas similares a 'Lo de los Goyas', yendo a cubrir otros eventos importantes como, por ejemplo, el Festival de Eurovisión?

Me veo haciendo todo, pero quiero hacer cosas que me gusten de verdad. Pero ojalá me manden a Eurovisión porque, además, Blas Cantó me cae muy bien.

¿Cómo será tu nuevo programa en solitario para Movistar+?

No puedo decir nada. Va a ser muy original y muy guay. Lo único que puedo decir es que el formato es una idea pensada por Luis Álvaro y que está totalmente adaptada a a mi. La idea inicial fue suya, la fuimos matizando juntos y luego se la presentamos a Movistar+. Estoy muy cómoda con ello, y su lado siempre.

¿A quién te gustaría llevar a tu programa o entrevistarle?

Tengo una cuenta pendiente con Dvicio. En uno de los reportajes que hice para 'Las que faltaban', no sabía quiénes eran. Ahora stoy todo el día escuchándoles. No pensaba que cantasen tan bien. Creía que era una boyband. Espero que vengan al primer programa.

Vimos cómo hablaste con Pedro Almódovar en la alfombra roja de los Goya. ¿Qué le dijo al oído? 

No lo voy a decir jamás. Eso se queda entre Pedro y yo.

¿Te ves como 'chica Almodóvar'?

Total (Risas).Ojalá.

¿Con Rosalía también tienes cuenta pendiente?

Jo, Rosalía... Todo el mundo pensaba que tenía mal rollo con ella, pero qué va. Si me llamó guapa. A mí me encanta todo lo que hace. Quiero ser su amiga íntima porque me cae genial. Cuando dije que me había vetado, lo hice porque soy una descarada, ya que no tengo filtro, pero no fue ella, sino el equipo de alrededor, que solo permitían hacer preguntas serias y yo no quería.

Pero, ¿te dijeron personalmente que no podías hacerle preguntas?

Se montó un corrillo raro en el que nos dijeron que solo le podíamos hacer dos preguntas entre todos los que estabamos y sin vacilar. 

¿Eres más de calle o plató?

Me gusta más la calle. Me encanta el barullo y el cachondeo, puedo beber alcohol, salirme fuera, entrar, ver tíos buenos... El plató todo está más escorsetado, pero fuera disfruto muchi porque estoy libre y salvaje. 

Has recibido muchos mensajes de felicitación de tus fans y de mucha gente VIP. ¿Cuál te ha sorprendido más?

En general, me dicen cosas muy bonitas. Los famosos se están portando muy bien conmigo, pero me sorprendió mucho saber que Pablo Alborán era mi fan. Me había escrito en octubre por Instagram y no me di cuenta. Me quedé muy flipada de que había estado tres meses sin contestarle. Mi madre casi me arranca el cuello.

¿Te dicen muchas burradas por la calle?

Qué va, yo creo que no se atreven. Me paran para decirme cosas buenas, nunca me han dicho nada malo por el momento. Y si me lo dicen, que se preparen (risas).

Uno de tus momentos más virales fue cuando protagonizaste ese mítico topless en un photocall. ¿Cómo fue ese momento?

No estuvo preparado. Fue totalmente espontáneo en el momento. Vi que todas las chicas con unos escotes muy pronunciados, llegándome a preguntarme que cómo no se les sale el pezón. Llegó un momento en el que dije '¡A que me las saco!'. Miré a Luis Álvaro, me dijo 'Sácatelas' y lo hice.

Fue un cúmulo de todo, pero es que me dio igual. Lo he hecho muchas veces. Es el cuerpo femenino. Es una cosa muy bonita. No me las voy a sacar cuando esté vieja. Lo tengo que hacer ahora para que se vean porque son preciosas.

¿Cuánto tardaron los organizadores del photocall en echarte la bronca?

No se dieron cuenta en ese momento. Se percataron cuando ya salió en todos los medios a lo largo de esa semana. Días después, tuve que volver a un evento organizado por los mismos organizadores, a los que conozco y amo. Allí me dieron el toque, pero porque es su trabajo. Era normal. Con ellos todo bien. Siempre se han portado conmigo muy bien.

¿Qué famoso te ha sorprendido para bien al entrevistarle?

A mí me gustó mucho Edurne. Me la imaginaba simpática, pero no tanto. Fíjate si me cayó bien que me prometió un vestido que no me ha dado, y me sigue cayendo bien. Desde aquí aprovecho para pedirselo otra vez. Ahora, también prefiero que no me lo mande porque seguro que no me queda como ella.

¿Quién te ha parecido más borde?

No quiero decirlo, pero ha habido un par de personas muy bordes. No me gusta dejar mal a la gente (risas). 

Has tenido poco contacto con los políticos. ¿Te gustaría entrevistarles más?

Que va, no me apetece nada. Eso ya lo hacían muy bien los de 'Caiga quien caiga'.

Prefiere a los actores, ¿no? Es más, ahora estás saliendo con uno de ellos...

Sí, me he ligado a Israel Rodríguez. He cumplido mi sueñito. El otro día hice mi primer posado oficial con novio en un photocall. Me dijeron: "Te has traído a Israel". Y contesté: "No, si te parece me lo dejo en casa" (Risas). Me lo llevé porque todavía hay tías en España que todavía no saben que estoy con él.

Pero fíjate lo bonito que es que os hayáis conocido en uno de tus reportajes...

Además, era un actor que siempre me había gustado desde pequeña. Fisicamente, era el que más me encantaba de todos. Entonces, me he ligado al que más me ponía. Ha sido como un sueño de la Cenicienta todo el rato.

Si tuvieras la oportunidad de hablar con la Susi Caramelo de hace unos años, ¿le darías algún consejo para que cambiase algo? 

No. Creo que todo el mundo tiene su evolución y a mí me ha llegado el momento cuando estaba preparada. Si no hubiera pasado por todos mis trabajos, no sería como soy. Entonces, no me ahorraría nada. Le diría que no siga consejos de nadie porque hay mucha gente que te los intenta dar, pero solo stán bien cuando los pides, no cuando te los dan porque sí.

Hay mucha gente que te dice cómo tienes que llevar tu carrera. Por ejemplo, recuerdo que cuando empecé me decían que no me riese sobre el escenario, y hoy en día es una de mis señas de identidad. No he hecho nunca caso a nadie. Uno se tiene que guiar de su instinto y ya está. El aprendizaje es lo que cuenta y no hay que ahorrarse nada.

He invertido muchos años en mí, en trabajar sin ganar un duro para llegar a dónde estamos ahora. Esto no me llega de la noche a la mañana. Como a Carmen Machi, que le llegó más tarde, y mírala. Es mi actriz favorita.

¿Qué te dicen tus paisanos de L'Hospitalet cuando te ven?

Ya no voy mucho, pero me paran. Es que yo siempre he sido conocida en mi barrio, pero mi abuela más. Hay gente que me conocía por ser la nieta de Carmen. Era demasiado. Si yo no me corto, ella muchísimo menos. 

Pero, ¿por qué era tan conocida en tu barrio?

Era una señora que si tenía que jugar a las máquinas, jugaba, si tenía que beber alcohol, bebía. Se murió fumando tres paquetes de tabaco al día. Se la sudaba muchísimo más todo. Era muy moderna.