El incendio del Pont de Vilomara avanza sin control y obliga a evacuar a los vecinos

Vecinos abandonando sus casas con la documentación imprescindible, casas quemadas, vecinos confinados, espacios provisionales para acoger desalojados donde se reparten agua y mascarillas, cortafuegos… Este es el dantesco panorama generado por la tormenta de más de mil hectáreas de fuego que ha vivido este domingo la comarca del Bages, y que ha provocado devastación y miedo especialmente en el primer gran incendio del verano en Catalunya.