La DGT advierte a los conductores del 'efecto túnel': mucho cuidado en las carreteras

La Dirección General de Tráfico (DGT) aprovecha los meses de verano, en los que es más habitual que los ciudadanos cojan el coche, para recordar normas de tránsito que son habituales que los conductores olviden.

La DGT lucha para que se reduzcan los accidentes en carretera y recuerda que uno de los efectos negativos más destacados que tiene el exceso de velocidad es que afecta al proceso de percepción visual del conductor. Provoca el llamado efecto túnel, un fenómeno que ocurre cuando los vehículos en una carretera experimentan un estrechamiento perceptual, lo que lleva a una reducción de la velocidad y un aumento de la tensión en los conductores. Este efecto se asocia comúnmente con la entrada o salida de túneles reales, pero también puede ocurrir en otras circunstancias, como cuando se circula a alta velocidad.

Consecuencias del 'efecto túnel'

Las consecuencias del 'efecto túnel' por velocidad son:

1. Estrechamiento del campo visual: a medida que la velocidad aumenta, la capacidad del conductor para percibir objetos y eventos en los márgenes del campo de visión disminuye. Esto significa que el conductor se enfoca más en lo que está directamente delante de él y menos en lo que está en los lados.
2. Pérdida de la visión periférica: la visión periférica, que es esencial para detectar peligros que no están directamente en el camino del vehículo, se ve significativamente afectada. Esto puede hacer que el conductor sea menos consciente de lo que ocurre a su alrededor, aumentando el riesgo de accidentes.
3. Ignorar señales o a conductores que circulan junto a nosotros: dado que el conductor está más enfocado en la carretera directamente frente a él, puede ignorar señales, otros vehículos, o posibles peligros que no están en su línea directa de visión.
4. Impacto en seguridad: el efecto túnel puede reducir la capacidad del conductor para reaccionar rápidamente a eventos inesperados, como la aparición de un vehículo en un carril adyacente o un obstáculo en la carretera. Esto aumenta el riesgo de colisiones, especialmente en situaciones de tráfico denso o en carreteras con curvas.

La DGT ha querido recordar, a través de su cuenta de Twitter, algunas definiciones teóricas que se tienen que tener en cuenta cuando se coge el volante, y aunque una persona sea veterana en la conducción, no debe pasar por alto. En concreto, ha hecho hincapié de la diferencia entre la distancia de reacción, la distancia de frenado y la distancia de detención.

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• La distancia de reacción es la que recorre el vehículo desde que el conductor percibe el peligro hasta que pisa el freno.
• La distancia de frenado es aquella que recorre el coche desde que el conductor pisa el freno hasta que se detiene.
• La distancia de detención es la suma de ambas y es mayor si el coche va a una velocidad más elevada.