La nueva señal de tráfico que Trànsit ha empezado a probar en este punto de Catalunya

El Servei Català de Trànsit (SCT) ha puesto en marcha una nueva señalización para los cruces que se activa con el paso de los vehículos. La prueba piloto ya está en funcionamiento en la intersección de la N-340 con la BV-2429 en Sant Cugat Sesgarrigues (Alt Penedès, Barcelona).

El sistema se basa en un panel situado en la citada vía que se activa cuando un vehículo está a punto de incorporarse desde un camino secundario. "Mejora el efecto de las señales convencionales porque es dinámico y ofrece más información", ha destacado la subdirectora general de gestión del tráfico del SCT, Lourdes Puigbarraca, que ha precisado que la pantalla indica de qué lado vienen los vehículos y recuerda la velocidad máxima permitida. Si funciona, se pondrán en una decena de puntos de la red viaria catalana.

Señalización pionera

Puigbarraca ha resaltado que es un sistema "inteligente y novedoso" por la diversidad de mensajes que emite y su precisión. El dispositivo para señalizar el cruce es pionero al conjunto de Catalunya y también en el resto de España, según Puigbarraca, puesto que el panel se enciende de forma autónoma, y lo hace precisando por qué lado vienen los vehículos que entran en la vía principal.

¿Cómo funciona?

Los vehículos que circulan por la vía secundaria pasan por encima de unos sensores situados bajo el asfalto a unos 20 metros de distancia de la intersección, los cuales activan el panel situado en la N-340. Justo en el cruce, donde existe una señal de 'Stop', otros sensores hacen que el panel se apague diez segundos después de completar la incorporación. "Esto hace que el conductor de la N-340, si ve el panel apagado, tenga la certeza de que nadie está entrando en la vía", ha apuntado Puigbarraca.

El jefe del área regional de tráfico de la Región Metropolitana Sur de los Mossos, Marc Patxot, ha destacado que la capacidad de encendido autónomo que tiene el panel hace que, "sin duda, se rompa la monotonía de la conducción, lo que hace ganar eficacia a las señales que avisan de que entra otro vehículo". Además de indicar de qué lado viene el vehículo que se incorpora, también se recuerda que la velocidad máxima a circular, que es de 50 km/h en ese caso concreto.

La prueba piloto

Trànsit ha elegido el cruce de Sant Cugat Sesgarrigues para hacer la prueba piloto porque es un punto donde la N-340 tiene una media de 21.440 vehículos diarios, 2.000 de los cuales son camiones. La confluencia con una carretera local de baja intensidad y la imposibilidad de construir una rotonda -porque ya hay dos cerca-, hacían que el lugar fuera perfecto para probar este sistema. Asimismo, también se ha tenido en cuenta que ha habido dos accidentes mortales en los últimos doce años.

Si funciona, se instalarán más

La previsión de Tráfico es replicar esta nueva señalización a entre cinco y diez cruces más de diferentes carreteras catalanas. Puigbarraca ha recalcado que tendrán que ser intersecciones donde confluyan vías de gran intensidad con carreteras secundarias.

La prueba forma parte de otras iniciativas con las que Trànsit quiere probar tecnologías inteligentes, como el sistema presentando recientemente para detectar ciclistas a la N-145 en la Seu d'Urgell. En breve, también se prevé poner en marcha una prueba para detectar la presencia de animales en la N-160 a Girona. Todo forma parte del Plan de seguridad viaria 2024-2026.