La ola de calor dará paso a un cambio brusco del tiempo en Catalunya, con bajada de las temperaturas y chubascos

La ola de calor que ahora mismo atraviesa la Península Ibérica y que ha disparado los termómetros en los últimos días, dejando máximas de más de 40 grados en casi un centenar de localidades españolas, acabará en las próximas horas con la llegada de un frente atlántico. En Catalunya, según advierte Meteocat, entre el martes y el miércoles se espera un cambio brusco en las condiciones meteorológicas, una bajada de los termómetros y un importante riesgo de precipitaciones. Por ahora, todo apunta a que las lluvias se concentrarán en la zona de los Pirineos y Prepirineos y podrían llegar acompañadas de tormentas y hasta de episodios de granizo.

La ola de calor llega a su máximo: más de 87 municipios españoles se sitúan por encima de los 40 grados

Las lluvias han empezado a abrirse paso este domingo. Durante esta tarde, de hecho, el Servei Meteorológic de Catalunya ha activado una alerta amarilla en el norte de Catalunya, sobre todo en el Pallars Sobirà, por riesgo de intensas lluvias y tormentas. De cara al lunes se espera que la situación de inestabilidad se mantenga y produzca intensos chubascos en varias zonas del Pirineo y el Prepirineo. En algunos puntos, las precipitaciones podrían llegar acompañadas de tormenta y granizo. La situación se repetirá el martes, aunque en este caso se prevé que las tormentas sean mucho más extendidas y alcancen prácticamente todo el tercio oeste y se extiendan hasta el prelitoral. Los pronósticos son aún inciertos pero, por ahora, no se descarta que las tormentas puedan ser más extendidas.

En los próximos días podría darse un descenso puntual de los termómetros, aunque parece que no durará mucho

Leve descenso de las temperaturas

En los próximos días también se espera un ligero descenso de los termómetros. Este fenómeno ha empezado ya a notarse este domingo, ya que, pese al intenso calor que aún se siente en todo el territorio, tanto la temperatura media como las máximas están siendo más bajas que las de ayer sábado cuando se superaron los 40 grados en decenas de localidades catalanas. De cara al lunes y al martes, se espera que los termómetros bajen ligeramente respecto a los valores de los últimos días. En algunas zonas, como en el Ponent de Lleida, podría darse un descenso repentino y algo brusco de las temperaturas prácticamente de un día para otro. Pero en el resto del territorio, aunque es muy posible que se note al menos un poco el cambio respecto a los últimos días, nada sugiere que vamos a tener unos días de frescor.

En ciudades como Barcelona, así como otros municipios costeros del área metropolitana, los pronósticos apuntan a que la situación seguirá más o menos como en los últimos días aunque, por suerte, se podría dar una ligera bajada de las mínimas. Entre este domingo y el martes, los termómetros oscilarán entre los 30 y los 25 grados aproximadamente. La noche entre el lunes y el martes, sin embargo, parece que la noche será algo más 'fresca' respecto a los últimos días y, de hecho, podrían darse mínimas de 23 grados. De ser así, sería una de las pocas noches de lo que llevamos de verano en las que no se registran valores tórridos. Algunos modelos también indican que el martes podrían darse lluvias pero, por ahora, aún no está claro.