Abierto de Tenis de EEUU

Alcaraz, arrollador, vuelve a los cuartos, donde se medirá a Zverev

El astro de El Palmar gana en tres sets (6-3, 6-3 y 6-4) al joven italiano Matteo Arnaldi y tiene cita con el alemán, superviviente de un duelo monumental con Sinner

En el circuito femenino habrá nueva número 1 y Nueva York coronará a una nueva reina tras la despedida de Swiatek.

Flushing Meadows (United States), 04/09/2023.- Carlos Alcaraz of Spain returns the ball to Matteo Arnaldi of Italy during their fourth round match at the US Open Tennis Championships at the USTA National Tennis Center in Flushing Meadows, New York, USA, 04 September 2023. The US Open runs from 28 August through 10 September. (Tenis, Italia, España, Nueva York) EFE/EPA/SARAH YENESEL 22374

Flushing Meadows (United States), 04/09/2023.- Carlos Alcaraz of Spain returns the ball to Matteo Arnaldi of Italy during their fourth round match at the US Open Tennis Championships at the USTA National Tennis Center in Flushing Meadows, New York, USA, 04 September 2023. The US Open runs from 28 August through 10 September. (Tenis, Italia, España, Nueva York) EFE/EPA/SARAH YENESEL 22374 / EFE/SARAH YENESEL

Idoya Noain

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Amenaza tormenta en Nueva York y los organizadores del Abierto de Estados Unidos cierran el techo sobre la pista Arthur Ashe. Ahí sale Carlos Alcaraz, campeón en 2022, a medirse en octavos con Matteo Arnaldi. Lleva un par de vendajes elásticos en los muslos, ecos de los de protección con los que debutó en Wimbledon. Pero no había de qué preocuparse, ni en términos de lluvia (unas gotas) ni por el cuerpo de Alcaraz, que luego explicaría que "no es nada serio" y se lo puso "solo por precaución" tras sentir algunas molestias. Porque el campeón murciano ha sido el único rayo que se ha visto en Flushing Meadows, uno que fulminó sin dar opciones al voluntarioso joven italiano con un 6-3, 6-3 y 6- 4.

Zverev, rival tras duelo épico

Alcaraz vuelve así a cuartos, donde se medirá este miércoles a Alexander Zverev, que para llegar al partido necesitará una importante recuperación. Porque el alemán de 26 años y número 12 del mundo ha sido el vencedor de un duelo tan monumental como absolutamente demoledor y extenuante con Jannik Sinner este lunes por la noche. Y para sellar ese 6-3, 3-6, 6-2, 4-6 y 6-3 cuando el reloj rondaba las dos menos veinte de la madrugada, 'Shasha' ha tenido que jugar su partido más largo nunca en Nueva York: cuatro horas y 41 minutos.

Ese encuentro ha sido un drama y una paliza, una oda a la resistencia, una batalla para los anales. Las condiciones infernales de calor y humedad en la noche neoyorquina, con el techo ya abierto y sin las ventajas del aire acondicionado, y la exigencia mutua han castigado sin compasión los cuerpos de los dos jugadores. Y ambos han mostrado tanta potencia y tenis como orgullo.

Ni cuando el cuerpo parecía haber llegado a su límite, visiblemente en el caso de un Sinner acalambrado que casi ni podía caminar en el tercer set, ninguno ha tirado la toalla. Y bien entrada la madrugada, ahí seguían, sacando de la raqueta y la cabeza golpes espectaculares y señales de fuerza, aunque los movimientos de sus cuerpos entre puntos no pudieran ocultar el agotamiento. Hasta que Zverev ha acabado inclinando la balanza.

"Esto es para lo que vivo", ha asegurado a pie de pista el alemán. "Ahora tengo que recuperarme bien, pero estaré listo”, ha prometido también sobre su encuentro con Alcaraz Zverev, que afirma sentirse en uno de los mejores momentos de su carrera y ha demostrado que está, como dice, "de regreso", olvidada ya la lesión del año pasado en Roland Garros.

Distinto camino de Alcaraz

Muy distinto había sido unas horas antes el partido de Alcaraz. Arnaldi tiene 22 años, es el 61 del mundo, y dice mucho de él que fuera capaz de ventilarse en tres sets en la ronda previa a Cameron Norrie, y en la anterior en cinco a otro fenómeno adolescente, el francés Arthur Fils. Su currículo está lleno de primeros este año (primera entrada en el top 100, primera victoria en un Grand Slam en París, primer avance hasta octavos en Nueva York). Pero ganarle al número 1 seguirá pendiente.

Porque Alcaraz salió arrollador. Incluso con un par de dobles faltas, y pese a que al de San Remo no le falta osadía, el de El Palmar rompió en el el sexto juego y la primera manga la tenía resuelta en poco más de media hora. No fue muy distinta la segunda, que Alcaraz inclina a su favor rompiendo nada más empezar a Arnaldi con un pase cruzado del revés. Y a base de dejada y volea, apabullando en la red al italiano, el murciano ya dejó ir el partido, aunque al otro lado de la red Arnaldi hubiera mejorado e intensificado la defensa.

El italiano no se rendía y en el tercer juego rompió en blanco, y hasta defendió con garra cuando Alcaraz estuvo a punto de anular esa ventaja, poniendo el estadio a más de 100 decibelios con su resistencia. Pero tenía poco que hacer y llegó esa ruptura, y más muestras de talento de Alcaraz, ese tenista cuya derecha, como dice John McEnroe (que ha vuelto a comentar presencialmente el US Open tras unos días alejado por covid), será estudiada por generaciones.

Para poco después de las tres y media de la tarde locales, aprovechando la primera bola de partido con servicio del italiano, el partido estaba resuelto. Y Alcaraz volvía a cuartos, por tercer año consecutivo, y convirtiéndose en el segundo hombre de la era Open en hacerlo con menos de 21 años, después de André Agassi entre 1988 y 1990. De hecho, lo hace con un mes menos de edad que el de Las Vegas.

Antes de saber quién sobreviviría en el duelo entre Sinner y Zverev el murciano analizó también a sus dos posibles rivales. Y al hablar de Zverev, el que acabó conquistando la plaza, el español recordó el igualado cara a cara (aunque Zverev tiene tres victorias en sus cinco encuentros previos), pero también el "alto nivel" que ha recuperado el alemán. "Van a ser unos cuartos de final realmente duros", auguraba.

Cambio en la cumbre femenina

En el cuadro femenino se ha garantizado que Nueva York coronará a una nueva reina. Iga Swiatek, la campeona del año pasado, no podrá revalidar titulo tras ser apeada por la letona Jelena Ostapenka.

La polaca, además, perderá el número 1 de la WTA, donde el lunes amanecerá, con independencia de su resultado en Nueva York la bielorrusa Aryna Sabalenka.