Ciencias Planetarias

Rastros de la atmósfera primitiva de la Tierra pueden estar ocultos en la Luna

Los científicos creen que podría obtenerse información clave sobre el pasado de nuestro planeta en nuevas muestras lunares

Panorama del cráter Plum, con el comandante de la misión Apolo 16, John Young, a la izquierda. La muestra lunar 61016, examinada en el estudio y más conocida como “Big Muley”, está justo por encima del extremo derecho de la sombra de Young.

Panorama del cráter Plum, con el comandante de la misión Apolo 16, John Young, a la izquierda. La muestra lunar 61016, examinada en el estudio y más conocida como “Big Muley”, está justo por encima del extremo derecho de la sombra de Young. / Créditos: James Stuby/NASA.

Pablo Javier Piacente

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Un breve campo magnético lunar, que habría existido durante menos de 140 millones de años, podría arrojar luz sobre los inicios de nuestro planeta. Además, un nuevo análisis de cristales individuales, en rocas recolectadas durante las misiones Apolo, también plantea la posibilidad de que el suelo lunar pueda contener rastros de la atmósfera primitiva de la Tierra.

Un estudio publicado hace unas horas en la revista Communications Earth & Environment, liderado por el científico John Tarduno, de la Universidad de Rochester, en Estados Unidos, concluye que el campo magnético de la Luna puede haber existido durante menos de 140 millones de años, si es que alguna vez existió. Su presencia ha sido una gran incógnita en el campo de las ciencias planetarias, pero además podría estar relacionada con nueva información sobre la atmósfera primitiva de la Tierra.

Los hallazgos, basados en nuevos análisis de cristales individuales, obtenidos en rocas recolectadas durante las misiones Apolo de la NASA en las décadas de 1960 y 1970, también indican que el suelo de la Luna podría ocultar rastros de la atmósfera primitiva de la Tierra. La obtención de nuevas muestras lunares permitiría confirmar o refutar esta hipótesis, basada en firmes indicios trabajados por Tarduno y sus colegas.

¿Hubo un campo magnético lunar?

Hasta el momento, los científicos no están seguros de si el núcleo de la Luna fue capaz de generar un campo magnético. Como sabemos, la magnetosfera de la Tierra fue crucial para permitir el desarrollo de la vida y su preservación y evolución a lo largo del tiempo, al funcionar como un “escudo” contra las radiaciones solares nocivas y otros riesgos inherentes al clima espacial.

Algunos modelos previos han indicado que la Luna tuvo un campo magnético comparable en fuerza al de la Tierra, durante casi 2 mil millones de años. Estas suposiciones se basan en los resultados del análisis magnético de muestras de rocas completas recolectadas durante las misiones Apolo 16 y Apolo 17. Sin embargo, al mismo tiempo otros modelos han cuestionado esta idea, ya que los cálculos sugieren que el núcleo lunar no podría haber tenido suficiente energía como para sustentar un campo magnético de esta fuerza.

En el nuevo estudio, los investigadores estadounidenses analizaron las propiedades magnéticas de cristales individuales de cuatro de las muestras recolectadas por las misiones Apolo, formadas hace aproximadamente entre 3.69 y 4.36 mil millones de años. Los cristales contienen diminutos minerales magnéticos, que preservan la intensidad del campo magnético circundante en el momento en que se formaron.

De acuerdo al análisis realizado, los científicos concluyeron que no existía un campo magnético en toda la Luna en el momento de su formación, lo que significa que el supuesto campo magnético lunar solo podría haber existido entre hace 4.360 millones de años y la formación de la Tierra, que se concretó hace aproximadamente 4.500 millones de años.

Huellas del pasado profundo de la Tierra

En consecuencia, los resultados podrían significar que los restos de la atmósfera primitiva de la Tierra se conservan en el suelo lunar, teniendo en cuenta que el satélite se originó como resultado de una colisión entre la joven Tierra y un protoplaneta del tamaño de Marte hace 4.500 millones de años, según las principales teorías.

Actualmente, las partículas de la atmósfera de la Tierra son transportadas a la superficie lunar cuando la Luna pasa a través de la magnetosfera terrestre, debido a que no existe un campo magnético lunar activo que las contenga. Algunas de estas partículas permanecen en el suelo lunar después del impacto. Este transporte de partículas podría haber ocurrido en cualquier momento en el que no hubiese un campo magnético lunar presente.

De esta manera, podrían existir rastros de la atmósfera de la Tierra en la Luna que datan de hace 4.360 millones de años, durante el eón Hádico. En ese momento, la superficie de nuestro planeta todavía estaba en gran parte fundida y existe poca evidencia de las condiciones existentes: quizás nuevas muestras lunares puedan comenzar a revelar los secretos de ese instante inicial de la Tierra.

Referencia

A lunar core dynamo limited to the Moon’s first ~140 million years. Tinghong Zhou, John A. Tarduno et al. Communications Earth & Environment (2024). DOI:https://doi.org/10.1038/s43247-024-01551-z