Astronomía / Ciencias Planetarias

El Telescopio Web detecta extrañas formas brillantes sobre Júpiter

Estarían relacionadas con la Gran Mancha Roja, una enorme tormenta activa desde hace siglos en la atmósfera joviana, con un tamaño similar al del planeta Tierra

Estructuras extrañas observadas por el telescopio Webb en la ionosfera de Júpiter, sobre la Gran Mancha Roja.

Estructuras extrañas observadas por el telescopio Webb en la ionosfera de Júpiter, sobre la Gran Mancha Roja. / Créditos: ESA/Webb, NASA y CSA, equipo ERS de Júpiter, J. Schmidt, H. Melin, M. Zamani.

Pablo Javier Piacente

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En lo alto de la atmósfera de Júpiter, específicamente en la ionosfera, los astrónomos han identificado con la ayuda del Telescopio Espacial James Webb (JWST), nuevas características extrañas y brillantes. Se ubican en la región situada encima de la tempestuosa Gran Mancha Roja, y serían un reflejo de las potentes tormentas que se desatan en la atmósfera de este planeta, las más poderosas del Sistema Solar.

En un nuevo estudio publicado recientemente en la revista Nature Astronomy, un equipo internacional de científicos liderado por Henrik Melin, de la Universidad de Leicester, en Reino Unido, observó mediante el Telescopio Espacial James Webb (JWST) la región situada sobre la Gran Mancha Roja de Júpiter y descubrió una amplia variedad de características nunca antes apreciadas. La región, que previamente se creía poco llamativa, escondía estructuras que sorprendieron a los astrónomos y obligan a su revisión.

La tormenta eterna

La atmósfera de Júpiter es un sitio especialmente turbulento, con múltiples tormentas y sistemas meteorológicos que se desatan con una intensidad que no tiene comparación en el Sistema Solar: la Gran Mancha Roja, precisamente, es la tormenta más grande que existe en el sistema planetario alrededor del Sol. Además de su poder y su tamaño, similar al de la Tierra, se ha mantenido activa durante siglos.

Como los científicos quieren desvelar el misterio detrás de la Gran Mancha Roja, para saber finalmente qué la impulsa y por qué persiste durante tanto tiempo, enfocaron todo el potencial del telescopio Webb sobre la ionosfera, en lo alto de la atmósfera joviana, donde las concentraciones de hidrógeno ionizado provocan un brillo infrarrojo en forma de arcos, bandas y manchas. Es una zona poco explorada de la atmósfera de Júpiter.

Ondas gravitacionales, una posible explicación

Gracias a la aguda mirada del JWST, encontraron estructuras complejas e intrincadas en el hidrógeno, formadas a partir de concentraciones más altas y más bajas de iones con carga positiva llamados cationes trihidrógeno (H3+), que se generan a partir de la radiación solar ultravioleta. Según un artículo publicado en Science Alert, esto sugiere que aunque el mecanismo dominante para la ionización del hidrógeno es la luz solar, hay otro elemento o fenómeno en juego que hace que aparezcan formas extrañas en el gas.

“Una forma de cambiar esta estructura es mediante ondas gravitacionales, similares a las olas que se estrellan en una playa y crean ondulaciones en la arena. Estas ondas se generan en las profundidades de la turbulenta atmósfera inferior, alrededor de la Gran Mancha Roja, y pueden viajar a gran altitud, modificando la estructura y las emisiones de la atmósfera superior”, explicó Melin en una nota de prensa.

Además de arrojar luz sobre el mecanismo que altera la forma y la estructura de la atmósfera superior de Júpiter, los hallazgos también podrían servir de apoyo a la misión Juice de la Agencia Espacial Europea (ESA), lanzada el 14 de abril de 2023 y que tiene como objetivo explorar las lunas heladas de Júpiter (Ganímedes, Calisto y Europa). La misión caracterizará a estas lunas, pero también explorará en profundidad el complejo entorno de Júpiter y estudiará el sistema en su conjunto, como modelo de los gigantes gaseosos que pueden existir en otras partes del Universo.

Referencia

Ionospheric irregularities at Jupiter observed by JWST. Henrik Melin et al. Nature Astronomy (2024). DOI:https://doi.org/10.1038/s41550-024-02305-9