Alberto Chicote ('Pesadilla en la cocina"): "El programa del Nicasso, de Barcelona, se colocará para los 'pesadilleros' en el 'top' 3 o 5"

Dice Alberto Chicote (Madrid, 1969) que los ‘pesadilleros’, que son legión, le cuentan que cenan viendo un capítulo de ‘Pesadilla en la cocina’. Pese a que el programa es solo apto para estómagos muy resistentes (por las guarradas que encierran las cocinas y los dramas humanos que afloran) no parece provocarles indigestión. Ni empacho, ver una y otra vez los episodios antiguos. Ahora, no obstante, ya podrán degustar la nueva hornada: la novena temporada se servirá todos los martes, a partir del 3 de septiembre (22.30 horas), en Antena 3. Buen provecho.

 Se han encontrado nuevas 'joyitas': un restaurador que descongelaba la comida en el lavavajillas y otro que mataba los bichos con utensilios de cocina... Es fácil imaginar su reacción.

La mayoría de las veces, primero, con sorpresa. Cuando crees que ya lo has visto todo, te das cuenta de que estás equivocado y que te quedan cosas por ver. La manera de afrontar el trabajo en el esfuerzo, la dedicación, todo eso es lo que la mayoría de las ocasiones falla y se termina traduciendo en otras cosas que me han dejado absolutamente ojiplático; sin saber muy bien por dónde salir. Pero no soy un tipo de rendiciones y lo que te pongan por delante hay que saberlo afrontar.

¿Lo de aplastar bichos lo hacían sin esconderse?

 Vamos, sin ningún rubor ni ningún problema.

A veces uno piensa que comer en un restaurante es un acto de fe. Y, claro, esos restauradores pretenden que vaya usted con su varita y haga magia.

Supongo que cuando alguien de un establecimiento con problemas llama a 'Pesadilla' en la cocina ya lo he intentado todo antes. Ya ha probado a cambiar la carta, el equipo... Y piensan: ¿y si esta es la solución?

Aunque sea a costa de mostrar sus miserias.

Es que no se puede proponer una mejora, un cambio ni nada sin conocer el problema que tienes que afrontar. H Por eso la primera parte es esa especie de auditoría culinaria y a partir de ahí vamos a ver qué es lo que pasa. En la mayoría de los casos hay un trasfondo o una consecuencia que tiene más que ver con lo personal que con lo estrictamente profesional. Nosotros siempre procuramos ver cuáles son esos trasfondos que en algunos casos han sido la consecuencia y en otros, el motivo.

Usted ha puesto un restaurante hace dos años. ¿No teme que los comensales le hagan la prueba del algodón?

Sé que lo van a hacer y como lo sé, estoy preparado. Mi cocina se ve íntegra desde cualquier punto del comedor. Tengo dos: una en un lateral y otra en el centro del comedor, para que todo el mundo pueda ver cómo trabajamos. Por dos motivos: el fundamental no es el que tú dices, sino que los que trabajamos aquí estamos muy orgullosos. Cuando te sientes orgulloso del trabajo, no lo quieres ocultar, sino todo lo contrario, quieres enseñarlo.

Hay restauradores indignados que han montado una Asociación de Afectados por Pesadilla en la cocina. ¿Se han puesto en contacto con usted?

 No. Una vez que terminan de grabar no guardo una relación personal con prácticamente con ninguno de ellos. Solo con alguno. Ten en cuenta que son muchos establecimientos, mucha gente y yo también tengo mi vida personal. Y si voy a una ciudad, acudo a los restaurantes de amigos míos.

Pero esa asociación quería denunciarlo.

 Sí, sí, claro, pero la cosa no ha llegado a ningún sitio. Más allá de vamos a hacer una asociación anti-Chicote, . Vamos a denunciar y no sé qué, pero nunca llegó a nada más. Los que los que estén contentos con nuestro trabajo, que creo que son muchos, encantado y feliz. Y los que no, lo lamento en el alma. Nosotros hemos hecho el trabajo con la mejor de las intenciones posibles y si no te ha gustado por el motivo que sea, no puedo más que lamentarlo.

Aunque también hay muchos ‘pesadilleros’. Y tienen quemadas las reposiciones de tanto verlas.

Es que parece ser que el seguidor de 'Pesadilla...' es muy ferviente. Y consumen los programas en bucle. Ven las temporadas desde la primera y cuando llegan a la octava, empiezan de nuevo, deseando que lleguen programas nuevos. Mucha de la gente que viene a mi restaurante son fans de ‘Pesadilla en la cocina’ y me lo dicen. Y que se ponen un capítulo para cenar cada día.  Creo que el programa de este martes, el del restaurante Nicasso, de Barcelona, va a ser de esos que se va a colocar para los 'pesadilleros' en el 'top' tres. Máximo en el cinco.

Por el camino han quedado muchos cadáveres, pero ha curado a muchos otros. Y eso le llenará de satisfacción.

Lo más importante, al menos para mí, es tener la conciencia de que tu trabajo y el de todo el equipo está bien hecho. ¿Nos hace sentir felices a todos que los restaurantes que atendemos hayan aplicado los cambios que les hemos propuesto, que hayan cambiado cosas, que se hayan puesto al día y que el público les haya refrendado? Evidentemente. Pero, pero por desgracia, una vez que nosotros les hemos propuesto los cambios, hemos dado todas las herramientas para poder aplicar los cambios para hacer otro tipo de oferta, para entender el negocio de otra manera, una vez eso está hecho, repito, y bien hecho, se escapa de nuestras manos. Un profesor le enseña a tu hijo la materia que tiene que aprender, le da la documentación, el libro, pero si tu hijo no estudia, suspende el examen. Y no vas a decirle al profesor: oiga que mi niño ha suspendido. Imagino que a un profesor lo que más le tiene que molar del mundo es que a todos los alumnos que están a su cargo tengan la mejor nota del mundo.  .

Le veremos de nuevo cabreado, porque este programa saca lo peor de usted. Donde le hemos visto feliz ha sido en los 'cameos' que hizo en 'Amar es para siempre'.

 Eso fue uno de eso regalos que tiene el mundo de la tele, al que pensé que nunca iba a acceder hasta hace 12 años. Y como me apunto a todo --a los concursos, a los 'cameos...--, cuando en Antena 3 me preguntaron si me apetecería, dije: "¡Si 'Amar es para siempre' es parte de la historia de la tele!". Y me lo hicieron tan bonito que pensé que esto era un regalo del cielo. Me lo pasé de coña. Y el resultado me parece cachondísimo. Con lo de las croquetas Indiana Jones y John Wayne nos reímos muchísimo. Y lo mismo 'Pasapalabra'. Me encanta ver programas por dentro.