Concursante de 'Tu cara me suena'

Raquel Sánchez Silva: "Soy periodista, pero a mí el entretenimiento me ha dado una vida»

La presentadora Raquel Sánchez Silva, concursante de 'Tu cara me suena'.

La presentadora Raquel Sánchez Silva, concursante de 'Tu cara me suena'. / Manu Mitru

Inés Álvarez

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Pronto hará 30 años que empezó su carrera en los medios como reportera de deportes, un tiempo este en el que Raquel Sánchez Silva (Plasencia, 1973) no ha parado de encadenar trabajos como presentadora de informativos, 'realities', concursos... Aunquea, como le gustan los retos, tambiénha querido ponerse a prueba en la piel de un concursante en 'Masterchef Celebrity', 'El desafío', y, ahora, en 'Tu cara me suena' (Antena 3), donde está demostrando que sin ser cantante puede ofrecer grandes números. Su imitación de Mery, de Nebulosa, y, sobre todo, la de Luz Casal, demuestran que cuando se propone algo, le echa horas y ganas para no defraudar. A la segunda semifinal, que se emite el viernes 12 (el viernes 5 habrá un especial con los mejores momentos de la edición) llega en una posición muy digna.

Empezó fuerte con su imitación de Nebulosa. Podría haber ido a Eurovisión en lugar de Mery.

Digamos que se alinearon las estrellas, porque tenemos una voz muy parecida, el físico... Porque, a veces, con la caracterización no te pareces tanto. Hasta a mí impresionó lo que me parecía a Mery. Luego también tenemos una edad similar, un mensaje que con cierta edad puedes defender desde otro lugar...  

Raquel Sánchez Silva participa en 'Tu cara me suena'.

Raquel Sánchez Silva participa en 'Tu cara me suena'. / Manu Mitru

Aunque a todas les pone ganas.

Como no somos cantantes, no conocemos nuestro lugar, y tienes que dejar que el pulsador te lleve a sitios en los que a lo mejor te sorprendes, como me pasó con Dua Lipa, que a mí me parecía imposible y hasta te puedes sentir cómoda. Es mejor no pensar mucho. Es básico hacerlo con la desinhibición de un niño o una niña cuando canta. Si eres capaz de llegar ahí, es muy difícil que lo pases mal. Solo antes de salir, pero una vez ahí es un disfrute máximo.

Y llegó Luz Casal: la bordó y ganó.

Me ha costado asimilarlo hasta que lo he visto en la tele, porque no sentí que estaba sonando tan bien. Pero en esa actuación, más allá de cantar bien, había una parte de interpretación muy trabajada. Mucha gente me ha dicho en las redes que lloró viéndola, que se emocionó. Eso es como un regalito de la vida que me llevo. Más que ganar esa gala, que también, porque es difícil ganar una con un elenco como este. Y lo más bonito es cómo se alegraron mis compañeros. Para mí eso vale casi más que todo lo que ha pasado. 

«Mucha gente me ha dicho en las redes que lloró viendo mi Luz Casal. Eso es un regalito de la vida que me llevo»  

Es más difícil si no se es cantante, claro.

Todos deberíamos tener la oportunidad de ganar. Pero es una edición en la que es muy difícil, porque hay mucho talento y entre los cantantes a eso se suma que tienen una voz prodigiosa. Y esa combinación ganadora es muy difícil de superar. Encontrar nueve personas tan aplicadas, que curren tanto y que estén tan metidas en el programa, yo que hago cástings, sé que es muy complicado. Porque siempre hay dos o tres que no acaban de encajar, de encontrar el punto, no acaban de ilusionarse lo suficiente, o les abruma el proyecto. Eso aquí no ha pasado.

Para aplicada, usted, que incluso recibe clases de canto y baile. 

Vivo para Tu cara me suena. Empecé dos meses antes a trabajar la voz y volví a bailar. Me da un poco de vergüenza reconocer cuántas horas le echo a la semana, porque es un trabajo a jornada completa, con sábados y domingos. En mi casa están hartos. Además, tengo dos coaches maravillosos. Es una inversión de mucho tiempo, pero quería vivir esto a lo que mi cuerpo diera. Siendo presentadora veo la evolución de los concursantes y me apetecía vivirlo yo. Aquí son dos disciplinas, cantar y bailar, y la mejora se ve mucho. Quería averiguar hasta dónde podía llegar. 

¿Les inculca a sus hijos eso de que no vale solo el talento, que hay que trabajar?

El esfuerzo tiene su recompensa y hay que trabajar duro cuando no te sale. Como un deporte, que si lo practicas se te dará mejor. Es una habilidad adquirida. Yo seguiré cantando y bailando. Me apetece seguir, pero no profesionalmente, sino para mí, para mi voz, para mi físico, para mi salud. Hay que explorar los límites de cada uno. Esa es la enseñanza para todos. No sentirse limitado, porque muchas veces las limitaciones son autoimpuestas. Merece la pena explorar eso que crees que no puede ser y probablemente sea. 

Dijo en una ocasión que 'Tu cara me suena' era más difícil que 'El desafío', donde quedó tercera. 

En realidad son dos cosas diferentes, con dificultades distintas. Lo que pasa es que en El desafío el deporte tiene un peso importante, y yo soy muy deportista. Aunque nunca había hecho apnea ni me había puesto a 15 metros de altura. Fue muy difícil también y le eché horas. Pero me sentía como pez en el agua. Aquí hay un componente, que es superar el miedo escénico. Y cantar y bailar son palabras mayores. No, no hay programa más difícil que otro. Requieren de diferentes habilidades. 

«‘El desafío’ y ‘Tu cara me suena’ tienen dificultades diferentes. Pero aquí hay un miedo escénico»

David Bustamante elogia lo curranta que llega a ser.

Imagínate, David estaba en la final de El desafío el día que yo erré aquel tiro de arco. Le he entrevistado muchas veces, pero nunca habíamos trabajado mano a mano y ha sido impresionante verlo. David tiene algo mágico, que es estar igual de ilusionado que el primer día que recorrió este plató -porque es el de 'OT'-, y cruzó la pasarela. Le encanta estar aquí y eso tiene muchísimo mérito, porque teniendo esa voz es muy fácil acomodarse. Y él tiene esa cosa que yo quiero tener, de ser niños y dejarnos arrastrar por la ilusión. Que nos sigamos poniendo nerviosos, que nunca te sientas más grande que lo que estás haciendo ahí. 

Su dedicatoria tras cada actuación se ha convertido en un clásico. 

Enseguida me di cuenta de que para los que no somos cantantes, teniendo un elenco con unos buenísimos y grandes imitadores, era improbable ganar una gala. Entonces decidí dedicar mi actuación a quien crea que ha sido más feliz viéndola y se ha convertido en una dinámica. 

Una forma de acercarse al público.

Sí. Me han tocado canciones icónicas para el colectivo LGTBIQ+ y personajes muy jóvenes con un lenguaje muy nuevo, y eso es una gran suerte para mí, porque llevo muchos años haciendo tele -tengo 51- y encontrarme con un público joven me permite lanzar el mensaje a mucha gente con la que la tele no me había dado la oportunidad de conectar.

La presentadora ha aprendido a cantar para participar en 'Tu cara me suena'

La presentadora ha aprendido a cantar para participar en 'Tu cara me suena' / Manu Mitru

¿Sueña con imitar a alguien?

Me he dado cuenta de que Tu cara me suena no es un karaoke. Yo no canto lo que quiera. Me encantaría Cher, pero está fuera de mis posibilidades. Aquí he aprendido lo difícil que es la profesión de cantante. Si tuviera que elegir algún regalo para otra vida sería tener una gran voz, porque es un instrumento precioso que te hace sentir muchas cosas. 

Usted empezó en los informativos. ¿Contenta de haber dado ese giro al entretenimiento?

Soy periodista y estoy siempre muy atenta a la información, pero me hubiera perdido toda esta parte. Lo que he viajado, los trabajos que he hecho... A mí el entretenimiento me ha dado una vida. Me siento capaz de volver a hacer información, pero aquí hay una conexión con la gente más de piel. En otros países no está tan dividido, se puede ser más multidisciplinar. La seriedad no está reñida con el humor ni con pasártelo bien en la tele. No eres menos serio por bailar o cantar. Estoy muy feliz de que aquello pasara. No fue buscado: me quedé sin trabajo y me ofrecieron entretenimiento. Y ahora te diría que cómo me alegro.