La crítica de Monegal: Votar en Malta

Noche televisiva de elecciones europeas. Programa ganador: ‘Supervivientes’. Tele 5 va siempre a su bola. Prefirió dedicar su atención a Cayo Cochinos, en lugar de a Europa. Y venció. Esto de la tele va así, no le den más vueltas.

De las cadenas que hicieron noche electoral ganó La Sexta, seguida de cerca por el ‘especial’ de unos 60 minutos de Antena 3. Los informativos de TVE quedaron terceros, de tres. Vicente Vallés (A-3) estaba un poco mosca con el Ministerio del Interior. Decía: «Ya son las once y 21, y 22, y 23 segundos y se supone que Interior debería tener los datos disponibles. De hecho Interior los tiene desde hace hora y media por lo menos». Los datos le llegaron dos minutos después. Tampoco es una tragedia. Al final del programa, Vallés exclamó: «Y la pregunta és ¿dónde está Yolanda Díaz? No es la primera noche electoral que no aparece. En las últmas elecciones catalanas no apareció en una semana». Hoy ya sabemos por qué la señora Díaz no se dejó ver: se estaba restando de Sumar. Esta mañana he visto a Toni Comín, desde Perpinyà, en ‘Els matins’ (TV-3). Es curioso, Junts se ha quedado con un solo eurodiputado (tenía 3) y no obstante Comín estaba contento. Decía: «Después de diez años de empates (con ERC), ¡ahora el desempate ha quedado confirmado!». Y le invadía una gran satisfacción. O sea, aquí lo que interesa es que Puigdemont gane a Junqueras, aunque entre los dos hayan perdido en Catalunya casi un millón de votos. Vivir para ver.

Para amenizar la noche, en TVE hicieron un experimento. Mandaron a Carlos del Amor a ver cómo votaban en cinco países de la UE. Viaje relámpago de 36 horas. Malta fue el país más pintoresco que visitó. Es el Estado más pequeño de la UE. Carlos, plantado en la zona turística de Sliema, que es como el Castelldefels de La Valeta, nos decía que todas las votaciones en Malta superan el 72% de participación. Este viaje ha sido simpático, dentro de la intrascendencia. A mí el Del Amor que más me interesa es el de las entrevistas ‘La matemática del espejo’. El otro día estuvo con Isabel Coixet. La cineasta le contó que su abuela Trini tenía 18 hermanos. Su padre –el bisabuelo de Isabel– cuando nacía una niña lanzaba un gruñido. Si era niño lo celebraba matando un pollo. A lo mejor en Waterloo hoy también han comido pollo. El espejismo de haber ganado, habiendo perdido estrepitosamente.

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