Tú y yo somos tres
La crítica de Monegal: Parábola del negro que se hacía fotos con niños blancos
![El intermedio](https://estaticos-cdn.prensaiberica.es/clip/0bc940ff-67b7-4d2f-a8bf-1b679f6fa7fe_21-9-aspect-ratio_default_0.jpg)
El intermedio
![Ferran Monegal](https://estaticos-cdn.prensaiberica.es/clip/cd5d4526-8e63-4c57-87a0-fd49f2dc84c1_source-aspect-ratio_default_0.jpg)
![Ferran Monegal](https://estaticos-cdn.prensaiberica.es/clip/cd5d4526-8e63-4c57-87a0-fd49f2dc84c1_source-aspect-ratio_default_0.jpg)
Ferran Monegal
Crítico de televisión
Ferran Monegal
Aparece de vez en cuando en ‘El intermedio’ (La Sexta) el cómico y actor senegalés Lamine Thior, que lleva años residiendo en Andalucía. Nos hace unos ‘sketchs’, en apariencia humorísticos, que en realidad son afiladas parábolas. Es decir, a partir de un suceso, fingido o real, llegar por elevación a una verdad o profunda enseñanza.
El otro día nos habló de una especie muy habitual en los meses de verano: los ‘volunturistas’. Nos contaba que son criaturas blancas, occidentales, que de pronto les da un rapto de ‘solidaridad’ y se van a pasar unos días, a veces un fin de semana largo, a África, a ver a los negritos más desgraciados. Contaba Lamine que es un tipo de turismo al alza que practica el viaje exótico haciendo un ‘tour’ por algunas oenegés y en donde lo más importante es hacerse fotos con los niños, muchas fotos con muchos negritos, y subirlas inmediatamente a TikTok o Instagram. Se añaden comentarios sensibles y emotivos del tipo: «He estado visitando un orfanato de negritos y estos niños me han enseñado más a mí que yo a ellos. ¡Son tan felices con tan poco!», y piadosos comentarios similares. A estos ‘volunturistas’ les entra un gran confort existencial. Se sienten por unos días como estupendos salvadores blancos.
Y Lamine se preguntaba: «¿Qué ocurriría si el ‘volunturista’ fuese negro, y se dedicase a recorrer Europa haciéndose fotos con niños blancos a los que no conoce de nada?». ¡Ah! El ‘tour’ imaginario de Lamine, un negro adulto, recorriendo Europa y subiendo a la red muchas fotos abrazado a desconocidos y hermosos niños rubios y blancos, acaba con un tremendo balance. La policía le detiene, le tumba boca abajo, le pone los grilletes, y se lo lleva a una mazmorra de la comisaría más cercana.
Esta parábola que nos ha construido Lamine Thior, además de hacernos pensar, tiene un valor añadido: provoca incomodidad en la audiencia blanca que le estamos observando. Es la mirada de la ‘negritud’, un prisma lúcido que entronca con el espíritu del político y escritor martiniqués Aimé Cesaire, o aquel otro senegalés, tan principal, Léopold Sédar Senghor. Les conocí a través de los escritos del catedrático y gran internacionalista Roberto Mesa, cuyos libros mitigaban mi ignorancia y de los que hoy ya nadie habla, sumidos todos en el eufórico sifón de una televisión que hace de su mediocridad, estandarte.
Suscríbete para seguir leyendo
- Esta fruta no la come casi nadie, siempre está en los supermercados y está llena de proteína y antioxidantes
- La nueva multa de la DGT a quien no lleve esto en el coche a partir de agosto
- El apellido de origen gitano que tienen más de tres millones de españoles
- Crisis en una escuela compleja de Badalona: pierde a 20 profesores de un plumazo tras el proceso de estabilización docente
- ¿No sabes qué hacer con tanto calabacín? Tres recetas para aprovecharlos
- Vecinos de Sants piden al Ayuntamiento de Barcelona que compre su bloque para no quedarse sin alquiler
- Un brote de salmonelosis en un bar de Barcelona deja al menos 22 afectados tras comer tortilla de patatas
- Muere de forma violenta la influencer Catalina Gutiérrez a los 21 años