Los suicidios de adolescentes crecieron con 'Por 13 razones'

Los suicidios entre jóvenes estadounidenses aumentaron casi un tercio en el mes posterior a estreno en el 2017 de 'Por 13 razones'. En esta popular y controvertida serie de televisión de Netflix aparecía una adolescente cortándose las muñecas.

Según un estudio publicado el pasado lunes, 28 de abril, en el  Journal of Child and Adolescent Psychiatry, y avalado por los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de EEUU, tras la emisión en la conocida plataforma por 'streaming' de la primera temporada de la serie (abril del 2017) se constató un aumento del 28,9% en las tasas de suicidio entre los jóvenes estadounidenses. 

También señala este informe que las tasas de suicidio entre los jóvenes de 10 a 17 años fueron más altas en los meses posteriores al estreno, con 195 muertes por suicidio más entre abril y diciembre de 2017, en comparación con las previsiones basadas en datos anteriores.

Los responsables de este estudio han matizado que el trabajo tiene varias lecturas, ya que no podían establecer un "vínculo causal" directo entre 'Por 13 razones" y el aumento en las tasas de suicidio.

Un portavoz de Netflix ha señalado a EL PERIÓDICO que actualmente están analizando este estudio, "ya que entra en conflicto con el realizado la semana pasada por la Universidad de Pennsylvania. Es un tema sumamente importante y hemos trabajado mucho para asegurarnos de que lo tratamos de una manera responsable", apuntan desde la plataforma estadounidense. 

Según el estudio mencionado por Netflix, los espectadores que dejaron de ver la segunda temporada mostraron un mayor riesgo de suicidio y menos optimismo sobre el futuro que los que continuaron hasta el final. Pero los que vieron toda la segunda temporada presentaron menos ideas suicidas y autolesiones en relación con aquellos que no vieron la serie. También apunto que los que vieron toda la segunda entrega  presentaban más probabilidades de expresar interés en ayudar a una con tendencias suicidas. 

Basada en el libro homónimo (que también provocó una controversia), la serie narra la historia de una adolescente que, tras morir, deja 13 cintas de casete en las que describe las razones de su suicidio. En el episodio final de la primera temporada aparece cortándose las muñecas en una bañera.

La escena provocó un alud de críticas de padres y los profesionales de la salud, lo que llevó a Netflix a incorporar mensajes  de advertencia en la serie, en los que avisaba del contenido y aconsejaba a quien se sintiese incómodo por la historia contactar con grupos de apoyo.

Pese a la polémica, el éxito de la serie llevó a Netflix a producir una segunda temporada (ya al margen del libro original), que se estrenó en mayo del 2018, y ya ha contratado una tercera entrega, que todavía no tiene fecha de emisión.

Aunque desde Netflix aún no han dado su opinión sobre este estudio, su presidente ejecutivo, Reed Hastings, ya justificó la renovación de la tercera temporada en una junta de accionistas, en junio del 2018. "'Por 13 razones' ha sido un gran éxito. Es un serie atractiva. Es controvertida, sí, pero nadie está obligada a verla", dijo Hastings.

Los autores del estudio, profesionales de varias universidades, hospitales y del Instituto Nacional de Salud Mental de EEUU, han explicado que sus hallazgos "deberían servir como un recordatorio para tener en cuenta los posibles impactos no deseados de la descripción del suicidio, y el importante papel que la industria del entretenimiento y los medios de comunicación, que deben ser responsables con este problema".