Hostelería

Tarragona pone coto a las terrazas de bares: multas de hasta 3.000€ o retirada de licencias

El texto considera tres grados de gravedad: infracciones leves, graves y muy graves. Con la nueva propuesta también se quieren unificar todos los horarios de cierre

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Terrazas en la plaça de la Font, una de las zonas más tensionadas por la acumulación de establecimientos hosteleros.

Terrazas en la plaça de la Font, una de las zonas más tensionadas por la acumulación de establecimientos hosteleros. / Jan Magarolas

Jan Magarolas

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El Ayuntamiento de Tarragona se ha puesto firme con las terrazas de los establecimientos de hostelería y quiere empezar a poner freno a la sensación de ciudad sin ley de la que se han quejado algunos vecinos estos últimos meses. Después de presentar la Ordenanza de Terrazas hace un mes, ahora la concejalía de Comercio y la Guardia Urbana han presentado la propuesta de un reglamento sancionador pensado para darle cumplimiento. El nuevo régimen, de aprobarse, tipifica las infracciones y les atribuye multas de entre 100 y 3.000 euros para los establecimientos, en función de la gravedad, o hasta la retirada de la licencia para los casos más graves. Sin embargo, como muy pronto el texto propuesto no estaría aprobado hasta finales de año.

El régimen sancionador propuesto por el Ayuntamiento, y que ahora tendrán que debatir los partidos políticos, establece tres niveles de gravedad de las infracciones: leve, grave y muy grave, y los casos y circunstancias que determinan cada uno de ellos. Cometer tres infracciones leves comportarán una de grave, y tres de graves comportarán una de muy grave.

En este sentido, el reglamento está pensado para que las multas estén proporcionadas en cada caso y tendrán en cuenta varios factores: si la terraza o la actividad comercial perturban la normal convivencia ciudadana, el descanso de los vecinos, la salubridad o el ornamento público. Las sanciones por infracciones leves serán de entre 100 y 750 €; para las graves, oscilarán entre 750€ y 1.500 €; y para las infracciones muy graves, la multa será de entre 1.500 y 3.000 €.

"El régimen sancionador recoge la posibilidad de sancionar aquello que preocupa la ciudadanía, ya que hasta ahora no lo podíamos hacer", reconocía Manuel Vázquez, el intendente de la Guardia Urbana de Tarragona. También se introducen medidas sancionadoras no económicas, como la retirada de la licencia o las medidas cautelares para evitar la repetición de las infracciones. En caso de perder la licencia, el responsable del establecimiento tendría que volver a empezar el proceso para conseguirla.

"Acabar con la sensación de impunidad"

Además del régimen sancionador, el Ayuntamiento también ha incluído varias novedades en la Ordenanza de Terrazas. Por una parte, se tendrá en cuenta el código de accesibilidad vigente. Por otra parte, se creará una comisión técnica encargada del seguimiento de la cuestión de las terrazas con el objetivo de resolver las dudas que genere la ordenanza en los casos no previstos. Esta comisión estará formada por un técnico, un jurista y personal de la Guardia Urbana.

Otra medida que prevé la ordenanza es la instalación de una cédula al exterior de los establecimientos para que tanto la Guardia Urbana como la ciudadanía pueda comprobar las características de la terraza. La Guardia Urbana asegura que necesitará la contratación de un nuevo técnico encargado de la gestión administrativa de las sanciones, pero no de más efectivos, ya que ya cuenta con una unidad de inspección administrativa.

"Sabemos que este reglamento no es fácil, que no va a gustar a todo el mundo, pero intentamos que sea la ordenanza de la convivencia para encajar la hostelería y la ciudadanía", explicaba la concejala Comercio, Montse Adán, durante la presentación, que añadía que "no hay afán de persecución". Con el nuevo régimen sancionador se quiere contar con las herramientas necesarias para el seguimiento de los casos y se quiere "acabar con la sensación de impunidad" de algunos establecimientos.

Unificar los horarios

A día de hoy, lo que más preocupa al consistorio y a la consejería de Comercio es la disparidad de horarios de cierre de los establecimientos de hostelería, a merced de los intereses comerciales de cada uno. La nueva ordenanza prevé unificar los horarios de todos los locales de la ciudad en dos horarios: el de invierno y el de verano. Por lo general a lo largo de todo el año, de lunes a jueves se cerrará a las 24h, y los viernes, sábados y vigilias de festivos se cerrará a la 1 h de la madrugada. Habrá regímenes especiales para Carnaval, Semana Santa y Navidad. En verano se ampliará el horario desde el 1 de junio hasta el 30 de septiembre, y solo los viernes, sábados y vigilias se podrá cerrar hasta las 2 h de la madrugada.

El calendario

Después de la presentación del nuevo texto, los grupos municipales tienen hasta el 13 de septiembre para hacer enmiendas, que se incluirán en el redactado si se considera oportuno. El consistorio prevé llevar el texto final al pleno, como muy pronto, en noviembre, para una aprobación inicial, que abriría un período de alegaciones y conduciría a la aprobación definitiva del texto.