Así es el puente tibetano de Andorra

Andorra cuenta desde este verano con un nuevo polo de atracción turística de gran altura: el puente tibetano de Canillo.

Con 603 metros de longitud, es la segunda pasarela colgante más larga del mundo.

Enclave emblemático: El puente tibetano de Canillo sobrevuela el Valle del Río, uno de los parajes naturales más bonitos de Andorra.

De vértigo: A sus 603 metros de longitud se añaden los 158 metros desde la pasarela hasta el suelo.

Tocando las nubes: En el lado del collado de Cauba la pasarela se abre paso a 1.884 metros sobre el nivel del mar. Y en el flanco de la Armiana, el recorrido por la estructura se inicia desde los 1.875 metros.

El Comú de Canillo ha invertido 4,6 millones de euros en el puente. Este vídeo muestra su proceso de construcción.

Aforo limitado: El puente tiene una capacidad de carga de 600 personas a la vez, aunque se estima que lo atraviesen unos 165 usuarios por hora, es decir, unos 60 visitantes simultáneamente.

Holgura de paso: La pasarela mide un metro de ancho (en las barandillas es de 1,7 metros).

Una mole: El peso total de la infraestructura es de 200 toneladas métricas.

Robusta sujeción: Los cuatro cables portantes de la pasarela son de 7,2 centímetros de diámetro amarrados en los extremos a dos bloques de hormigón (de 51,06 metros cúbicos en la Armiana y de 27,5 en la Cauba).

'Ecofriendly': El proyecto intenta causar el menor impacto medioambiental. La tala de árboles y las excavaciones han sido mínimas y la dimensión del cableado permite que los pájaros puedan detectarlo.